Faith.
Mientras salía del despacho de maldito beta, mi furia podía igualar a la de un volcán a punto de explotar, sólo necesitaba un temblor más para que desataran los infiernos.
-"¿Dónde estás Fénix?, necesito romper algo."- oí la voz de Eli en mi cabeza.
-"Estoy intentando que la tierra no se trague este edificio con todos dentro, no me desconcentres."- le dije, aunque mi voz, hasta para mí, sonaba que no lo estaba logrando.
-"Ósea que ¿así de mal fue la conversación con el beta?, yo por mi parte si puedo romperle un poco la cara al Alfa, creo que estaría más tranquila, además no sería algo definitivo, siendo un lobo, en poco tiempo volvería tener de nuevo esa cara tan deseable."- oí como me decía la Guerrera en un gruñido, casi se me escapa una carcajada ante sus palabras.
Pero el destino no quiso ser misericordioso conmigo, porque la primera persona que me tropecé mientras avanzaba por el pasillo, hacia el ascensor, fue la única que no huye de mí, al verme, a la única, que por razones obvias, no está sometida al mandato de la mate de un beta, sólo a las decisiones del Alfa, la muy... de Lianet.
-"Diosa"- me dijo saludándome, casi sin mirarme, mientras intentaba continuar su camino al despacho de Isaak, sinceramente me hervía la sangre ver a esa cerca de mi hombre, sobre todo porque sabía sus sentimientos por él.
-"Lianet, ¿tienes algo que hacer esta tarde?"- le pregunte antes que desapareciera.
-"¿Qué estás haciendo, Fénix?"- la voz de Eli, resonó con intensidad en mi cabeza, me había olvidado de que aun estábamos conectadas.
-"No esta tarde estoy libre"- dijo la hechicera mirándome directamente con cierto gesto de desagrado, ella no me gustaba a mí, pero yo tampoco le gustaba a ella, y en ocasiones no podía disimularlo, como ahora.
-"Ni se te ocurra hacer lo que estas pensando, Faith Valentine, no eres un lobo no puedes recuperarte fácilmente, ¿Me escuchas desquiciada diosa?"- me dijo la maldita Guerrera blanca, que ni me dejaba pensar, de los gritos que me estaba dando en mi mente.
-"Quería practicar esta tarde, mis nuevos poderes, y tú serias la rival perfecta ... así dejas de pensar en mi hombre"- estas últimas palabras sólo las había pensado, pero por lo visto la maldita hechicera había activado su poder, y yo no pude evitar pronunciarlas.
La sonrisa de suficiencia de Lianet me hizo ver que esa zorra, también estaba muy contenta con mi idea.
-"Vaya diosa, al fin es sincera con lo que piensa."- me dijo sonriendo, como una hiena, la maldita carroñera.
-"Bueno eso es más de lo que tú has hecho hasta ahora, no hechicera, con tu cara de santa abnegada con tu jefe, ni una sola vez le has hablado de lo que verdaderamente sientes, perdiste tu oportunidad zorra, y...."-
-"Faith Valentine, controla tu mente en este momento"- me interrumpió la voz de Eli desde el otro lado del pasillo. Fue una orden de la luna de la manada, y mi cuerpo la acató sin remedio.
Yo aun no entendía cómo funcionaba esto de los rango de mando de los lobos y porque a mí me afectaba también. Pero tenía que ver con que yo era mate del Beta de la manada, y al unirme a él, y jurar mi obediencia al Alfa y a su L⁰una, el vínculo de esos rangos también me afectaba.
-"Nos vemos en el claro, diosa"- fue lo último que me dijo la zorra de la hechicera antes de emprender su camino de nuevo y entrar en el despacho de mi hombre, no sin antes sonreírme con descaro mientras cerraba la puerta, una vez que había entrado.
-"Cálmate, ya."- la orden me llego de nuevo y mi rabia se calmó como si le hubieran echado agua fría encima, pero no pude evitar mirar ofendida a Eli.
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Una luna para el CEO.
WerewolfEn una sociedad que muchos clanes de lobos han desaparecido, manadas muy antiguas completas, motivado por la vida moderna, la falta de obtención de recursos y la desaparición de bosques centenarios en especial en la vieja Europa, para mantener a su...