capítulo 33.

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—No soportó el dolor.—se quejó Zhanghao.—Necesito una pastilla, tal vez dos.

—¿Quién te manda a tomar tanto?—le preguntó Matthew.—Es tu culpa.

—¿En dónde estabas tú para cuidarme?—lo miró con los ojos entrecerrados.—Desapareciste junto con Yujin.

—Eh-h.—desvío la mirada.—Yo me fui a casa, lamentó no haberte avisado.

—¿Y Yujin?—lo miró con recelo.—Él dijo qué estaba contigo.

—Lo estaba.—contestó.—Pero después le dije qué me sentía mal y debía irme.

—Qué raro, no me avisó nada.—frunció el ceño.—¿Me dirás qué sucedió con Jiwoong?

—No quiero hablar de Jiwoong.

—Matthew, yo...—hizo una pausa.—...Lo vi consumiendo drogas.

—Lo sé.—respondió con tristeza.—Se qué lo esta haciendo, es por eso qué terminamos.

—¿Cómo te sientes?

—Triste.—respondió él pelirubio.—No voy a negarlo, pero creo qué ya lo esperaba.

—Lo siento mucho Matthew.—le abrazó.—Estaré aquí para ti.

—¿Y tú?—le preguntó.—Escuche qué te besaste con Hanbin.

—¿Yo?—preguntó cómo si no supiera nada.—No, nada de eso.

—Zhanghao.—le miró con obviedad.—No me mientas.

—¡Ay, esta bien!—contestó sin más opción.—Nos besamos.

—¿Y qué más?

—Fue todo.—mintió.—Solo un beso.

—Zhanghao...

—Bueno, tal vez Hanbin y yo...—se tapó el rostro con las manos apenado.—...Tuvimos sexo.

—¡Lo sabía!—le miró con decepción.—¡Has caído en su juego de nuevo!

—No es así, Matthew.—negó con la cabeza.—Él y yo no somos nada.

—Pero quisieras qué fueran todo.—contestó.—¿No es así?

—De echo no.—se encogió de hombros.—No importa si no somos nada.

—Te conozco hace años Zhanghao, se qué si te importa y se qué lo quieres.

—Prefiero hacer como si no.—contestó Zhanghao mientras movía el pie con ansiedad.—Puedo obtener lo qué quiero de él sin mezclar sentimientos.

—No, no es así.—le miró.—¿Crees qué puedes acostarte con él sin sentir nada?

—Si.—Zhanghao se encogió de hombros.—Puedo hacer eso.

—Estás jugando con fuego.—le advirtió.—Y te vas a quemar.

—Ay, como sea.—rodó los ojos.—No quiero sermones, me va explotar la cabeza.

Matthew soltó un gran suspiro y no dijo más nada, era su mejor amigo pero no podía meterse en su vida, eran sus decisiones. Se quedó hasta la tarde acompañando a Zhanghao y después se fue a su casa, no iba a negar qué se sentía muy deprimido por haber roto con Jiwoong pero ¿Qué podía hacer? ¿Ir a rogarle? Creo qué ya se había humillado demasiado y tenía la esperanza de qué ahora fuera el rubio quién fuera a pedirle perdón.

✹✹✹

Hanbin amaneció tan cansado, sentía qué no había dormido por días, había bebido demasiado alcohol y se había drogado también, las ojeras en su rostro eran muy notables y lo único qué quería era seguir durmiendo, pero tenía demasiado trabajo en la tienda de tatuajes. Así qué con pereza se levantó de su cama y se dirigió al baño para darse una ducha, mientras el agua caliente caía por su cuerpo no pudo evitar pensar en Zhanghao, en lo sexy qué se había visto en la fiesta y en lo mucho qué disfruto volver a estar con él, aquellos pensamientos le obligaron a bajar la mano hasta su miembro qué ya se encontraba erecto, mientras el agua caía Hanbin se masturbaba así mismo con los ojos cerrados, imaginado qué era Zhanghao quién le tocaba, una mano iba de abajo hasta arriba con movimientos cada vez más rápidos y la otra se apoyaba en la pared de mármol, echó la cabeza hacia atrás mientras soltaba gemidos qué no podía controlar, finalmente se corrió liberando todo su interior qué se mezcló con el agua hasta ser barrido hasta el desagüe.

cherry lollipop ✧ haobinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora