- 𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝐓𝐇𝐈𝐑𝐓𝐘 𝐅𝐈𝐕𝐄 -

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- MÓNACO, 23 DE MAYO -

Habían pasado algunos meses desde que la temporada había comenzado, en tan solo unos días sería la Gran Carrera de Montecarlo y yo estaba muy emocionada.

Este tiempo con mi relación con Carlos se había consolidado mucho más, cuando no podía viajar junto a él por mi trabajo siempre estábamos en contacto y los días sueltos en lo que no había carrera siempre nos veíamos en Madrid.

Los días junto con Carlos en Madrid para mi eran muy especiales, hacíamos muchos planes de pareja, salíamos con nuestros amigos, dormíamos juntos en alguno de nuestras casas...

Carlos se había convertido en una parte muy importante de mi vida, le amaba y hacía mucho tiempo que no sentía algo así por alguien.

Había llegado hoy a Mónaco, Carlos había viajado directamente desde Imola y nos veríamos aquí.

Lo bueno es que no estaba viajando sola, Lily había aceptado a viajar conmigo y ver la carrera. Hasta Carlos hablo con ella para convencerla en que tenía que venír a una de loa mejores circuitos de la temporada.

- Sabes que nunca había estado en Montecarlo antes. - me dijo mi amiga mientras un coche nos llevaba al hotel donde se estaban quedando los pilotos estos días.

- Tenemos algunos días para ver la ciudad, estoy segurísima de que te va a encantar, no hay un lugar con más lujo. - le dije con una sonrisa.

- ¿Tienes ganas de ver a tu chico? - me preguntó invitado la cara de enamorada.

- Muchísimas, no le he visto casi en dos semanas y me muero de ganas. - confesé.

- Te pones más tonta cuando estás enamorada. - golpeé el brazo de Lily por decir esas cosas - No me pagues, sabes que es verdad.

- No lo es. - dije volviendo mi mirada hacia la ventanilla del coche.

Unos minutos después el coche paró frente al hotel donde nos hospedaríamos.  Caminamos a la entrada con nuestras maletas y enseguida reconocí el cuerpo de Carlos.

Estaba de espaldas hablando con dos hombre de traje, que no conocía.

Camine hacia los hombres y antes de que pudiera tocar a mi novio, se dio la vuelta y me miró con una sonrisa.

- Hola amore. - le dije con una sonrisa de oreja a oreja.

Carlos me rodeo con sus brazos y me dio un pequeño beso en los labios.

- Te he echado de menos. - dijo cuando se separó de mis labios, en un susurro que solo pude escuchar yo.

Carlos volvió a darse la vuelta y se despidió de los dos hombres con los que había estado hablando antes. Después se volvió a girar y nos miró a Lily y a mi.

- Hola Lily, nos ha costado que quieras venir eeh. - le dijo a mi mejor amiga, mientras le daba un pequeño abrazo.

- Soy una mujer ocupada señor Carlitos. - dijo abrazándolo ella también.

- Perdóneme señorita ocupada, he cogido antes tu llaves para que no tengas que esperar y puedas ir a descansar. - le entró la llave que había sacado del bolsillo - Está cerca de nuestra habitación, así te tendremos vigilada.

- Eso será necesario, no quiero que la lie. - dije riéndome y Lily me miró mal.

Caminamos hacia el ascensor y subimos hasta la séptima planta, Lily se estaría quedando en la habitación 206 y nosotros en la habitación 210.

𝐒𝐌𝐎𝐎𝐓𝐇 𝐎𝐏𝐄𝐑𝐀𝐓𝐎𝐑 - 𝐂𝐀𝐑𝐋𝐎𝐒 𝐒𝐀𝐈𝐍𝐙 -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora