La Redención del Mafioso © #3 " Almas Corrompidas"[SIN CORREGIR]

PROLOGO.

Prologo:

Isabella:

Estoy empapada, tengo frío y mi cuerpo está tan débil que siento que me estoy por desmayar. Las heridas de mi espalda arden cuando la sangre seca y el sudor se mezclan con la lluvia, haciendo que se adhieran a mi escasa ropa. Estoy cansada, mis párpados pesan y comienzo a sufrir de algunos temblores. Se que no podre resistir mucho tiempo mas. Llevo mucho tiempo corriendo sin rumbo, y solo me importa alejarme lo más que pueda de aquel horrible lugar donde fui cautiva por tanto tiempo.

Recorro la zona con mis ojos buscando un lugar donde ocultarme hasta que la tormenta pase, pero descarto la idea de inmediato. « No puedo detenerme ahora » Si me atrapan, mi castigo por escapar, será peor que todo lo que me han hecho. El cielo se ilumina cuando los relámpagos se extienden por todo el manto nuboso, mientras a lo lejos se escucha el estruendo de un rayo golpeando en algún lugar cercano, me estremezco y empiezo a correr más rápido sin importarme mi estado.

Sigo mi camino corriendo mientras me golpeó contra las ramas de los árboles, cuando me adentro a un gran parque; Tropiezo con todo a mi paso, mis pies sangran y duelen, pero no me detengo. Avanzo hasta encontrarme con un lago, y paso saliva cuando noto que si quiero seguir avanzando debo atravesarlo. « Y lo haría, si supiera nadar.» Salto en mi sitio al escuchar el crujir de unas ramas entre la oscuridad de los árboles, inmediatamente siento el peso de una mirada sobre mi, alguien me observa, puedo sentirlo. Y mi respiración se acelera rápidamente ante la posibilidad de haber sido encontrada.

« ¡Por favor no! »

Miro hacia la oscuridad entre los árboles, y entrecierro los ojos tratando de enfocar la mirada. Puedo sentir que hay alguien ahí, y lo confirmo cuando la silueta de una persona medio se deja ver entre la oscuridad. Allí debajo de una capucha negra, hay una persona. Mi cuerpo tiembla cuando medio enfoco la mirada en la gran silueta, se ve que es alguien alto y fuerte, y eso solo logra atemorizarme más. Me paralizo un instante, porque efectivamente en las sombras, se puede ver como esa persona me observa fijamente. Y me sobresalto cuando noto que comienza a acercarse a mi y vacilo dando un paso atrás. Solo tengo dos opciones, o me lanzó al embravecido río, y muero ahogada o muero en manos de estas personas.

El extraño da otro paso en mi dirección y ya no tengo tiempo para decidir, retrocedo por instinto en un intento por alejarme de la amenaza pero acabo cayendo al río. Lo primero que siento es el ardor insoportable en mi espalda cuando el agua golpea fuertemente contra las heridas abiertas. La corriente comienza a arrastrarme y pronto nada está claro.

Lucho con la poca fuerza que me queda para mantenerme a flote, y a lo lejos logro distinguir una persona de cabello negro que se lanza al río.
Pero no puedo ver más, mi cuerpo es sumergido una y otra vez, golpeando contra las rocas y ya no resisto más. «Después de todo, voy a morir aquí. » Pero eso no importa, al menos moriré siendo libre. Dejo de luchar, mi cuerpo se siente liviano y poco a poco me dejo ir.
Mis ojos se cierran y es la imagen de la sonrisa de mi madre la que aparece frente a mi. Estoy cansada, no puedo seguir luchando y empiezo a perder el conocimiento poco a poco, hasta que todo se vuelve completamente negro.

Bienvenidos y bienvenidas a esta nueva aventura, desde ya les agradezco infinitamente por darme una oportunidad y leer mis historias. En este caso vamos con el tercer libro de la serie Almas Corrompidas. Espero que les guste la historia de Sebastián e Issabella y le den mucho amor. Amo leer los comentarios que me dejan y me esmero para poder responderlos a todos. sin mas las dejo para que sigan disfrutando de la lectura.