Capitulo 01

319 10 0
                                    

—Lilian, ¿puedo pasar?—dijo mi padre detrás de la puerta

—Claro que si, entra.—respondí mientras leía un libro.

—¿Sigues molesta conmigo?—me miro.

—No lo estoy padre, solo no me gusto que no me hallas contado que tenía novia y que dentro de poco te casarías.—dije sin quitar lo vista del libro.

—No sabía como decírtelo, desde que tu madre murió tu te distanciaste de mi y dejaste de tenerme confianza.—bajo la mirada.

—Lo se papá, pero tú a veces no tienes tiempo para mi, te la pasas encerrado en tu oficina.—cerré mi libro y lo miré.

—Y es por eso que quiero recuperar ese tiempo contigo, se que no e sido el mejor padre pero te prometo que eso cambiará.—me sonrió.

—Yo te apoyo en tu decisión de casarte y rehacer tu vida papi, porque tienes el derecho y me alegro, no me gusta verte solo, pero no me quiero cambiar de escuela, sabes que me costo mucho hacer amigos nuevos y que no fue fácil adaptarme.—baje la cabeza.

—Está bien mi amor, no te cambiaré de escuela, se que te a costado y por eso te quedarás ahí.—me abrazó.

—¿Cuando nos cambiaremos de casa?—lo miré

—De eso quería hablarte, hablé con mi prometida y pensamos en que ella se venga a vivir con nosotros.—sonrió.

—¡Que! Ósea, compartir casa con ella.—el asintió.

—Y con su hijo.—yo bufé 

—Está bien, solo espero ese niño no venga a hacer desastres.—suspire.—Sabes que odio que toquen mis cosas.

— Tranquila, te caerá bien.—río.

—¿Cuando vienen?—lo miré.

—En dos semanas, desocuparemos la habitación de enfrente para que ahí se quede el hijo de ella.

—Está bien papá. Estoy muy feliz por ti, mereces ser feliz después de tanto sufrimiento.— lo abracé.

—Muchas gracias mi niña. Me voy, tengo que checar unas cosas.—me dio un beso en la frente y salió.

Me acoste en mi cama y seguí leyendo mi libro, después de un rato me entró sueño y me dormí.

(...)

—Lilian, mañana llega mi prometida y su hijo.— se acercó a mi.

—Que bien papá, justo te iba a pedir permiso para ir a una fiesta con Rachel y Susan.—le di un bocado a mi tostada.

—Claro que si hija, solo ya sabes, no llegues tan tarde.—se sentó a mi lado.

—Claro papá, llegaré temprano. ¿Quieres comer?—lo miré.

—Si hija, puedes decirle a María que me traiga mi comida.—asentí y fui a decirle a Mari, después regrese y me puse a platicar con mi padre.

—Por cierto, ya se acerca el verano.—le di otra mordida a mi tostada.

—¿Quieres irte al curso de verano otra ves?—me miro.

—No, no, justo eso quería decirte, esta ves no quiero ir, quiero quedarme en casa, siento que ya se lo suficiente.—tome de mi jugo.

—Entonces no te inscribiré esta ves, me alegra que pases el verano en casa, hace mucho no lo hacías.—comió de su pasta.

—Era porque el curso me ayudaba a no pensar tanto en mamá, pero me siento mejor y quiero estar en casa.—sonreí.

"Un amor imposible" - Joel de León.  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora