One Shots Twiyor.

Besame...

Feliz cumpleaños Giu. giulyzarpaignea

Al revelarse las identidades entre ellos, después de todo el caos que todo aquello conllevo y todo por lo que tuvieron que pasar para que Yor volviera a confiar en él, para que pueda creer que en realidad él la amaba, fue largo, pero ya estaban juntos nuevamente, Yor estaba ahí nuevamente junto a Anya, a su esposo y a su perro. Al principio, aun fueron lento, como si Yor tuviera miedo de que él siga mintiendo, pero ahora, después de escucharlo hablar con ella y con su hija, como la defendió con su agencia, como la defendió de Fiona, ella estaba segura que ahora el no estaba mintiendo. estaba feliz de poder estar ahi nuevamente.

Aquel sábado, no era un dia extraordinario ni nada por el estilo, solo era un fin de semana como cualquiera de la familia Forger, Anya le pidió a ambos que jugaran con ella, ambos padres accedieron, su hija se estaba haciendo grande, ambos creían que había desperdiciado un año entero de Anya con ellos por todas las mentiras o la misión de Loid, la presión sobre sus estudio, entre otras cosas. Así que ahora, cada que pueden estar un momento sacándole una sonrisa a su hija, para ellos era suficiente.

Anya ahora tiene muchos peluches, tantos y de toda clase como para jugar al zoologico, ni Yor ni Loid comprenden del todo los juegos de ella, pero hacen exactamente lo que ella dice que ellos hagan, Loid es el malo que inteta robar a los animales, que segun su hija son los que más valen em el mercado negro. Yor es la guardia del zoológico y Anya por su puesto es el héroe de todo esto.

Anya parecía estar divirtiéndose a gusto, para sus padres eso bastaba y sobraba. Hasta que se hizo tarde para Anya, jugando toda la tarde cayó rendida alrededor de las nueve de la noche, durmiendo en lo que ella construyó con los cojines de la sala, un fuerte donde llevó a todos sus peluches para jugar.

Yor se quedo mirandola dormida entre todos sus peluches, con la luz tenue de una lampara al costado de la habitacion, ella tambien podria quedarse a su lado a dormir, sin embargo no queria moverse de los brazos de Loid, ella acostada en su pecho mientras el estaba apoyado contra el sillon manteniendo a Yor cerca de el con un brazo alrededor de su cintura, la otra mano estaba ocupada jugando con el cabello negro de ella que tanto amaba.

—Se va a picar mi cabello si lo sigues tocando —protestó Yor.
—Lo siento, pero realmente me gusta tu cabello —contestó dejando en paz su cabello, en lugar de eso, lo hizo a un lado descubriendo su piel del hombro expuesta por su suéter rojo usual.

Dejó un beso en su piel, ella jadeó de sorpresa y se volteó a él alarmada.

—Oye no hagas eso, Anya está aquí y puede vernos —murmuró Yor mirándolo a los ojos.
—La llevaré a su habitación ahora, tenemos que ordenar este desastre —dijo él besando nuevamente su cuello—. Por eso no quería levantarme y disfrutar de ti ahora.
—Pero no ahí, no frente a Anya...

Loid sonrió contra su piel, acomodo su cabello para que cayera como cascada por su espalda, tomó su mentón entre su pulgar e índice, volteando por completo el rostro de Yor al de él, ella entrecerró los ojos, Loid acercó sus labios a los de su esposa, rozandolos brevemente con los suyas, pero no la beso, solo la estaba provocando.

—Loid... —murmuró ella.
—Lo sé, frente a Anya no... pero, ella está dormida, además es solo un beso preciosa, no haré nada más.
—Ella está aquí, nos puede ver...

Loid gruño, volteó la mirada a su hija que estaba completamente dormida ahí, sin embargo, no quería molestar a su esposa, odiaba no poder besar sus labios por horas lo que le duraba su molestia a ella.

—La llevaré a su cama entonces, volveré por ti, mi amor —sentencio besando la comisura de sus labios antes de dejarla sola en el piso de la sala.

Loid camino con cuidado por todos los peluches evitando pisarlos, se agacho completamente para cargar a su hija entre sus brazos, evitando en todo momento que la pequeña se fuera a despertar y ambos tuvieran que sobornar a su hija para que durmiera temprano a pesar de que era sábado. Yor vio conmovida la escena, cada vez que tenía un momento para poder apreciar a esos dos juntos y como ella estuvo a punto de romper todo esto se sentía culpable. Se obligó a sí misma a hacer a un lado esos pensamientos. Mientras tanto, él caminó por el pasillo hasta la habitación de Anya, abrió las sábanas y acomodó a la niña en su cama, la cubrió y la arropo suavemente. Definitivamente él no hubiera pensado que esa niña y esa mujer hubiera sido su perdición. Sonrió para sí mismo.

—Cuida de ella —le dijo a Bond permitiendo ahora que él subiera a la cama con Anya.

Loid salió de la habitación de Anya con cuidado de no meter mucho ruido al cerrar la puerta y en cuanto volvió a la sala de estar, Yor ya había acomodado los cojines de los sillones en su lugar, estaba doblando la sabana que usaron para hacer el fuerte, Loid suspiro pesado, se acercó a ella por la espalda, la abrazó por la cintura pegando su espalda a su pecho y besando ahora sí descaradamente su hombro, cuello y toda la piel expuesta que dejaba su suéter rojo, ella jadeó y se rió al saber que ahora no iba a poder detener a Loid y que tampoco ella quería.

—¿Te aseguraste que ella esté cómoda? —dijo ella entre jadeos, mientras que él dejaba besos húmedos por su piel.
—Hermosa, me ayudaria que mientras te estoy besando de esta manera no menciones a nuestra hija, está en el lugar más seguro de este plante, amor. Tiene a la mejor asesina como madre...

Yor sonrió, asintió con la cabeza y se rindió. Se las arregló para darse la vuelta en sus brazos para quedar cara a cara con él.

—Lo siento...
—¿Por qué te disculpas, preciosa?
—Porque estuve apunto de romper esto, tu relación con Anya, conmigo... es por eso que ahora no quiero que ahora ella nos odie por traumarla, yo...
—Mírame —pidió él sujetando su mentón con dos dedos.

Yor lo miró fijamente. Para ella ahora, todo lo que dijo y de donde empezó esa molestia ahora eran , algo tan pequeño y sin importancia. Estuvo a punto de retractarse y su esposo habló.

—Ya te dije, necesitabas tiempo para pensar, para perdonarme y creer que lo que yo siento por ti es real. No hay nada de malo en pedirme que me calme cuando este Anya cerca... Es solo que... saber que estás aquí nuevamente, conmigo...

Él apoyó la frente contra la de ella, asegurándose que nada de esto era una mentira, un sueño o alucinación.

—Casi me hace pensar que no es real, besarte, tocarte... me hace sentir que esto es real. Que me amas y que me escogiste. A pesar de todo, te amo.

Yor le tocó el rostro y acarició sus mejillas.

—Bésame entonces... Loid...

Antes de que ella terminara de hablar, él ya había estampado los labios contra los de ella, había querido toda la tarde besarla para hacerle saber a si mismo que él ya no estaba ahí únicamente por la misión, para callar cualquier inseguridad que podría estar creciendo en su mente ansiosa, ella correspondió con la misma intensidad, sus labios besando los suyos, callando sus propios pensamientos que iban en aumento. Pero en los labios del otro, en su agarre y sus caricias era todo lo que necesitaban para saber que ambos estaban en esto.

—Lo se, Yor... —¿Cómo sabes lo que iba a decir? —preguntó ella con un brillo especial en sus ojos.—Porque te conozco, hermosa. Te amo. 

...

Se puede decir que escribi esto para calmar mi mente que solo sabe planear cosas angustiosas, para Giu tambien que ha sido una buena amiga, por leer mis problemas y ayudarme con ciertas cosas, gracias y feliz Cumpleaños.