Capítulo 29

58 7 1
                                    

POV Wonwoo:

Antes usaba todo mi tiempo libre para leer, ahora estaba en un salón vacío besando a mi novio como si nunca lo hubiera hecho antes con el maldito libro en mis pies debido a que lo había tirado en cuanto empezaron estas insinuaciones con Hoshi.
Así que tenía sus manos en el abdomen por debajo de mi uniforme amenazando con en cualquier momento empezar a desabrochar mis botones otra vez.
Esta última semana Soonyoung había estado intentando desnudarme casi siempre que nos veíamos para besarnos, incluso cuando Jun tardaba en llegar al dormitorio.
Por mi parte ya que él estaba sobre un escritorio no podía evitar tocar sus piernas y tener la necesidad de acercarlas a mi.
Realmente antes no me imaginaba siendo del tipo de chicos que estaban así con chicas pero ahora estaba ahí con mi novio.
Me dolía la entrepierna por la maldita fricción y aunque me sentía bastante avergonzado estaba seguro de que notaría que me había vuelto a pasar si lo dejaba, a parte no podía salir del salón así pues otros chicos lo notarían.
Quizá era porque Soonyoung iba a otro torneo pero yo estaba empezando a sentir que no podía separarme de él.
  —no—detuve sus manos al notar qué iba a hacer—soy muy flaco, te decepcionarás.
  —pues me gusta tocar tu abdomen, también me gustaría poder verlo
  —¿qué mierdas estamos haciendo?—me volví a acercar a él con la intención de besarlo.
  —no lo se pero no paremos hasta que sea completamente necesario.
  —no planeaba detenerme—frunció el ceño de repente y me alejé un poco sabiendo que había tenido una idea algo rápida.
  —Won, ¿a dónde queremos llegar?
  —¿qué?.
  —llevamos unos meses en relación ¿a donde queremos llegar con estos encuentros?.
  —no lo sé. ¿Por qué?
  —el sexo premarital es considerado un pecado.
  —¡¿el qué?!—di un paso hacia atrás.
Sí sabía que teníamos estos encuentros porque nos encontrábamos sexualmente atraídos al otro pero no creí que él pensara en eso.
  —bueno, ya estamos pecando y ya que ambos somos hombres no nos podemos casar así que supongo que un pecado más no es de gran molestia ¿no?—ay por Dios ¿qué le hice al monaguillo?.
  —¿entonces quieres que tengamos sexo?
  —no lo sé, no creo que sea el único de los dos que tiene fantasías con el otro desnudo. Siempre que nos vemos tienes problemas allá abajo—bajó rápidamente su mirada a mi entrepierna e intenté cubrirme rápidamente—. Te pusiste más rojo ¿dije algo que te incomodó?.
  —n-no, yo creí que no... no te habías dado cuenta.
  —tú eres el que nunca se da cuenta.
  —tampoco me dijiste que te pasaba a ti.
  —Won, hay mucha fricción. Claro que me pasaba mi también y es normal...
  —sé que es normal pero aún es raro. Ni si quiera me toco yo y por alguna razón no quiero que tú me dejes de tocar.
  —wow... no puede ser, traigo a Jeon Wonwoo como idiota—se levantó y se acercó a mi levantándose un poco y poniendo su mano en mi pecho—tú también me traes así—me dio un beso bajando su mano lentamente.
Cuando sentí su mano más cerca de mi entrepierna me sentí nervioso aunque por unos segundos lo dejé continuar pues era sobre la tela de mi uniforme y solo pasaba su mano por ahí haciéndome querer que hiciera más hasta que simplemente no pude con eso.
Fue mucho en un segundo por lo que lo tomé de la muñeca y lo separé de mi.
  —lo siento—murmuré.
  —¿sabes qué es importante si vamos a estar con contactos así? Tocarte.
  —ya sé, ya me dijiste pero dijiste que tú tampoco lo hacías.
  —vivo con dos ancianos, les dará un infarto si lo hiciera y sospecharan que lo hago.
  —tengo a mi padre detrás de mi todo el tiempo, no puedo hacerlo así.
Ambos entre nosotros teníamos la idea de ser muy abiertos respecto a los temas de sexualidad y sexo pero ahora que estábamos experimentando esa parte sexual de nosotros notábamos el gran tabú que tenías respecto a la masturbación.
Era raro, ambos éramos conscientes de lo difícil que sería progresar de este lugar en el que estábamos sin hacerlo pero teníamos nuestras excusas.

