¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
<─────•✰•─────>
❝ No voy a atacar a menos de que me ataquen... ❞
★・・・・・・★
Cuando Emma recibío la llamada (una hora antes de partir al aeropuerto para volar de regreso a Estados Unidos) Estaba confundida, porque por lo general Steve Rogers no solía admitir cuando necesitaba ayuda, pero hoy sí.
— Cap, es un tema complicado — contestó la rubia.
— Necesito tu ayuda — le dijo Steve y Emma soltó un fuerte suspiro. — Ven aqui apenas puedas, por favor.
— Voy ahora porque un Jet me espera — contestó la ojigris y cortó la llamada.
En unos minutos Emma estaba frente al lugar donde encontraría a Steve Rogers, cubrió su rostro con una capucha y unos lentes. Tocó repetidas veces la puerta para que fuera abierta por su tío.
— Emmy, viniste — Steve soltó un suspiró.
— Tío Steve te adoro, pero nunca más volveré a hacer esto. ¡Le tuve que mentir a mi papá! — chilló molesta.
— Lo siento, Emmy — se disculpó algo apenado. — Pero no te lo pediría si no esperará que pudieras ayudarnos — dijo mientras le hacía una seña para que lo siguiera hasta el lugar donde estaba él: James Buchanan Barnes o El Soldado del Invierno.
— A lo único que voy a ayudarte es a entregarlo a la policía — se quejó la rubia.
— Emma — dijo Steve pesadamente. — De verdad, necesito tu ayuda.
— ¿Y qué es lo que necesitas? ¿Qué lo ayude a salir del país? Dejarlo libre — dijo sarcásticamente. — Mira lo que esa persona hizo en mi hermoso rostro — se quitó la capucha mostrando el moretón que tenía en el pómulo derecho.
— No era él.
— Ya sé que no era él, pero igual duele.
— Emmy, eres poderosa, solo necesito que lo liberes.
— ¿Liberar de qué? — pregunto Emma con enfado.
— De su mente — contestó Steve, Emma soltó una risa ironica. — Ya sabes que Hydra lo capturó y le lavó el cerebro.