One shots F1 (Hot)

Lewis Hamilton🏎️ (61)

🔥Labyrinth🔥

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Sus manos me toman de la cintura conforme avanzamos por los largos pasillos al aire libre, rodeados de las paredes de arbustos que se ciernen por encima de nosotros.

Aprovecha para restregarse contra mí cuando me detengo tratando de decidir si debemos seguir por la izquierda o por la derecha.

Su notoria erección contra mi trasero, desconcentrándome de nuestra actividad recreativa de hoy.

-Hamilton, basta ya!

-¿Hamilton?.- preguntó divertido.- ¿Ya no soy "mi amor"?

-Lo serás cuando me dejes concentrarme. Ven, estoy segura de que casi llegamos.

Lo tomé de la mano, incitándolo a seguirme. Sé que preferiría estar haciendo otra cosa, lo que sea, pero hace esto solo por mí, porque sabe lo mucho que me gustan los laberintos... y porque es una actividad obligatoria por parte de de los equipos. Quieren que los pilotos convivan más pero sin perder su espíritu competitivo. Los 20 están participando.

Finalmente llegamos al centro de la atracción, donde los caminos se conectan. Solo hay 4 entradas, 4 formas de llegar, y nosotros habíamos sido los primeros en hacerlo.

-No puedo creer que me convencieras de hacer esto.

Lo miré con diversión.

-¿Hacer qué? ¿Recorrer un laberinto? Por favor, Lewis, es divertido.

-Solo es dar vueltas y vueltas de nunca acabar.

-¿No es eso lo que haces cada semana en las carreras? Explícame la diferencia.

-Que... pues... que... ay no sé, mínimo en las carreras tengo la velocidad. Aquí solo estamos dando vueltas en círculos.

-Les ganaste a los demás, eso debería motivarte. Además, ya llegamos! Russell va a tener que pagarme 20 dólares.

Mi novio me observa con una sonrisa orgullosa.

-Pues... yo puedo hacerte llegar a un lugar diferente...- me jaló hacia él, haciéndome sentar sobre su regazo.

Desde que estoy con Lewis, me di cuenta de que no tengo problema con hacerlo en lugares públicos. Lo hemos hecho en el garage de Mercedes mientras arreglan su monoplaza, detrás del área de entrevistas en el paddock e incluso en un avión. Al parecer estamos a punto de agregar un laberinto a la lista.

El lugar es bonito, las paredes de arbustos son lo suficientemente altas como para cubrirnos por si alguien puede vernos... pero hay 4 entradas que dan al centro, que es justo donde estamos nosotros.

-¿Aquí? ¿Estás seguro?

-No es como que el estar en público nos hubiera detenido antes.- sus labios dirigiéndose a mi cuello, besándolo con fuerza.

Sus manos deslizándose debajo de mi sudadera, deteniéndose en mis pechos, rozando mis pezones con las yemas de sus dedos, excitándome rápidamente. Y él se dio cuenta de eso.

-¿Te gusta, preciosa? Puedo seguir haciéndolo...- una de sus manos bajando por mi cuerpo hasta instalarse en el borde de mi falda, que no significa mucha dificultad para él al meter su mano finalmente debajo de la tela, encontrándose con mi centro húmedo.

Lo escuché sonreír.

-Puedo sentir cuánto quieres esto, ¿segura estás dudando? ¿No te acuerdas de lo buena que fue la vez pasada?