Capítulo 9

61 7 0
                                    

POV Wonwoo:

Recorrí la cortina y lo vi ahí acostado con su cara inexpresiva mientras abrazaba mi chamarra. ¿Cómo te acercas a alguien que acaba de convulsionar? ¿Qué le dices?.
Me acerqué y me senté en la cama al lado de él. Di unas palmadas en su hombro.
  —¿te doy lastima?.
  —¿qué?.
  —porque no me dejan de mirar. Llamaron a mis papás para pedir que me agendaran una cita médica pero... no.
  —¿ya te había pasado antes?—asintió con la cabeza.
  —es epilepsia, así pasa.
  —¿así pasa?.
  —sí. Dicen mis papás que cuando era pequeño me pasaba mucho pero yo no lo recuerdo... supongo que después de un tiempo de que te quitan la medicación empieza a pasarte seguido otra vez—su sonrisa me hizo sentir mal.
  —¿o sea que no sabías?.
  —no...—esa palabra salió como si sacara aire, como si le costara decírmelo aún con su falsa sonrisa—. Me enteré un día antes de ese día que me quedé en tu casa después del trabajo porque tuve un ataque y mis papás solo dijeron "ah sí, es porque tienes epilepsia. Te pasaba más de chico" y luego que habían estado pidiendo a dios para que me curara pero ahora yo también debía pedir pero...—se le llenaron los ojos de lágrimas—he estado rezando y creo que ahora solo me dan ataques con más frecuencia y me da miedo—y es que quería protegerlo tanto pero no sabía qué hacer.
  —¿y por qué no me dijiste?.
  —porque estabas estresado y no quería que te estresaras más por mi culpa.
  —eres mi mejor amigo Vernon, no sabes lo mucho que quisiera poder protegerte en este momento.
Quizá la manera en que nos hacían ver el contacto entre hombres hizo que me costara trabajo pero me acerqué a abrazarlo, creí que era la única manera de demostrarle que estaba ahí ya que no sabía qué decirle.
Por un momento pareció incómodo, incluso dudé en hacerlo pero la manera en la que él rápidamente me hizo notar que quería ese abrazo  me hizo tranquilizarme y solo dejarme llevar por ese cariño que le tenía.
Me acomodé cerca de él en la camilla para poder abrazarlo de una manera más cómoda. Después lo solté y se quedó con su cabeza en mi hombro.
  —¿crees que ellos de verdad me llevarán a ver un médico?—solo quería gritarle que dejara de partirme el corazón de esa manera porque dentro de las cosas nuevas que había sentido recientemente esta era la que más odiaba.
No respondí, solo estaba intentando permanecer en ese shock en el que estaba que ponía una barrera entre mis emociones y la situación.
  —ese chico me estaba apretando muy fuerte la mano—dijo después de un rato—no escuché nada de lo que me dijo pero estoy casi seguro de que me confundió con alguien más.
  —¿quién?.
  —el chico con el que estabas hablando antes de que... ya sabes—solo quería pensar en Vernon, no quería distraerme si él me necesitaba—. ¿Quieres tu chamarra?
  —si amortigua tu caída en lo que buscamos alguna solución entonces quédatela. Mi mamá entenderá que es por ti.

Ya no veía a Soonyoung entre clases, tampoco en los pasillos y parecía irse antes de las clases que compartíamos. Supuse que ese ciclo de estarnos besando había llegado a su fin, al menos conservaría algo bueno de eso: a Jun.
Jun era una persona agradable para hablar y quizá era porque para ambos eramos los únicos loquitos en la escuela. Sobre lo de Soonyoung le dije que el chico simplemente había dejado de intentar estar cerca de mi sin delatar en ningún momento que se trataba de su compañero de cuarto.
Descubrí lo mucho que necesitaba un amigo de mi edad que igualmente me ayudara con cosas como investigar sobre la epilepsia y cómo podíamos ayudar a Vernon, incluso interesarse en quizá ayudarnos en la cafetería alguna vez para que él tuviera menos carga de trabajo. Igualmente yo intenté ayudarle a saber algo sobre Jisoo pero yo tuve menos suerte.
  —realmente Hoshi me preocupa—dijo en medio de una conversación—no lo conocer mucho creo pero lleva unas semanas que se comporta raro.
  —¿raro cómo?.
  —no quiere hablar y no es normal en él, siempre habla mucho. También se está quedando en fines de semana.
La escuela daba la opción. Algunos padres no podían recibir a sus hijos en fines de semana, decían que normalmente los chicos hacían lo que quisieran en fines de semana. Algunos pocos ayudaban a limpiar pero más que eso metían chicas o alcohol.
  —¿y eso es raro en él? Creí que le gustaba aquí.
  —no es que... solo está raro. No sé cómo explicarlo—llegó a mi el recuerdo de su reacción al ver a Vernon.
  —él estaba ahí cuando Vernon empezó a convulsionar—Jun se quedó unos segundos callado, tomó de su café y pareció pensar un poco—. ¿Qué piensas?
  —es que no... es algo un poco delicado pero básicamente creo que debería hablar con él. Le estresan mucho las situaciones así.
  —¿situaciones cómo?.
  —cosas que verías en un hospital. No sé cómo haya reaccionado a lo de Vernon pero quizá no se sintió cómodo.
  —¿crees que eso lo traiga así?.
  —no... creo que tenía algo como una novia y ella le dijo algo que a él le pareció como ir muy rápido así que la dejó. Quizá sí la quería pero ya sabes cómo son los chicos que se creen moralmente mejores que tú por creer mucho.
  —¿idiotas?.
  —sí. Soonyoung es un idiota sensible, quizá se le juntaron algunas cosas. Así pasa a veces. Lo último que me contó fue lo de esa chica—yo estaba intentado que la gente no pensara que tenía novia y a Soonyoung no le importaba hablar de mi como si fuera una chica—. Sólo que a veces ni si quiera llega al dormitorio, por eso estaba preocupado pero tal vez lo que necesita es hablar.
Soonyoung entrenadora Taekwondo en horarios variados. Simplemente jamás lo veía practicar o salir con su uniforme en los mismos horarios.
Simplemente por la preocupación que expresaba Jun decidí pasar por el salón de Taekwondo ya por la tarde. Empecé a sentir miedo cuando efectivamente escuché que alguien estaba golpeando algo (esperaba de verdad que fuera algo y no alguien) mientras gritaba.
Me asomé estando casi seguro de que no sería él porque bueno, Soonyoung no tenía cara de gritar así. Sí era él, justo cuando me asomé tiró uno de los maniquíes de practica y gritó en dirección a él como si el mismo demonio lo hubiera poseído.
Volteó a verme después de eso.
Cuando comenzó a caminar de esa manera hacia mi solo pensé en qué iba a morir pero tampoco hice nada por alejarme de la puerta.
Me tomó por la camisa con fuerza jalándome hacia adentro del salón para luego pegarme a la pared.
Esos segundos en que puse mis manos sobre sus muñecas y nos miramos antes de que mis lentes cayeran al piso por el impacto de mi cuerpo con la pared se sintieron como algo irreal. No se sintió como la primera vez y cuando me besó me sentí demasiado incómodo.
Casi sentí ganas de llorar en ese momento. Mi corazón latía muy fuerte, estaba nervioso y no de una buena manera.
Me separé casi a forcejeos. Estaba algo oscuro así que sin lentes me sentía aún más nervioso al no poder ver nada.
  —Soonyoung mis lentes.
  —¿ah?—pareció querer besarme otra vez.
  —¡No quiero besarte! ¡Perdí mis lentes, está oscuro y no veo nada!—lo empujé un poco.
Tomó mi mano rápidamente y caminó rápidamente supuse que por el mismo salón porque no veía nada, puso sus manos en mis hombros aplicando cierta presión indicando que me agachara a lo que hice caso.
  —no te muevas—dijo bajo entre dientes.
  —Soonyoung—el entrenador Ko—. ¿Y ese grito?.
  —no lo sé, yo también me asusté con eso.
  —ve a tu dormitorio, ya es algo tarde para que estés entrenando.
  —recogeré y me voy en seguida.
  —bien, iré a investigar ese grito. Descansa, espero verte aquí mañana.
  —claro. Gracias.

You Don't Have To Go •Soonwoo•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora