»Vengan a mí los que estén cansados y agobiados, que yo los haré descansar. Acepten mi enseñanza y aprendan de mí que soy paciente y humilde. Conmigo encontrarán descanso.
Mateo 11:28
Narra Aurora
No sabía que decirle, me va despreciar si se da cuenta de lo que realmente vivo.
Necesito salir, despejarme, odio mi vida, odio los fines de semana. Los días que voy a clase son los mejores, mientras otros no quieren ir al colegio, yo desearía pasar todos los días ahí, por que es el único lugar donde mi tío no me está molestando, el único lugar donde no escucho su horrorosa voz, por eso cada día que voy al colegio doy lo mejor en cada clase, a pesar de todo lo horrible que es mi vida.
El colegio para mí es como mi hogar, me divierto y aunque no muestre lo que realmente vivo, me siento bien, soy popular, tengo buenas calificaciones, se ocultar lo que realmente vivo a la perfección, pero ahora todo a cambiado, siento que ya estoy cansada de vivir fingiendo, a veces quisiera hablar con alguien pero no puedo, a la única persona que me atreví a contarle todo sin conocerla, fue a esa chica, Hellen, no se como, pero me sentí bien cuando lo hice.
Me preocupa saber como está Sahúl, ayer fui a verlo, pero no tuve tiempo para nada, como siempre ahí estaba mi tío, controlándome...lo odio.
Necesito saber como está Sahúl.
Marco el número de Hellen.
- ¡Hola, Dios te bendiga Aurora!- dice muy feliz.
- Hola, ¿sabes como sigue Sahúl?
-Mejor, ayer Dios hizo un gran milagro en su vida- dice muy emocionada y empieza a relatarme cada cosa que sucedió.
Me quedo pensando en que si ese Dios podría salvarme a mí también.
-¿Oye estas ocupada?- pregunta
- No, por los momentos no.
- Te gustaría venir a mi casa y charlar un poco.
-mmm no se
-Vamos, sólo vivo con mi tía, te prepararnos una rica comida. Se que es difícil para ti lo que vives en tu casa, así que no te vendrá mal despejarte un poco... ¿Qué dices?
- Ok, ¿segura que sólo vives con tu tía?
-Si, además ella te quiere conocer.
¿Conocerme?¿Por qué querría conocerme?
Corto la llamada y empiezo a prepararme.
Mi tío no está, su actitud a sido rara, primero cuando José me habló el estaba gritando muy estresado, casi siempre se estresa y cuando lo hace, se las desquita conmigo, pero hoy lo he visto más preocupado, se me hace que alguien lo anda persiguiendo... Si es así, deseo que lo atrape, que alguien se atreva a denunciarlo, que reciba el castigo que merece por haberme destruido la vida.
Me coloco un Jean negro, busco un suéter rosa ancho, aunque el día está soleado, siento frío, Salgo de la casa.
Hoy no me he inyectado, es por esa razón que el cuerpo me tiembla, no quiero que Hellen me vea así, tampoco quiero que se den cuenta que me inyecto, pero ya le dije que iba a ir y no puedo quedar mal.
Toco el timbre, sale Hellen a recibirme.
- Hola, ¡viniste!- dice abrazándome- pasa.
Entro a la casa, Hellen me pide que me siente en un sofá celeste, las paredes de la casa son en blancas, no es tan grande, pero transmite paz entrar en este lugar, veo un estante de libros muy bonito, la casa transmite un aroma único, no es como donde yo vivo, mi casa es más lujosa, pero sólo se respira olor a cigarrillo, licor, odio, en pocas palabras, aunque sea lujosa y este limpia, da asco.
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EL CUARTO DE LOS SUEÑOS (Trilogía) [Los Sueños De Dios]
Teen FictionTrilogía: Los Sueños De Dios Libro I ☆ ☆ ☆ José es un adolescente de 17 años. Sus padres lo enviarán a vivir con su tía, lejos de su país. Haci...