Capitulo 24

135 4 1
                                    

Joel

Desde esa vez en la casa de playa, todo había cambiado para ambos, habian pasado dos semanas, ella y yo no hablabamos, ni siquiera cruzabamos mirada, hace una semana se fue a casa de su abuela y llegaba hoy, la habia extrañado mucho, poco a poco logro tener un espacio en mi vida y por alguna razón quería seguir estando con ella, pero me porte como un idiota con ella.

Estaba en el sofá de la sala, Lucas estaba trabajando y mi mamá había ido a casa de una amiga a hacer unas cosas. Tenía un trabajo que entregar mañana así que estaba muy estresado.

—¡Mierda!—grité apretando mis puños.

Todo me estaba saliendo mal, trataba de escribir un ensayo pero no me salían las palabras, mi mente estaba en otro mundo, pensando en todo menos en lo que era. Después de un rato al parecer ya estaba logrando concentrarme hasta que la puerta de la casa se abrió, seguí en lo mío sin prestarle mucha atención.

—¿Mari estás en casa?—escuché su voz, la cual reconocía perfectamente bien.

Volteé a verla, ella buscaba con la mirada a Mari, se veía algo triste, se notaba que había llorado, y si no es porque me enteré que su abuela estaba muy enferma, creería que es por mi.

—No hay nadie, Mari salió a hacer el súper.—le conteste mirándola.

—Gracias.—respondió seca sin ni siquiera mirarme. 

Subió a su habitación con sus maletas, a decir verdad, me sentí un poco mal porque ni siquiera me miro, seguí en lo mío pero su llegada me había puesto aún peor, si antes no tenía idea de que mierda hacer con este trabajo ahora menos.

Después de casi dos horas ahí sentado, pude terminar ese dichoso trabajo, fui a la cocina a buscar algo de tomar, me senté en los bancos de la cocina y me puse a ver mi móvil.

—Que bueno que te veo, ¿ya estás mejor?—escuché una voz masculina que venía de la sala.

—Algo así, ella está muy mal, no quiero que se muera, no quiero volver a sufrir ese maldito sentimiento de perder a alguien.—escuche un sollozo, era Lilian.

¿Volver a perder a alguien? ¿A que se refería?

—Tranquila, verás que todo estará bien mi amor.—me asome un poco y estaban abrazados, claro que sentí rabia, ¿porque? ni yo se.

—Gracias por todo Nick, pero mejor vamos a mi habitación, necesito que me pases todos los apuntes y me cuentas qué temas vieron esta semana que me ausente.—la miré secando sus lágrimas.

Aunque no quería aceptarlo, me hacía sentir mal verla así, salí de la cocina, ellos me miraron, subí a mi habitación azotando la puerta, me tire en la cama y miré al techo. ¿Porque mierda estaba así? Nunca me había importado la vida de ninguna chica y mi hermanastra no sería la excepción.

Esta niña estaba revolviendo cosas en mi y no podía ser así, era bastante linda, sexy y de todo, pero no podía sentir más allá que atracción sexual, y eso se tenía que acabar, tenía que matar todo sentimiento hacia ella, aparte, sería incomodo tener una relación con la hija del prometido de mi madre, sería raro y no se si podría.

Mi teléfono empezó a sonar, era Maggie, ni siquiera quería verla o hablar con ella ahora, así que lo deje sonar, me di una ducha, me vestí algo casual y salí de ahí, no quería verlos juntos, se que me daría bastante rabia así que mejor me fui de la casa.

—Hola guapo, ¿qué haces aquí?

Me dijo Lucia al verme parado en la puerta de su casa, ella era una más de las aventuras que llegaba a tener.

"Un amor imposible" - Joel de León.  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora