―Narrador omnisciente.
Tom kaulitz es aquél quien con una sola mirada que te pegue, mueres, y lo digo tan literalmente, porqué el sonido del disparo y la sensación de la bala atacar tu sien, no es nada bonita viniendo de él.
Él es el jefe de la mafia mas poderosa de Los Ángeles y de más aún, él tiene el control y él maneja todo a su alrededor. Eso le encanta a Tom, le encanta ver como las chicas gritan por él y como tiene a los chicos lamiendo de la punta de su zapato, sólo por miedo.
Le encanta y le da satisfacción ser él el que tiene el control de todo, ser él el que mate y se aproveche de todo. Porque, ese es Tom kaulitz, un jodido encantador pero un maldito cínico.
―¿Verdad, leigh? ¿Qué tanto puedes comprobar lo... cínico que soy?―le preguntó Tom a la pelinegra ojiazul.
Aquella estaba con las muñecas y los pies atados contra la silla, intentaba llorar, pero tenía un pedazo de tela en la boca que hacía que ella no pudiera gritar o ser escuchada más de lo debido. De todas formas, aquél se satisfacía escuchando los pequeños sollozos que salían de su boca.
Ella lo odiaba, lo despreciaba desde el primer momento que lo vió entrar al bar y encantar a todas las chicas de su alrededor. Pero ahora que lo veía de frente a ella como su secuestrador, solo podía sentir más odio y desprecio por él.
Tom esbozó una sonrisa cínica mientras pasaba su lengua juguetonamente por su piercing, sintiéndose un poco divertido al verla tan vulnerable frente a él
―Oh, claro, muñequita, no puedes hablar, pero que idiota soy. ―ironizó con sarcasmo.
A pesar de qué Leigh solo era una prostituta más del bar, ella mantenía un puesto muy importante en este y por lo mismo, era catalogada como la muñeca exclusiva. Ya que por su belleza y por sus exóticos show's de baile, aquél que quisiera acostarse con ella tendría que pagar una buena cantidad de dinero.
Tom se obsesionará con ella a más no poder, comprobará lo cínico que puede llegar a ser, y un día... Él secuestrará a todas las prostitutas del bar, pero no por Leigh, sino por la gran deuda que él jefe del bar tenía con él.
Tom aprovecha y por simple diversión, tomará a la muñeca exclusiva para él, y solo para él.
Por qué sólo son...
―99 Días siendo mía, Leigh.
Los noventa y nueve días al lado del mafioso más temido de los angeles y de la Alemania entera culminarán, pero ella, ¿Seguirá siendo suya?
«99 Days being mine»
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AVISO IMPORTANTE:
Gracias por querer leer esta historia hecha por mí, trataré de escribir lo mejor posible para que ustedes sientan esa sensación increíble.
⚠️IMPORTANTE LEER⚠️
Este fanfic trata de unos temas delicados, contiene escenas de asesinatos, algunas muy explícitas, otras de violación y etc, como también contiene escenas de abuso sexual, tanto como verbal y físico. Y obviamente, como todas esperamos, los personajes comienzan a desarollar sindrome de estocolmo y de Lima.
Si lo van a leer, por favor, que sea bajo su riesgo. Si no les agrada las historias así, no la lean y dejen que las demás personas que sí les gusta esta trama, puedan disfrutar.
Recuerden que no lo hago con el fin de normalizar o romantizar, es sólo ficción.
Obviamente este fanfic esta hecho por mí, como todas mis demás historias, está prohibido copiar y PROHIBIDO los comentarios de hate.
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Ahora sí, gracias por todo el apoyo que me han estado entregando y... ¡Bienvenida sea «99 days being mine»!
¡Que disfruten mis lindas!
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¹⌉ 𝟵𝟵 𝘿𝙖𝙮𝙨 ; 𝙏𝙤𝙢 𝙆𝙖𝙪𝙡𝙞𝙩𝙯 ©
Hayran Kurgu𝟡𝟡 𝔻𝕒𝕪𝕤 𝒃𝒆𝒊𝒏𝒈 𝒎𝒊𝒏𝒆. | Es guapo y absolutamente todas las chicas se vuelven locas por él, por Tom Kaulitz, el jefe de la mafia mas poderosa de Los Ángeles Un día un bar llamado "la casa del sexo" que es muy bien conocido por Tom, no co...