Peleas.

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1/2.

-Gracias por ayudar-- dije con sarcasmo a Raquel.

Ella se encogió de hombros sin dejar su estúpida sonrisa.

-Merezco cobrarme el favor, ¿no?

Seguimos en el estacionamiento, Daniela se había ido luego de escucharla, me sentía un poco perdida.

Suspiré pesadamente antes de encararla.

-No tenías derecho a decirle-- me crucé de brazos.

-Claro que si, te dije, merezco cobrarme el favor-- se acercó a mí-- ya que no me dejas tocarte por esa imbecil que te hará daño, al menos merezco darme el gusto de presumir que yo llegué primero.

Sonreí falsa y amarga.

-Pudiste llegar primero, pero no te amé ni la mitad de lo que la amo a ella-- espeté con frialdad.

Su mandíbula se tenso, y formó unos puños con sus manos.

-¿¡Qué no te das cuenta que ella te va a hundir!? ¡Todo lo que has construido amor, todo lo va a destruir!

-¡No me digas amor!-- me quejé, fijando mi vista al suelo-- no sé si es ella, no sé...

-Lo sabes pero no lo quieres aceptar-- trato de abrazarme pero yo retrocedí un paso-- Yo sé que te falle, pero nunca deje de amarte y nunca haría nada para destruir todo lo que te costó construir.

-Ella me ama...

-Al parecer no te ama lo suficiente.

-¡Cállate!

Le grité furiosa, y de la nada mi cuerpo comenzó a temblar, mis manos comenzaron a sudar, sentí el hormigueo en mi cuerpo.

-¡Poché!-- escuché a Raquel a lo lejos, logré fijar mi vista en ella pero se veía borrosa--¡Pequeña!, solo respira, aquí estoy, no te voy a dejar... Escúchame.

Su voz tintineaba por un lado de mi mente, trate de aferrarme a eso, mi respiración se aceleró.

La miré con temor, pero no a ella, temor a morirme aquí, así... Sin hablar con Daniela.

Ella me tomó por los lados de mi cabeza fijando mis ojos en ella e inhalaba y exhalaba, logré concentrarme en eso.
Repetí su acción hasta que logré estabilizarme.

Me rodeo con sus brazos y esta vez no pude rechazarla, me aferre a ella... Tratando de no llorar, no me gustaba que me vieran llorar.

-¿Desde hace cuanto no vas al psi...?

-Desde que conocí a Daniela-- corté

-¿Por qué fuiste en primer lugar?-- indagó sin soltarme

-Daniela-- murmuré-- lo que estaba sintiendo por ella era demasiado grande, y no podía controlarme, me aceleraba con cualquier pensamiento, me causaba ansiedad porque era nuevo y no lo había experimentado.

-En serio la amas-- dijo, pero no de mala manera, tranquila.

-Sí-- sentí un nudo en mi garganta-- y tengo miedo... de qué... todo haya sido mentira, o no sé, que no me ame...

-Si te ama, pequeña... Lo siento por decir lo que dije, no quería que te pusieras así.

-Ya pasó...

-En sus ojos se ve que te ama, en todo momento tenían un brillo, incluso, mayor que con el que yo te miraba... No hay nadie en este mundo que te conozca y no pueda enamorarse completamente de ti, pequeña... Yo fui una idiota, pero te sigo amando, así que no dudes en eso.

Todo a tu lado. [Caché]✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora