FOR YOU © kooktae

03

He matado a alguien. 

Yo nunca quise matar. 

Soy una buena persona. 

Dios mío, ¿por qué hice algo así? 

Yo no quise hacerlo. 

No. No. No. 

¡No!

¡No quise hacerlo! ¡Yo no quería! ¡¡No!!

Mi cuerpo se sacude con violencia y mi mano que sostiene el caño con sangre no cede a soltarlo. Estoy muy nervioso, debo calmarme. 

Me encierro en uno de los baños del instituto y agradezco a Dios por encontrarlo vacío. Es lo esperado y normal, todos están en clase ahora. 

Me observo en el espejo y tiemblo más al ver mi rostro lleno de sangre. 

Yo no quise matar a nadie, me obligaron a hacerlo. En verdad yo no quería, pero las personas malas merecen cosas malas, ¿verdad, Taehyung? La única solución para protegerte era matarlo, ¿no?

Él era una mala persona, quería alejarme de ti, ¿y dime cómo puedo protegerte si no te tengo a mi lado?

¡Es verdad! Él era malo, se lo merecía completamente. No puede haber un mundo con personas tan sádicas sueltas como si nada. No lo hice solo por ti, Taehyungie hyung, también lo hice por el bien del mundo, mundo donde debemos vivir juntos sin problemas. 

Lavo mi cara, mi cabello y manos, haciendo todo lo posible por no dejar rastro alguno. Me saco la mochila de mis hombros, busco mi ropa de educación física y me cambio, dejando la ropa sucia dentro del bolso, luego la tiraré. 

En cuanto al arma, intento lavarlo también, también lo meto en la mochila, aunque sobresale un poco. Debo tener cuidado. 

Salgo del baño, mirando hacia ambos lados y me siento seguro cuando lo veo vacío. Camino hacia la salida y escucho como suena la campana del recreo... maldición. 

Me escondo en uno de los tantos cuartos vacíos que tiene el instituto y me quedo allí mientras veo a los alumnos pasar. Entre ellos, me encuentro con Kim Taehyung.

Mi novio.

Va caminando solo, pero aun así con una sonrisa reluciente tan característica de él, misma que me enamoró y me sentenció a ser esclavo de su vida. 

Mientras observo esa sonrisa lo comprendo completamente todo, dejo de dudar y los miedos se esfuman. 

Todo es por él, por verlo bien, por verlo feliz. 

Porque esa sonrisa nunca debe convertirse en una mala mueca acompañada de un irritante llanto, Taehyung. Y con tal de evitarte lo malo, estoy dispuesto a protegerte sea como sea.

Debo estar junto a ti.