¿Comienzo Caché?

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Tres semanas después

Pov Calle

-¿Entonces no la has visto desde ese día?-- Manuel pregunta desde afuera del cuadrilátero de boxing

-¿Por qué carajos tengo que seguir vendada?-- Me quejaba mientras mantenía mi modo de defensa activo.

-Tienes que seguir agudizando todos tú sentidos, hija-- podía jurar verlo encogerse de hombros aunque mi vista estaba negra, poco tiempo después logré captar un ruido detrás de mi, me agaché rápidamente metiéndole el pie a la otra persona y logré escuchar como caía al suelo, sonreí orgullosa

-Bueno, no es tan difícil después de todo-- Manuel es como mi padre, desde que vivo con él me ha enseñado defensa personal y diferentes tipos de artes marciales, entendimiento de armas, entre otras cosas, él dedico su vida a ser escolta, hasta que llegue yo, una historia bastante larga que surgirá en otro momento.

-Hablamos de la chica, Daniela-- indagó, mientras yo evadia golpes de los contrincantes, aún no daba por sentado cuántos eran, comence a contarlos mientras los derribo y golpeo.

-Pues nada papá, sí sentí una conexión con ella sabes-- Esquivo un golpe, lo devuelvo, segundos después cae, uno-- Pero después de ver lo de la prensa, se me quedo grabado el que todos pierden cuando se cruzan con ella, o algo así-- me agachó esquivando el golpe, meto una patada antes de levantarme haciendo caer a la persona, dos-- No estoy para perder papá.

-Debes conocer a las personas bajo tu propia perspectiva Daniela-- uso un tono de regaño al final.

-Eso me demostró ese día cuando me descuide y se fue con otra-- uno de los chicos logro darme un golpe que me hizo caer-- ¡Joder José!, espero no hayas sido tú-- me quejé, sentí otro golpe en mis costillas, me levanté rápidamente y contraataque sin darles tiempo de pensar

-Además-- dije recuperando el aliento, luego de un rato-- estoy ahogada en mi carrera, ya toca hacer pasantías en una empresa del país, sabrá Dios cual será, en el trabajo que está hasta el tope gracias a la prensa y mi supuesto romance con Garzón y los entrenamientos.

Ya me había desecho de los cuatro, mi pecho subía y bajaba mientras recuperaba el aliento.

-Y aún así te has dado el tiempo para pensar en ella--me quite la venda de los ojos y note como sus ojos emanaban cariño.

-Me da miedo salir lastimada, papá.

Agaché la cabeza, frustrada.

-Solo quiero que tengas en cuenta hija, que si vuelven a cruzarse, te des la oportunidad de sentir... Hija, debes arriesgarte, desde que llegaste a mi vida he visto mucha tristeza en tus ojos y ese día regresaste a casa con una gran sonrisa, una genuina, de verdad.

-Tú me haces feliz, y Paula y Sebas, y Mariana por supuesto-- su esposa también es como una madre para mí.

-Lo sé hija, pero mereces que todo ese amor que tienes para dar sea expandido... Ama hija, y si algo sale mal, aquí estaremos para ayudarte.

Asentí con la cabeza dando por sentada nuestra conversación.

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Horas después 

No podía creer que después de tres semanas y unas cuantas horas se pudiera cumplir mi manifestación.

Ya estaba por graduarme, lo que significa es que: nos envían en grupos a cubrir labores dentro de empresas del país, con la intención de desenvolverse en el ámbito laboral y dar a relucir lo que se supone hemos aprendido a lo largo de la carrera, así como prepararse para la vida empresarial, entre otras cosas que no preste atención.

Todo a tu lado. [Caché]✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora