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Taehyung camina rápido por los pasillos, por alguna razón se siente ansioso, entonces cada dos pasos no puede evitar girar su cabeza hacia todas las direcciones posibles.

Llega hasta el principio del edificio, al sector de casilleros, e intenta hacer buena memoria para recordar cuál pertenece a su exnovio. Intenta en algunos con la clave que recuerda, pero falla, entonces ya no sabe si se está equivocando de lugar o de clave.

Vuelve a mirar hacia todos lados, varios estudiantes pasan cerca y él se asusta por pensar que alguno podría ser Jungkook, pero no, solo es su imaginación. Ni siquiera sabe porqué se siente tan ansioso por abrir el casillero ajeno, en su interior sabe que conoce bien a Jungkook y teme encontrar esa llave y darle paso a ideas muy malas.

Algo en él desea no encontrar nada, de verdad lo desea.

Entonces se cruza con el casillero 997, y está seguro que debe ser ese sí o sí, e intenta recordar la clave. Miles de números pasan por su cabeza y sabe que quizás ni siquiera en matemáticas se esfuerza tanto. 

0922 es la clave que permite que la puerta se abra.

Taehyung sonríe con nerviosismo y abre el casillero, mira nuevamente a todas direcciones y luego indaga en su interior. Se encuentra con la mochila de Jungkook, busca en su interior, encuentra útiles escolares, nada más, entonces revisa sus bolsillos exteriores, y tampoco hay nada. La tranquilidad lo llena por no ver nada raro, pero luego nota que la mochila en su interior tiene un bolsillo secreto, lo revisa y...

Ahí está la maldita llave.

Por alguna razón siente un escalofrío, pero guarda todo con nerviosismo y cierra el casillero de inmediato. Esconde la llave dentro de su bolsillo e intenta irse, casi sale corriendo, pero al momento de girar de pasillo, choca con alguien y termina cayendo.

—¿Hyung? —lo observa, es Jungkook. Odia la suerte que tiene—. ¿Estás bien?

Él se levanta de inmediato, sacude su ropa y se maldice a sí mismo por no poder dejar de temblar y sentir un miedo al que no logra encontrarle razón.

—Ah, ah... s-sí —Intenta sonreírle, pero sus nervios hablan —. Ah... ¿Así que te mudas?

En ese momento, Taehyung solo puede pensar que es un imbécil por su nula capacidad para cortar charlas.

—Ah, sí —responde—. Por la noche estaré saliendo, seguro. 

Por alguna razón, la noticia impacta negativamente en Taehyung, quien no es capaz de procesar por completo y sus nervios de pronto se desvanecen.

—¿Por la noche, eh? Creí que tardarías algunos días más... digo, realmente no debe importarme, pero fue una sorpresa, solo eso.

—Cuanto más rápido, mejor. —Suspira, algo triste—. No tengo nada en este lugar, a decir verdad, todos me odian o desprecian, entonces solo quiero una nueva vida. 

Taehyung reconoce que Jungkook lo incluye en ese "odio masivo", lo cual lo hace entristecerse un poco. Sin embargo, no hay punto de retorno, lo hecho está hecho, lo dicho ya fue escuchado y las consecuencias son el producto claro de la situación.

—Ah... bueno, supongo que me sorprendió solo un poco. —rasca su cabello, incómodo. —Ojalá puedas encontrar la felicidad. 

Siente que debe decir algo más, que debe disculparse por haberle deseado la muerte antes, pero su garganta se siente como si tuviera una piedra y las palabras nunca salen. Y, Jungkook, por otro lado, también espera esas disculpas, porque con esas disculpas todo hubiera cambiado y él hubiera tomado otras decisiones.

Pero ninguno termina por disculparse con el otro.

Jungkook le sonríe en respuesta, le da una reverencia y se aleja de él. Taehyung voltea a mirarlo y una presión en su estómago de pronto le genera náuseas. Pero no debe perder más tiempo y lo sabe, deja los sentimientos de lado y se encamina hacia el centro de estudiantes, donde espera que Yuqi aún siga allí.

—Yuqi... — entra, la chica sigue en el mismo lugar que antes. Se acerca y le entrega la llave— Aquí tienes.

Ella se muestra confundida, pero las toma. 

—¿Dónde...?

—No importa —Interrumpe, mientras guarda todas sus cosas en su mochila con viveza, de pronto pierde el equilibrio, pero se reincorpora —Me iré a casa, necesito descansar.

—¿No harás contra turno? — Taehyung le niega, mostrándose algo mareado. —¿Estás bien?

—Solo me puse a pensar en algunas cosas. —Le resta importancia—. Ah, Yuqi, ¿podrías decirme si encuentras algo inusual dentro del depósito?

—Estoy en un proyecto, pero apenas termine iré a fijarme.

Taehyung le agradece, luego sale del salón y por último de la institución. Ya es tarde, quizás las cuatro, suele quedarse siempre un tiempo más debido al centro de estudiantes, pero esta vez solo se siente muy mareado.

Decide parar su trayectoria en una de las plazas que encuentra, se sienta a tomar algo de aire e intenta calmar su mente.

¿Por qué no puede parar de pensar cosas malas? Es como si de todos los escenarios posibles, su cabeza se centrara en el más irreal y catastrófico de todos.

Solo necesita refrescar su cabeza... la maldita llave, Dahyun, las teorías de Yuqi, la discusión con Jungkook... todo es un maldito dolor de cabeza.

—¿Taehyung? 

—¡Ah, mierda! ¿¡Ahora qué!? — grita, pero se calma cuando reconoce a la hermana de Hoseok frente a él—. Ah, lo siento... ¿Jiwoo noona?  — se pone de pie, da varias reverencias—. Lo siento, de verdad...

—Taehyung-ah, ¿estás bien? —Ella lo toma de las manos, lo lleva a sentarse otra vez. 

—Sí, lo lamento, fue un día estresante. ¿Qué haces por aquí? 

—Solo salgo a caminar, me hace bien. —Le sonríe, luego la chica piensa y le pregunta entusiasta: — Ah, cierto, Taehyung, no sé si es el mejor momento, pero uería saber si podría revisar la caja de recuerdos que te dejé, creí que solo había cosas tuyas y de Hobi, pero parece que también había cosas de la familia.

Nuevamente, Taehyung no entiende nada de lo que le dicen y está cansado de las incoherencias.

—Lo siento, noona, no sé de qué me estás hablando —contesta, confundido—. Yo no acepté la caja de Hoseok, ¿lo olvidaste?

—¿Ah? —Se extraña—. Ese mismo día me crucé con Jungkook en el parque, le entregué la caja y pedí que te la diera, ¿acaso no lo hizo? 

Taehyung siente un escalofrío que lo recorre de pies a cabeza, entonces empieza a temblar y su cabeza da miles de vueltas, se siente asqueado por la situación.

—No, sí me la dio —Miente, totalmente ajetreado mientras se pone de pie—. S-Solo lo olvidé, ¿discúlpame, sí? Estoy muy distraído hoy. Pero, ahora mismo iré a fijarme, te escribo luego, Noona.

Y desaparece, envuelto en una sensación mixta de furia y nerviosismo.

Irá a casa de Jungkook, está decidido.

Necesita respuestas.

FOR YOU © kooktaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora