"Un amor imposible" - Joel de León.

Capitulo 58

Lilian.

Después de un rato de silencio llegamos a un restaurante, el mismo donde tuvimos nuestra primera cita, donde también me pidió ser su novia y donde siempre celebrábamos nuestros aniversarios, trague en seco al recordar todo. Bajamos del auto y entramos al lugar.

—¿Porque aquí? —me corrio la silla.

—Que mejor lugar para cerrar este vínculo que en donde tuvimos muchos momentos felices —sonrió de lado.

—Chris... ese día no pude explicarte muchas cosas y... —interrumpió.

—Déjame hablar. Entiendo que era obvio, no lo has dejado de amar, él es el amor de tu vida, siempre lo a sido, yo no me podía aferrar a ti y tampoco podía tenerte a la fuerza, si ambos se aman y se hacen feliz, está bien —sonrio de lado.

—No quiero que tú y yo quedemos mal Chris, te pido una disculpa porque debí terminar contigo antes de arreglar todo con el. Gracias por entender esto —le sonreí.

Me sentía tan bien poder hablar de esto con Chris y que el me entendiera.

—Tambien quiero que sepas que te ame, lo sigo haciendo, el amor no se va de la noche a la mañana, pero se que eres feliz con el y solo me llevo los momento bonitos que pudimos compartir juntos, te agradezco por estar conmigo y apoyarme en todo desde que nos conocimos —acaricio mi mano.

—Yo te agradezco a ti por estar ahí desde el día uno, por no dejarme sola y por haberme amado, eres un chico increíble y se que llegará la mujer indicada para ti.

El mesero nos entrego nuestros platillos, nos sirvió el vino y se retiró.

—Yo veía mi vida contigo Lili, se que fue estúpido, pero te iba a pedir matrimonio —rio bajando la cabeza.

—Ay Chris, aún así ni tu ni yo nos podíamos aferrar a este amor que no era cien por ciento correspondido —agarre el tenedor y lleve un trozo de carne a mi boca.

Sentí que me escuché muy seca.

—Lo se, mi amor no era correspondido por ti, que irónico —miro su plato.

Negué con la cabeza.

—Te quiero mucho Chris y siempre podrás contar con mi amistad. —me acerqué a él y acaricié su cabello.

—También mi amistad siempre la tendrás, te deseo mucho éxito en tu relación con Joel —me miro sonriendo de lado.

—Yo deseo que encuentres la felicidad.

No dijo nada por un rato. Al terminar la comida me llevo de regreso al hospital, al parecer todo se había arreglado con el.

Me despedí de él y entre al hospital, me dirigí a mi oficina donde estaba mi mejor amigo revisando unos papeles, rei.

—Te estaba ayudando con algunos papeles que trajo una enfermera, ¿Que tal salió todo? —despegó su mirada de aquellos papeles.

—Todo bien, al parecer Chris me perdono y bueno, hablar arregla las cosas —me senté enfrente de él.

—Me alegra tanto escuchar eso, bueno la cirugía salió de maravilla, el paciente ya está en reposo —se levantó de mi escritorio.

—Muchísimas gracias Nick, no se que haría sin ti —le di un abrazo.

—Por cierto, una señorita muy bonita vino a buscarte pero le dije que no estabas, una tal Judith —dijo despeinando mi cabello.

—Judith, ay no, iré a verla, puedes ir a descansar si quieres, sabes que mi casa ya es también la tuya —reí acercándome al sofá para tomar mi bolsa.