Eres hermosa.

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Día 3 Cicatrices.

Yor descansaba desnuda y agotada frente a él, abrazaba a Loid a ella con la frente contra su pectoral izquierdo, Twilight tenía sus brazos por sus costados con los labios pegados a su cabeza. Movió ligeramente sus brazos que descansaba contra el de ella revelando una marca en su piel en diagonal y grande. Puso su pulgar sobre la marca analizando de qué podría ser.

Era profunda, la piel era más oscura que el resto de su brazo, parecía un cuchillo o una daga. Apretó su brazo con la mano suavemente y besó su cabeza nuevamente. Si el pudiera protegerla protegería de todo el daño que pudo haber tenido anteriormente, de ahora en adelante quería cuidarla, darle todo lo que ella merecía.

Para Loid ella era maravillosa, era dulce y suave con Anya, le gustaba las pequeñas cosas que hacían a Yor ella. Cuando ambas están tomadas de la mano, cuando la cargaba o la abrazaba, su sonrisa cuando les cocino algo y a ambos les gustó. Se había esforzado tanto por ser una perfecta esposa y madre para los demás que lo único que logró fue que ella fuera perfecta para Twilight. Era lo que él necesitaba, una luz, una persona que le enseñara lo bueno de la vida.

—Loid —susurró moviendo su cuerpo un poco cuando noto su toque sobre su brazo.
—Buen día mi amor, no quería despertarte, lo siento —soltó su brazo acariciando su piel con el dorso de su dedo.

Ella por instinto dejó de abrazar al hombre y cubrió sus cicatrices con sus manos y brazos, envolviéndose a sí misma, Loid notó su nuevo comportamiento, estaba ocultando sus cicatrices que no vio por las luces apagadas ayer en la noche. Tragó saliva, tomó el mentón de Yor con los dedos levantando su mirada a él.

—No debes ocultarte de mí, también tengo mis cicatrices —tomó su mano y la apoyó contra su pecho, movió los dedos de ella por su marca, era circular, estaba casi segura que podría tratarse de una bala, pero decidió no preguntar.
—No debes contarme si no quieres. Pero es diferente para ti que para mí. Yo debería... —dijo Yor pero fue interrumpida por la voz de su esposa
—Tú no vas a sacar la carta del "debería"... Tú no debes nada, no debías aprender a cocinar. Así que no. No debes tener un cuerpo sin marcas y como en las revistas. Para mí, eres perfecta tal y como eres.

Yor se sonrojó abriendo los labios sin poder decir nada en cuanto escuchó esas palabras en su voz. Siempre le había dicho que era suficiente, para todo. Pero antes no estaba enamorada de él, antes no se habían besado o tocado como ahora lo hicieron.

—¡Loid! —se quejó ocultando su rostro con las manos.

Twilight sonrió y rió al mismo tiempo que abrazaba a Yor nuevamente besando repetidas veces su frente.

—No me hagas esto —susurró Yor avergonzada.
—¿Hacerte qué?... si eres tan hermosa. No me importan tus marcas, porque eres lo que siempre quise. Cabello negro, ojos rojos y expresivos, piel suave y sobre todo, me amas... nunca creí que alguien podría amarme como tú lo haces.
—Pero tu esposa anterior te amo...

Loid tragó saliva y apretó los labios, Yor al escucharse a sí misma negó con la cabeza inmediatamente.

—Lo siento. No quería mencionarte algo que...
—Está bien, Yor, todo está bien —ahuecó su mejilla acariciando su piel con el pulgar.

Yor, no existe ninguna esposa anterior, nadie me ha amado antes como tú lo haces. Ojalá pudieras saberlo.

—Lo siento.
—No hay nada que lamentar —porque no existe esposa anterior—. Ahora tú estás aquí, y te amo como tú a mí —solamente te amo a ti—. Eres todo lo que quiero y no necesitas ocultar tus cicatrices. Eres hermosa tal y como eres.

Atacó sus labios evitando que ella volviera a disculparse por algo que no tenía la culpa, Yor cerró los ojos inmediatamente dejándose llevar por sus labios, se besaron tiernamente con la luz del sol entrando por la ventana detrás de Loid, el hombre subió su pierna a su costado derecho, Yor se separó de sus labios cuando sintió que él empezó a bajar sus besos por sus cicatrices. Una pequeña en su hombro izquierdo, bajando al valle de sus senos besándola entre los senos, era una cortada, ella sonrió enterrando sus dedos entre su cabello rubio. Twilight beso cada marca que encontraba en su piel, dándole el mensaje de que la aceptaba tal y como era. Cuando terminó fue el turno de Yor de copiarle la idea, aceptando las heridas emocionales y físicas que él podría tener.

—Mamá, papi —llamó Anya desde la puerta.

Yor cubrió su cuerpo inmediatamente con la camisa de Loid mientras que él se puso rápidamente la camisa de su pijama y Anya abrió la puerta encontrando a sus padres acostados frente a frente.

—Hola Anya —susurró Yor con sus mejillas teñidas de rojo.
—Te dije que tocarás la puerta antes de entrar —protestó Loid.
—Lo siento, iré por Bond —salió nuevamente de la habitación.

Yor apretó sus labios y volvió a subir los ojos a él mostrándole esa mirada de cachorro por la que Twilight se comenzaba a sentir débil. Cada que ella le mostraba esos ojos él sentía que su corazón se apretaba en su pecho.

—Ella no debe estar acostumbrada a verme contigo en esta cama... debería irme a mi habitación.
—Deja de sentirte insegura con todo. Ella te ama, yo te amo. Estamos cómodos contigo viviendo con nosotros, eres nuestra luz, hermosa, pero tal vez deberíamos cambiarnos.
—Sí, no quiero que ella me vea así, se puede asustar con mis marcas.

Loid negó nuevamente con la cabeza.

—No. Para nada. Los niños no juzgan como los demás, Anya no te va a juzgar, ahora ve por tu ropa —dejó un beso fugaz en su sien y se levantó a cambiarse, fue a lavarse las manos y luego se unió a Anya en la sala para preparar el desayuno.

Yor se levantó y se escabullo hasta su habitación, se puso ropa lo más cómoda que encontró para un sábado en la mañana que no haría nada más que estar con su familia. Además que hoy sería el día en que mudaría sus cosas oficialmente a la habitación de Twilight.

La cicatriz en su corazón de no haber tenido padres la estaba curando con criar a Anya, sonrió de lado apoyando su cuerpo contra la pared encontrando a Loid y Anya haciendo el desayunó. Para Yor, esto ya no era para mantener su imagen libre de ser una asesina, para Yor esto ya era en serio. Amaba a Anya como si fuera su hija y a Loid como si fuera su verdadero esposo. Se acercó a Loid y lo abrazó por la espalda restregando su rostro contra su hombro.

—Gracias, por aceptarme con todas mis cicatrices.

Twilight envolvió sus manos finas con las suyas. Y ladeó la cabeza besando su frente.

....

Decidí hacer la primera edición del Twiyor Week porque en ese momento no lo sabía y luego no tenía ideas pero ahora no paro de imaginarme a ellos y necesito hacer escenarios de ellos.

One Shots Twiyor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora