NAMLA //The Mandalorian//

THE MEETING

(PARTE 1)

No mentiré. Había un ambiente extraño en la ciudadela. Todos parecían nerviosos. Y algunos hasta cautelosos. Suponía que por la mediana cantidad de guardias dispersados por todos lo puntos principales de la ciudad algo grande pasaba.

Ajusté bien mi capa oscura a mi cuerpo, ocultando a la perfección mi rostro y el llamativo sable de luz en mi cintura. Pasar desapercibida en estos momentos era lo mejor que podía hacer.

Mis pasos resonaban de forma áspera sobre la arena mientras más me acercaba al centro de Mos Espa. Todos comenzaban a cerrar sus locales y ha resguardarse en sus casa a pleno medio día.

Incluso uno de ellos chocó contra mi derramando su cesta de fruta al suelo.

-Disculpe.-apremió la mujer recogiendo sus cosas del piso.

-Esta bien.-la disculpé intentando ayudar lo mas que podía.

-Muchas gracias.-murmuró ella un poco apenada por el pequeño accidente.

-Usted sabe que es lo esta pasando aquí?.-le pregunté antes de que se fuera.

-Hay enfrentamiento entre el nuevo líder de Tatooine y los Pykes. Debería refugiarse en casa antes de que las cosas empeoren.-me advirtió la mujer.

-Lo tendré en cuenta, le agradezco mucho su información.-murmuré en respuesta notando como ella echaba a correr nuevamente.

Suspiré y continué mi camino al centro de la ciudad. Si de algo estaba segura, es que ahí estaban los problemas y donde estaban los problemas, es donde Din Djarin siempre estaba.

Y supe que no me había equivocado cuando noté lo desértica que estaba esa área en comparación del caos en las afueras.

Ni siquiera una rata womp se paseaba por aquí, a excepción de dos hombres en medio de la calle. Los identifiqué de inmediato.

Cad Bane. De espaldas a mi con su típico sombrero y postura arrogante.

Y a unos metros de él, aquel chiquillo hijo de Jango. Boba Fett. Ahora convirtió en un hombre adulto. Muy diferente a como lo vi la última vez.

Aunque llevaba el casco puesto, sabía con exactitud cómo era su rostro. Cada detalle de él. Lo había visto cientos de veces en sus hermanos clones. En dos de los hombres más importantes en mi vida. Rex y Cody. De este último no sabía nada en lo absoluto. Simplemente desapareció. Esperaba que alguien supiera que fue de ellos. Me reprendí a mi misma al preguntarme porque no le cuestioné esas cosas a Ahsoka.

Dejé esos temas de lado y me enfoqué en sentir la firma de Mando en la fuerza. Débil como la de cualquier persona común en la galaxia, pero siempre presente para los sensibles a ella.

Sabía que estaba por aquí. Estaba tan cerca...si mis instintos no me fallaban, debía encontrarse en las ruinas de la cantina destruida detrás de Fett.

Avancé con pasos seguros y firmes levantando un poco de polvo a mi paso.

No le di importancia al enfrentamiento verbal que ambos hombres llevaban a cabo en ese momento. Sólo seguí mi camino ganándome su total atención al pasar por sus respectivos lados ignorándolos a ellos y al peligro. Sentía sus intensas miradas sobre mi. Incluso la de la mujer apostada afuera de la puerta de aquel lugar. Creía reconocerla como Fennec Shand, que había visto hace poco en la nave de Gideon cuando Din nos rescató al niño y a mi.

Esta sostenía su arma a la perfección con sus dos manos y estudiaba mis movimientos a detalle.

Pero lo único que yo hacía era caminar. Y al igual que con los demás, pasé de largo de ella he ingresé al local dejándolos a todos con caras confusas.