𝐒𝐌𝐎𝐎𝐓𝐇 𝐎𝐏𝐄𝐑𝐀𝐓𝐎𝐑 - 𝐂𝐀𝐑𝐋𝐎𝐒 𝐒𝐀𝐈𝐍𝐙 -

- 𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝐒𝐄𝐕𝐄𝐍𝐓𝐄𝐄𝐍 -

Carlos había llegado a Madrid la noche anterior, me había mandado un mensaje para decirme que pasaba a por mí a la hora de comer a mis oficinas, que le pasará la ubicación de esta.

Yo no puse ninguna resistencia así que le pase la ubicación de las oficinas rápidamente y le dije que pasara, así podría enseñárselas.

- Atenea un chico pregunta por ti. - escuché la voz de mi secretario por el teléfono de la oficina.

- Tráele hasta aquí por favor Luca. - dije pulsando el botón.

Varios minutos después la puerta de mi oficina se abrió tras unos pequeños golpes en la puerta y pude ver a Carlos con una sonrisa y una bolsa entre sus manos.

- Luca puedes irte a comer. - le dije con una sonrisa.

Carlos se acercó hacia mi mesa y yo me levanté de esta para acercarme a él.

- Eres toda una mujer de negocios. - dijo Carlos mirando toda mi oficina con curiosidad - No sabía que esto sería tan grande.

- Bueno nos dedicamos a muchas cosas. - sonreí.

Carlos iba vestido totalmente de negro, hacia un poco de frío y llevaba una chaqueta de cuero, que lo hacía ver irresistible.

- ¿Quieres que te enseñe esto? - le pregunté antes de la abrir la puerta de mi despacho y hacer un movimiento con la cabeza para que saliera.

Hice a Carlos un tour por toda la oficina, desde los almacenes donde guardamos ropa de marca que usábamos para diferentes casos, hasta los estudios de fotografía, la sala de descanso de todos mis empleados y por su puesto que le enseñe mi salón de belleza donde muchos famoso venían a arreglarse.

- ¿Que te ha parecido? - le pregunté sonriendo cuando volvimos a mi despacho para recoger mis cosas.

- Creo que eres una genia, me parece de admiración que hayas creado todo esto tú sola. - dijo el chico sonriendo - Tu círculo tiene que estar muy orgulloso de ti.

- Esto es como mi hijo, lo cuido, lo mimo y le doy lo mejor de lo mejor. - le dije - Y no espero mejor de mi equipo, si saben trabajar bajo presión, las puertas están abiertas para todos.

- He podio ver qué colaboras con algunas organizaciones, eso también es de admirar Atenea.

- Me gusta ayudar y hago todo lo que está en mis manos para hacerlo, siempre he visto como mis padres ayudaban a los demás y cuando cree todo esto, sabía perfectamente donde quería llegar. - le comenté.

Trabaja con algunas organizaciones como contra el cáncer infantil, organizaciones feministas, organizaciones de animales y a cada una les ayudaba de una manera diferente.

- Por eso eres un ángel. - sonrió y yo me puse roja como una tonta - Y así estás muy mona, no me cansaré de decírtelo nunca.

Sonreí mirando al chico que me traía de cabeza.

Me puse la chaqueta de cuero que estaba colgada en mi armario y me la puse, después cogí mi bolso.

- Vaya parece que nos hemos puesto de acuerdo para vestirnos. - dijo Carlos mirándome de arriba a bajo.

Los dos íbamos vestidos tontamente de negro y usábamos chaquetas de cuero.

La verdad es que me gustó vernos así a los dos.

Y el estaba súper sexy.

- Hacemos buena pareja. - le dije guiñándole un ojo antes de salir de mi ofina.

Segundos después sentí como el salía detrás de mí para alcanzarme.

- ¿Donde iremos? - pregunté a Carlos.