Lilian
Desperté con un fuerte dolor en la cabeza, recordaba muy poco lo que había pasado ayer, me di una ducha muy larga. Salí aliste, me puse una blusa normal ya que encima me tendria que poner la bata y el pantalón blanco, coloqué mis zapatos blancos, me maquille natural y baje a desayunar, el dolor de cabeza era insoportable.
—Buenos días—dije y me senté.
—Buenos días mi niña.—me dijo Mari con una sonrisa.
—Buenos días hija.—me dijo mi padre que ya se encontraba sentado en la mesa.
—Buen día Lili.—dijo Paty sentada al lado de mi padre.
—Buenos días a todos.—sonreí.
—Ahorita te traigo una pastillita para el dolor de cabeza y la resaca mi niña.—me dijo Mari en el oído y asentí.
Después de un rato Mari nos dio el desayuno y fui a la cocina con ella para tomarme la pastilla.
—Muchísimas gracias Mari, siempre me salvas de todo.—le di un abrazo.
—Que diría Luc, su hija la más "tranquila" y "niña de casa", pidiéndole pastillas para la resaca a la cocinera.—dijo Joel detrás de mi, Mari lo fulminó con la mirada y se fue a seguir con su trabajo.
—Cállate, no sabes nada de mi así que ni se te ocurra hablar así de mi.—dije enojada.
—Pues ayer te veías muy pasadita de copas niñita.—dijo con una risa burlona.
—Mira Pimentel, deja de joderme la vida porque ya mucho has hecho con estar aquí en mi casa.—me acerqué a él.
—Créeme que yo tampoco quiero estar aquí y tener que verle la cara a una niña mal criada como tú.—se acercó más a mi.
—Me conoces muy poco, cómo te dije, no sabes nada de mi.—dije y sentí su respiración muy cerca de mi.
—No entiendo como tú padre te aguanta, eres una insoportable.—miro mis labios y empecé a ponerme nerviosa pero no lo demostré.
—Pues soy su hija idiota, yo no entiendo como un hijo de puta como tú puede lastimar a su mamá y hacerla llorar.—dije enojada.
—Cállate, al menos yo tengo mamá, ¿la tuya donde está? De seguro cuando naciste te dejo con Luc porque eras un estorbo para ella.—¡mierda! Eso dolió, sentí un gran vacío al recordar la muerte de mi mamá y este estupido venía a decir estupideces.
—Ni se te ocurra hablar así de alguien que no conoces, no conoces nada de mi ni de mi puta vida.—me aleje de él y lágrimas empezaron a caer de mis ojos.
—Pues a ti no se te vuelva a ocurrir meterte conmigo, es más, has como si no vivimos juntos y no te quiero volver a ver en mis fiestas.—me grito enojado.
—Vete a la mierda.—salí enojada de ahí.
—Hija, ¿no vas a desayunar?—me pregunto mi papá al ver que salir de la cocina.
—No papá, ya me tengo que ir, se me hace tarde.—cogi mis cosas y salí de ahí muy rápido.
—No se te olvide que esta noche es la cena para presentarnos como familia.—me grito mi papá y yo asentí.
Subí al auto y el chofer manejó hasta mi universidad, en el camino solo lloraba en silencio al recordar a mi mamá, era fuerte para mi que alguien tocara ese tema, más si es alguien que no conoce nada de mi vida. A pesar de que ya habían pasado años desde su muerte, yo no lo superaba, era un dolor que nunca iba a poder soportar, desearía tenerla aquí y poder contarle tantas cosas, se que desde el cielo me cuida. Llegamos a la universidad, le agradecí a él chofer y entre.
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"Un amor imposible" - Joel de León.
RomanceTodo empieza con mi padre dándome la noticia que se iba a casar con una mujer la cual yo nunca había conocido, así es, mi padre había llegado de su viaje de "negocios" muy feliz, ni siquiera había sido un viaje de negocios, si no unas vacaciones con...