capítulo 52.

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—¿Debería bajar a abrirle?—Zhanghao se preguntó a si mismo, si pidiera la opinión de alguien más definitivamente dirían que no era una buena idea, pero ¿a quién quería engañar? Moría por verlo, así que por fin decidió abrirle. Corrió rápidamente al baño y se echó agua en el rostro para borrar las lágrimas, se acomodó el cabello con los dedos y bajó las escaleras de dos en dos.

Hanbin se encontraba del otro lado de la puerta, había estado bebiendo alcohol, pero antes de salir del departamento, se había dado una ducha rápida y bebió mucha agua con el fin de qué se le bajara, no quería decepcionar más a Zhanghao de lo qué ya estaba.

—Hola.—saludó con nervios en cuanto Zhanghao abrió la puerta—No pude evitar venir hasta aquí.

—¿Para qué has venido?

—Se qué ya te pedí perdón muchas veces y tu respuesta sigue siendo la misma, pero mis esperanzas están tratando de soportar hasta el final.—confesó—Vale la pena rogar por tu perdón una y otra vez.

Zhanghao no respondió nada, ¿Qué se supone que debía decir? No quería decir absolutamente nada, lo único qué su corazón le pedía a gritos era que lo abrazara y así lo hizo. Envolvió con sus delgados brazos el cuerpo de Hanbin mientras comenzaba a sollozar en su pecho. Al peliazul le costó unos segundos para reaccionar, pero en cuanto lo hizo abrazó a Zhanghao con todas sus fuerzas y sin su consentimiento las lágrimas también comenzaron deslizarse por sus mejillas.

—Lo siento tanto...—dijo con sinceridad—...Te necesito, no puedo vivir sin ti—le abrazó con más fuerza—Se qué no merezco otra oportunidad, pero por favor, te ruego por qué me des una ultima, voy a remediar todos mis errores, voy hacerlo mejor, lo prometo...

—Hanbini—fue lo único que consiguió decir, ¿debía creerle?

—Mírame Zhanghao—pidió Hanbin y Zhanghao se aferró más a su cuerpo—Por favor hazlo, necesito que mires el arrepentimiento en mis ojos.—Zhanghao lo miró apoyando la barbilla en su pecho, sin dejar de abrazarle.

—¿Debo creerte, Hanbin?—preguntó con tristeza, el peliazul tomó una mano de Zhanghao entre la suya y la llevó a su pecho.

—Mi corazón late por ti.—contestó—Yo... yo te amo Zhanghao.—dijo por primera vez en todo el tiempo que se conocían y no lo decía por obtener su perdón, realmente lo sentía.

Zhanghao escondió de nuevo el rostro en el pecho del peliazul y comenzó a sollozar, era horrible oír a la persona que amabas decir que TE AMABA y no saber si era cierto, él estaba muy dañado, ¿Cómo podía confiar después de tanto?

—Pasa.—dijo Zhanghao, sus padres podrían llegar en cualquier momento y no quería meterse en problemas, era mejor estar en su habitación aún cuando la idea era peligrosa. Ambos subieron al segundo piso y entraron al cuarto, Zhanghao cerró la puerta y se sentó en la punta de su cama, mientras Hanbin se ponía de rodillas frente a él y agarraba la pequeña mano de Zhanghao entre la suya.

—No soporto un día más sin ti, sin tus besos, sin tus abrazos.—comenzó hablar—Nunca he hecho esto por nadie, jamás he rogado para qué alguien se quedara en mi vida, eres el primer chico que ha causado sentimientos en mi corazón, puedo decir qué eres...mi primer amor—las manos le temblaban así qué las apretó con fuerza olvidando qué tenía la de Zhanghao entre la suya.—Vuelve conmigo bebé, inténtalo una vez más. Haré las cosas bien, voy hacer mi mejor esfuerzo, pondré toda mi vida en tus manos.

Zhanghao se soltó del agarre de Hanbin y le ofreció ambas manos para ayudarle a levantarse, en esos momentos no podía pensar si estaba mal o no, solo estaba siguiendo su corazón y entonces besó a Hanbin. Al momento de sentir sus labios contra los suyos de nuevo, podía jurar qué sintió una corriente pasar por todo su cuerpo, eran tan suaves y húmedos, eran lo qué más le encantaba.

cherry lollipop ✧ haobinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora