22 de diciembre
Ya habían pasado cinco días desde que José llegó a Brasil, esperaba encontrarse con su mamá y su papá, se entristeció al darse cuenta que sus padres andaban en Río de Janeiro, de vacaciones.
Lleno de rabia, dolor, tristeza pidió a su tía que no les dijera que el había llegado, pues quería darles una sorpresa.
El primer día que llegó, José decidió salir a caminar, pasó por aquella Iglesia que cuando el era un adolescente le abrió las puertas para darle los momentos más felices de aquel corto tiempo.
A lo lejos pudo ver a aquel Pastor que con tanta paciencia le enseñó a tocar la guitarra.
José se ocultó tras un árbol para poder ver lo que hacían, al lado del pastor pudo ver a aquel chico con quien estudió toda la primaria, aquel que llegó a considerarlo mejor amigo.
Lo vio más alto, pero para el seguía siendo aquel adolescente de 12 años con quien compartió lindos momentos de amistad.
Por su mente pasó aquel día cuando su amigo llegó a buscarlo para ir a la Iglesia, pero su mamá lo corrió.
Sintió tristeza al verlo, aunque no quería aceptarlo, José extrañaba esos momentos tan felices, sólo habían pasado cinco años, pero en todo ese tiempo el había cambiado mucho. Se sentía golpeado por las circunstancias de la vida, por todo lo que había pasado.
Hoy ya es 22 de diciembre, en Brasil, diciembre es un mes caluroso, al menos en la capital.
José estaba tumbado en la cama cuando escuchó las voces de sus padres.
Bajó las escaleras lo más rápido que pudo.
- MAMA- dijo extendiendo los brazos.
Julliany la mamá de José se quedó pasmada al ver a José en casa.
- No les alegra que su hijo haya venido a visitarles?- preguntó José forzando una sonrisa.
-Claro, hijo, ¿Por qué viniste?
-Vine porque ya me gradué y pienso quedarme aquí.
- No José no te quedarás, recuerda que tú tía te buscará trabajo en su empresa- Dijo Julliany con nerviosismo.
- Lo que quiero decir es que esté mes me quedaré con ustedes.
-Ok pues, Bienvenido hijo, puedes ponerte cómodo - dijo Pedro.
José nuevamente subió a su habitación, se puso a pensar como iniciaría a investigar.
Miró por la ventana y vio a su tía que hablaba por teléfono, al parecer discutía con alguien.
Antes de venirse a Brasil, José se dio cuenta que el matrimonio de su tía no estaba bien.
Empezó a sentir una opresión en el pecho. Algo que sí odiaba José era ver a una pareja discutir. Ver a sus papás discutir le causaba rabia.
Recordó aquella pequeña discusión que tuvo con Aurora.
-Hubiese deseado nunca haber discutido, mejor no la hubiese juzgado por su decisión de ser cristiana- pensó mientras seguía viendo por la ventana.
Salió rápidamente de la casa, un nudo se le formaba en su garganta, cada vez que recordaba a Aurora su corazón se rompía.
Se había dicho así mismo que no volvería a enamorarse de ninguna otra chica.
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En la quinta, los chicos y chicas estaban muy emocionados, ya era medio día, todos estaban por los alrededores.
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EL CUARTO DE LOS SUEÑOS (Trilogía) [Los Sueños De Dios]
Ficção AdolescenteTrilogía: Los Sueños De Dios Libro I ☆ ☆ ☆ José es un adolescente de 17 años. Sus padres lo enviarán a vivir con su tía, lejos de su país. Haci...