You Don't Have To Go •Soonwoo•

Capítulo 70

POV Wonwoo:

Me quedé sentado hasta que llegó Jun y se sentó a mi lado, recargó su cabeza sobre mi hombro y nos quedamos así por unos segundos. Ninguno habló, solo parecía saber que lo necesitaba ya que estaba ahí.
—Won.
—¿qué pasa?
—¿sabias que la chamarra que trae Josh es mía?.
  —sí, subí a la ventana de mi cuarto por ella
  —que hombre de veras—se rió.
  —Jun.
  —¿qué?
  —me voy a ir después de la competencia y tengo miedo de no volver a ver a Hoshi... es que siento que es el amor de mi vida. Es una idiotez ¿no?
  —algo.
  —¿tú piensas que Josh es el amor de tu vida?
  —sí. Pero es porque tengo diecisiete así que no me aferro pero una parte de mi espera que en algún punto nos casemos y vivamos juntos.
  —creo que solo una de esas cosas se podrá—sonrió.
  —mi chamarra le queda enorme, quien sabe porque se aferra a ella. Hasta a mi me queda grande.
  —¿Jun me escuchaste?
  —intento ignorar que voy a perder a la única persona que ha seguido siendo mi amigo aún sabiendo que estoy mal de la cabeza.
  —no estás mal de la cabeza.
  —tengo un trastorno mental, es lo mismo.
  —¿a ti no te dijeron que era autista?
  —¿para qué me lo dirían? ¿Para que convivamos entre neurodivergentes?—ambos nos reímos un poco—¿A ti te dijeron que tengo trastorno bipolar?
  —no. Me lo dijeron después.
  —Hoshi...
  —estoy seguro de que me lo dijiste tú o me lo dijo alguien antes pero no recuerdo.
  —como sea, si a mi me pone triste no me imagino cómo te irá con Hoshi.
  —¿y cómo le digo?
  —que sea lo que salga de tu corazón pero si lo que sale de tu corazón es una tarugada entonces no hables—reí un poco.
  —¿y crees que nos volveremos a ver?
  —los próximos Juegos Olímpicos son en tres años ¿no?—sonreí un poco—con suerte nos veremos en tres o... o siete años o así agregándole cuatro años.
  —no sé, tal vez mis padres se apiaden de mi.
  —¿crees en esa posibilidad?—nos sonreímos y se volvió a recargar en mi hombro—. Te ves enfermo, es bueno que vayas a regresar a casa.
  —me siento enfermo. Es lo único que me alegra de regresar—recargué mi cabeza sobre la suya—¿te puedo contar algo sin que le digas a Joshua o a Hoshi?
  —okey...
  —la verdad es que cuando fui al doctor porque me andaba desmayando a cada rato me dijo que tenía principios de anemia. Nunca volví a ir y tampoco comí mejor, de hecho a veces me dan ganas de vomitar cuando pienso en comer así qué tal vez sí tengo un problema con la comida que quizá ya hasta me provocó anemia.
  —Won, ya no seas tan necio.
  —lo intentaré... ¿cuidarás a Hoshi?
  —pues ya qué...—reí un poco—es el mejor amigo del chico al que amo, supongo que ahora es más fácil cuidar de él.
Jun y yo nos quedamos más tiempo juntos. También de cierta manera sabíamos que no nos veríamos a menos que mis padres tuvieran un cambio de mentalidad muy extremo.
Estaba seguro de que me alejarían de todo lo que amaba aún cuando papá había dicho que no. Su matrimonio desde siempre parecía ser más dominado por mamá así que si ella era la que decidía en esto también entonces podía empezar a pensar en qué hacer para ser feliz de nuevo.
Estuve esperando a Hoshi mientras leía el dichoso libro de su hermano. Realmente tenía cero energía, dormía un rato y podía estar normal unos minutos antes de volver a sentir que no tenía energía.
Realmente estaba enfermando aún más así que metí el libro en mi chamarra y gatee hacia la mochila de Seungcheol para ver la receta. Quería saber qué podía tomar, qué me había dado ese día para tener energía.
  —¿tanto frío tienes?—preguntó Hoshi al entrar.
  —¿ah?
  —estás temblando—ni si quiera había notado que temblaba como un maldito chihuahua.
  —ah... me siento extraño, tengo mucho sueño y hace dos minutos estaba lleno de energía—Hoshi se acercó y puso su mano sobre mi frente.
  —creo que tienes algo de fiebre. Acuéstate un rato, te abrazo.
  —Hoshi.
  —que mal que no tengas nada tuyo contigo, me gustaría que me dieras algo antes de que te vayas.
  —¿escuchaste?—apretó sus labios antes de asentir con la cabeza—¿y no estás molesto?
  —algo... pero bueno, supongo en este punto es por tu salud ¿no?
  —puedes quedarte con mis lentes. Solo que... tienen mucho aumento así que tendrías que quitarle los cristales—se rió un poco—es en serio, si te los quieres quedar son tuyos.
  —Won... prométeme que aún si tienes pareja para el momento de tu vida en que tengas la oportunidad de verme de nuevo no dejarás pasar la oportunidad—asentí con la cabeza.
  —¿y tú tampoco?—reí cuando mi voz se cortó.
De repente de dolió mucho la idea de no volverlo a ver.
Este chico significaba nuevas experiencias para mi, había sido desde mi primer beso, mi primer amor, mi primer novio, mi primera vez. Este chico era todo lo que yo no planeaba experimentar porque sentía que era incapaz de lograr sentir algo así pero ahora... ahora dolía pensar en mi vida sin él.
Sin estar esperándolo a que regrese de sus competencias y me diga cómo le fue, sin acostarme a su lado y mirar su bello rostro hasta que me de sueño, sin hablar con él, sin protegerlo con mi cuerpo flaco aún sabiendo que él es mucho más fuerte que yo. No íbamos a volver a tener esas charlas incómodas después del sexo en las que siempre me hacía reír y yo a él, no iba a volver a atrapar mis menos mientras yo jugaba con las suyas ni podría llenarle la cara de besos.
Lo abracé fuerte.
  —vámonos de aquí—no pude hablar pues todos los sentimientos se me vinieron encima.
  —tengo que dejar de huir Won—también se le quebró la voz y me abrazó también—de verdad quiero tomarte y llevarte a un lugar seguro como dije antes que haría pero es lo que siempre hago. Es lo único que hago y esta vez no dejaré algo que amo por alguien que amo. Aunque tengo el gran impulso de abandonarme a mi mismo e ir contigo no lo haré porque en ese caso sentiré que vivirás con la culpa de que renuncié a mis sueños por ti. A parte estás enfermo...
  —no estoy enfermo—dije acomodándome en su hombro.
  —no tienes energía y ya tenías inicios de anemia... es probable que durante este tiempo todo lo qué pasó hayas desarrollado anemia—acarició mi espalda—pero vas a estar bien. Todo va a mejorar. Solo prométeme que también te esforzarás para que mejores, vas a comer, vas a hacer ejercicio y vas a seguir adelante. No importa que ahora no sepas qué hacer con tu vida... todo va a salir bien.
—¿y tú estarás bien?
—eso espero...—besé su hombro—me harás llorar. Ya suéltame.
—no quiero
Hoshi se lo tomó mejor de lo que pensé que haría pero no quería separarme. De verdad estaba demasiado sorprendido ante su reacción de repente tan madura como si no hubiera sido la persona más celosa que había conocido durante nuestra relación.
Ahora estarnos separando no porque no nos amáramos sino porque no había otra cosa que pudiéramos hacer era de lo más difícil. Sentía que había pasado una eternidad buscándolo para pasar a penas unos días con él.
Como sea así estuvimos abrazados hasta que fue momento de levantarnos por la mañana. En efecto tuve que tomar medicina porque ya no me sentía nada activo.
De verdad empezaba a temer por mi salud cuando de camino a penas me podía mantener despierto y llegué a tomarme una bebida energética antes de entrar al lugar donde sería el evento.
Así que estuve recuperándome hasta que lo vi, ahí estaba a lo lejos cerca de lo que parecía una gran taquilla. Ahí estaba Vernon mirando hacia arriba como si viera algo, entonces yo también volteé pensando qué tal vez sí lo habría pero no era nada. Vernon solo estaba distraído.
Me levanté dando unos cuantos pasos para verlo mejor notando el momento en que mamá se acercó y tocó su espalda para sacarlo de su cabeza.
Tuve el leve impulso de ir hacia ellos y abrazarlos, echarme a llorar y que me llevaran a ponerme a salvo pero Hoshi era quien me necesitaba en este momento. Mi padre llegó con mi hermano y le sacudió el cabello a Vernon, en ese momento noté lo mucho que los extrañaba por lo que solo retrocedí con mis ojos llorosos y mi respiración fallando.
  —¡Won!—volteé y vi a Joshua—vámonos—tomó mi mano y entramos.
Pude ver de reojo a Vernon intentar acercarse pero yo entraba por una puerta diferente, una por la que él no podía pasar. Me rompió el corazón saber que él me iba a seguir porque me había visto y yo en este punto me sentía demasiado nervioso.
  —okey. Won viene conmigo y ustedes dos discutan quien viene conmigo y quién va a gradas—dijo Hoshi llegando y dándome un gafete y dándole uno junto con un boleto a Joshua.
  —es obvio ¿no?—dijo Jun—tú ve con él y yo voy a gradas. Tú eres su mejor amigo.
  —supongo que si duda es por algo—dijo Joshua.
  —Jun, espero que arreglemos nuestra mala relación en cierta medida después de esto—le dijo Hoshi a Jun—. Has sido alguien importante para mi estos último meses, creo que Joshua es inteligente al ver todo lo bueno qué hay en ti.
  —tú y yo no nos vamos a separar.
  —lo sé, es que estoy nervioso—se rió—siento que me voy a morir. Lo siento Jun—se acercó rápidamente y lo abrazó.
  —tú también eres importante para mi. Ahora enséñales a esos idiotas quién es el futuro del Taekwondo olímpico en Corea—lo tomó de los hombros—fighting—Hoshi sonrió—pásame mi boleto Josh.
  —Jun...—Joshua se quitó la chamarra—hace más frío en gradas.
—es tuya.
—pero dice tu nombre en ella.
—entonces podemos compartirla—Joshua sonrió—los veo después de que gane Hoshi—tomó mi mano y la apretó antes de tomar su boleto e irse.
—okey... deséenme suerte—dijo Hoshi tomando aire profundo y tomé su mano.
—no creo que la necesites.
—fighting—dijo Joshua y Hoshi me dio un beso rápido.
  —Soonyoung...
  —no—puso su dedo sobre mis labios—te voy a ver en un rato, ahora solo quiero que sepas que te amo y agradezco que estés aquí.
Teníamos demasiada fe en Hoshi para lo poco que se había preparado estas últimas semanas pero yo lo había visto entrenar desde hacía mucho tiempo antes.
—voy a empezar a rezar—le dije a Joshua.
—creí que no eras creyente.
—cuando estoy nervioso creo en lo que sea—volteó hacia atrás e hizo un suspiro como de angustia, volteé rápidamente siendo interrumpido por él mismo quien me hizo voltear.
—vamos a buscar nuestros lugares.
—ah... sí—me tomó de la muñeca y caminamos hacia adentro.
Mi familia tenía la posibilidad económica de hacer cosas como de repente decidir qué quería ir a una competencia de ese nivel y conseguir pases con unas cuantas llamadas.
Así que no me sorprendía que hubieran llegado así de rápido a Seúl a conseguir entradas sin problema alguno. Aún así eso me ponía nervioso ya que estaba bastante seguro que al menos mamá a penas esperaría al momento en que nos encontráramos para llevarme.
Entonces empezó esto, Hoshi apareció y parecía buscarnos pero después todo pasó muy rápido. En sus primeras categorías parecía costarle demasiado trabajo competir contra sus contrincantes pero pareció acoplarse conforme esto iba avanzando. Se acopló lo suficiente como para lograr pasar en la primera ronda.
Entonces en ese descanso fue cuando al no ver a Hoshi tal vez como bajaron los nervios que sentía hicieron que perdiera un poco la energía que había logrado tener gracias a la medicina y bebidas energéticas.
Me recargué unos segundos en el hombro de Joshua.
  —¿te sientes bien?—asentí con la cabeza—¿en la mayoría de fotos sales con o sin lentes?
  —¿por qué la pregunta?
  —solo contesta.
  —no me gusta que me tomen fotos, mis fotos de identificación son sin lentes y las familiares con lentes.
  —¿y la favorita de tus padres?
  —¿de qué mierdas hablas? Déjame dormir unos minutos en tu hombro—entonces entendí cuando se acercó lo que parecía un policía, puso una foto al lado de mi y dijo algo a la radio que a penas logré comprender.
  —¿Jeon Wonwoo?—me enderecé—. Ven conmigo.
  —no ¿de qué habla?
  —ven conmigo y no causes una escena si no quieres meter a tus amigos en problemas—me levanté a falta de una mejor alternativa.
  —Won...—Joshua tomó mi mano.
  —suéltalo.
  —está bien Josh, estoy bien—sonreí intentando que él no se preocupara.
Intenté buscar a Hoshi pero no logré distinguirlo a parte de que el policía me estaba escoltando hasta la salida como si tuviéramos prisa.
Solo quería que viera que me estaban llevando ya que se ser por mi habría intentado tener más tiempo.
Decidí ni si quiera intentar más, solo lo pondría nervioso en algo que era su sueño por lo que esperé que todo estuviera bien después de irme. Me quité el gafete discretamente y lo tiré al piso para que no vieran el nombre de Hoshi en este. Quería protegerlo, pensé en tal vez aunque papá supiera lo que en realidad había pasado podría decir alguna mentira que lo protegiera de cierta forma.
El mundo me dio vueltas durante el camino y a unos pasos de la puerta la vueltas fueron tan fuertes que terminé perdiendo el equilibrio y sintiéndome a punto de vomitar. Parecía que este hombre creía que me resistía a seguir caminando pero no era así, tal vez mi cuerpo lo hacía pero yo lo intentaba.
Al voltear a la puerta vi a todos ahí viéndome, intenté dar un paso pero todo se oscureció de nuevo y supe que de verdad mi cuerpo ya no daba para más realmente por lo que me desmayé. Tal vez me desmayé pero mientras lo pensaba realmente deseaba realmente haber muerto pues no quería regresar a casa.
Mi berrinche no era por estar con Hoshi sino por la vida infeliz que seguro estaba destinado a tener. Tal vez debí haber terminado con mi vida antes de ser feliz para así no sentirme tan mal de regresar a mi vida como antes era.