Me quedé parado derecho bien pegado a la pared mientras el entrenador me medía. Por alguna razón eso era necesario.
  —estás muy delgado para tu altura. Eres ligero para el atletismo y por eso has mejorado pero dudo que te lleve a la competencia, te me desmayarás en tu primera carrera.
  —puedo hacerlo.
  —no, no puedes y tu padre debería dejar de llamar si se verdad le importas.
  —me esforzaré el doble.
  —no, no irás. Ponle que mejoraste, reconócete eso—no me sirve de nada, mi padre quiere que compita y gane.
Me siento aliviado por no participar pero a la vez no quería decepcionar a papá.
  —¿entonces puedo irme?.
Estuve en el salón de Taekwondo primero un rato sentado con mis libros hasta que al final el pensamiento de "no entré a la competencia y mi padre me odiará por eso" hizo que me sofocara.
Me levanté y me pregunté a Soonyoung si me podía enseñar a golpear al maniquí. Primero lo dudó, luego aceptó.
Me puso un guante y me acomodó explicándome lo que debía hacer
  —golpea con la mano del guante, así no te lastimas—se puso en la misma posición en la que yo estaba y golpeó al maniquí, intenté imitarlo.
En el intento me dolió la mano e hice reír a Soonyoung.
  —¿tan mal lo hago?
  —¿quieres hablar de algo?
  —estoy muy flaco para la competencia y el entrenador decidió que no iré.
  —ni si quiera querías competir—iba a discutir—¡no! No querías ir, tu papá quería que fueras.
  —¿y qué le digo?.
  —Won...
  —es real. Iré al dormitorio.
  —voy contigo.
  —Hoshi... no estoy de humor.
Veinte minutos después ambos estábamos en su cama en el dormitorio besándonos como si de verdad nuestras bocas no pudieran estar separadas una de la otra.
Era sorprendente como en una cama tan péquela podíamos estar besándonos de esa manera en la que muy quietos no estábamos sin caernos. Cuando empezamos él estaba sentado sobre mis piernas teniéndome en medio de las suyas pero ahora estaba dejado de él acostado mientras él seguía con sus piernas en la misma posición provocando esa fricción que tan embobado me tenía.
Como pude le quité su estúpida cinta de su uniforme y me separé de él para quitarle la parte de arriba. Si fuera un uniforme de Karate habría sido más fácil ya que esos eran básicamente batas, este solo estaba abierto pero no era diferente a una camisa.
  —ahora pareces ser tú el que me quiere desnudar.
  —y si quiero...—pasé mis manos por su espalda
  —¡sí! ¡Voy a mi cuarto donde espero mis roomies aún no hayan llegado!—Jun.
Ambos nos levantamos y acomodamos la ropa rápidamente antes de que Jun abriera la puerta.
—ustedes dos animales en celo ¿qué debo estar avisando cada que voy a entrar a mi dormitorio?.
—¿qué?—preguntó Soonyoung
—no te hagas el tonto, ya sé porqué Wonwoo tiene un mejor rendimiento en atletismo.
—¿ah, sí?—su sonrisa se amplió.
—están cogiendo.
—¿eso ayudaría a que mejorara en atletismo?—Hoshi me dio un leve golpe en el brazo.
—no están cogiendo—dejó de sonreír—. Muchos atletas dicen que tener una vida sexualmente activa les ayuda en su rendimiento.
—¿a ti te ayudaba?.
—en parte. Yo solo ayudo al entrenador. Solo soy su lamebotas de la generación. ¿Les impide coger que yo regrese a esta hora...? Porque puedo llegar más tarde si quieren, tú me ayudabas a mi así que yo puedo también hacer tiempo.
—yo hacía tiempo porque quería evitarme un momento incómodo.
—ya vete a bañar idiota—Hoshi se levantó, tomó una almohada y me la puso en las piernas antes de darme un corto beso.
Tomó sus cosas de ducha y salió.
No quería estar solo con Jun si ambos estábamos despiertos. No sabía si éramos amigos aún.
—necesitan preservativos—murmuró—si es que lo quieren hacer, supongo en este momento solo están teniendo fajes.
—sí—quería decirle a Jun porque es lo que habría hecho antes que en realidad no sabía qué hacer.
Me sentía avergonzado porque parecía que Jun y Hoshi sabían perfectamente cómo funcionaba mientras yo solo hacía mis teorías mentales.
Debía saber cómo funcionaba para saber si quería o no hacerlo con Hoshi.
—Jun...
—tengo un regalo para ti. Quítate los lentes de contacto—se levantó por su mochila.
—puedes decir "cierra los ojos".
—necesito que te los quites—me lanzó un espejo de mano.
Busqué dónde ponerlos y luego me los quité. Pronto vi la silueta de Jun acercarse con algo a mi, de repente veía bien.
Eran lentes de armazón.
  —dijiste que no te gustaban los de contacto así que busqué tu graduación en el registro médico del entrenador y busqué lo más similar a tus anteriores lentes—Jun no parecía tan normal, él no era normal pero ahora era como si se esforzara en tomar su personalidad.
  —gracias, Jun—tomé su mano.
No iba a hablar de mi, tal vez él necesitaba hablar.
  —¿te encuentras bien?.
—mejor que nunca.

You Don't Have To Go •Soonwoo•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora