- 𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝐅𝐈𝐅𝐓𝐘 𝐓𝐇𝐑𝐄𝐄 -

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- Última semana de enero -

Algunas semanas habían pasado desde que Carlos y yo habíamos decidido volver a estar juntos, unas semanas que habían sido maravillosas. El tiempo que pasábamos juntos era muy especial para mi, sentarme en el sofá de mi casa con Carlos ha ver una película o serie se había convertido en uno de mis pasatiempos favoritos junto al chico.

Había aprovechado esta mañana para quedar con Louis y Lily con los que había quedado para desayunar en mi casa.

- ¿Cómo se han tomando tus padres tu vuelta a tu relación con Carlos? - preguntó Louis antes de  llevarse a su boca la copa con zumo de naranja natural.

- La verdad es que nunca les conté la verdadera razón por la que lo dejamos aquella vez. - confesé a mis amigos y estos negaron con sus cabeza a la vez - No quería que se preocuparan por mi, los conozco muy bien y habría tenido a mi madre encima de mi durante meses, no quería nada de eso.

- Tu madre siempre te ha querido proteger de tipos como Carlos. - dijo Lily mirándome seria - Si supiera la verdad no llevaría nada bien que hubieras vuelto de nuevo.

Lily tenía toda la razón, mi madre siempre me había cuidado mucho de ese tipo de hombres y de que no eran buenos para mi. Siempre me daba charlas sobre el amor sincero, la lealtad y el quererse a una misma por encima de todo.

¿Pero que le iba a hacer si quería a Carlos?

- Se que Carlos ha cambiado, estos días juntos han sido como cuando empezamos juntos. - dije retando con la mirada a mi mejor amiga.

- O sea sigue siendo el mismo que te ponía los cuernos al mes de vuestra relación. - dijo haciendo una mueca de desagrado - Un mes por decir algo por que no sabemos ha ciencia cierta desde que momento empezó a engañarte con las otras.

Lily estaba enfadada, ella mejor que nadie sabía lo mal que lo había pasado cuando me entere del engaño de Carlos con Elizabet.

- Estoy enamorada de el Lily, solo quiero que esto salga bien, se que no te puedo pedir que tu también confíes y te agradezco tus palabras, pero se lo que tengo que hacer y voy con cuidado. - dije cogiendo una de sus manos para que me mirara a la cara - No volveré a dejar que Carlos me haga daño, pero necesito tener vuestro apoyo, no quiero que esto nos separe.

Lily me miró con sus ojos brillante y me dio una sonrisa de lado.

- Eso nunca va a pasar no seas tonta, nadie me va a separar de ti y ya tendré yo unas cuantas palabras con ese chico. - dijo acariciando mi mano que estaba unida a la suya - Además tu hermano también quiere hablar con él, me lo ha dicho, eso te debería dar más miedo de que yo quiera hablar con él.

- Si Romeo se pusiera serio conmigo saldría corriendo. - dijo Louis para quitar un poco de hierro al asunto.

Mi hermano era el más protector conmigo, aun que fuera el hermano pequeño, pero para él yo lo era todo. Siempre quería mi felicidad por encima de todo, aun que no fuera por cosas que a el le gustaban, pero sabía que el lo entendería y me apoyaría, pero obviamente hablaría con el piloto antes.

- Carlos quiere que me vaya ha vivir con el. - dije sin más, llevaba día sin saber como decirles esta información y supongo que este era el mejor momento.

- ¿Vivir con él? ¿Donde? - preguntó Lily soltando su tenedor encima de su plato.

- Aquí en Madrid, yo tengo aquí mi trabajo te recuerdo. - dije rodando los ojos.

- Pero si el apenas pasa tiempo aquí en Madrid. - ahora hablo Louis .

- Lo haremos como lo hacíamos antes, pero en vez de tener dos casa solo tendremos una, cuando el tenga que viajar lo hará y yo me quedare aquí trabajando. - les conté - Y cuando yo pueda viajar junto a él pues también lo haré.

- Parece que lo tenéis todo ya muy bien planeado, ¿Cuándo te vas a vivir con el? - dijo seria.

- Todavía no le he dicho que si, pero pienso hacerlo esta noche, así que supongo que empezaremos con los preparativos de la mudanza cuando antes, antes de que empiece la temporada y algunos viajes que tenemos preparados. - les comuniqué a mis mejores amigos.

- Bueno eso suena bien, estoy segura de que está vez es la correcta. - dijo mi amiga con una sonrisa.

- Espero que lo sea por que estoy embarazada. - solté sin más haciendo que mis dos acompañantes abrieran mucho los ojos.

- ¡¿COMO QUE ESTÁS EMBARAZADA?! - pregunto Louis.

Les sonreí con inocencia.

- ¿Desde cuándo lo sabes? ¿Y por qué no nos lo has dicho antes? Llevamos aquí dos horas hablando de gilipolleces y ahora sueltas que estás embarazada. - dijo Lily.

- Bueno al principio monte el desayuno para deciroslo, pero cuando me he sentado aquí me he paralizado, no sabía cómo sacar el tema. - dije en mi defensa - Me entera hace unos días, sois los primeros en saberlo.

- ¿No se lo has contado a Carlos? - pregunto Louis.

Negué con la cabeza y puse mis manos sobre mi tripa.

- No he tenido el valor para decírselo, no sé cómo se lo va a tomar y estoy cagada de miedo. - solté un suspiro - Se que quiere ser padre, pero no habíamos hablado de buscar un bebé ahora mismo. Hemos vuelto hace unas semanas y no sé si lo más correcto ahora mismo es formar una familia...

- Para, para. - dijo Lily cortándome - Escúchame con atención, estás embarazada, del hombre del que estás enamorada y tienes una vida perfecta. Si esto ha llegado en este instante es por algo y ese algo tiene que ser bueno, estoy segura que en cuento se lo digas a Carlos se va a volver loco y en cuento tú lo asimiles bien también lo estarás, te conozco muy bien.

- Vas a ser la mejor madre del mundo nena. - dijo mi amigo cogiendo una de mis manos y acariciándola - Eres cariñosa, familiar, exitosa, fuerte, eres un montón de cosas que ese bebé va a sentir por tu parte. Se que tienes miedo, pero nena estoy con Lily en que todo pasa por algo y que va a ser muy bueno.

No pude seguir aguantame las lágrimas y ropi en llanto, llevaba días guardamome todo esto para mí sola y no podía más.

- Pero no llores mi niña. - Lily se levantó y me rodeo con sus brazos - Guarda esas lágrimas para cuando tú hermano mate a Carlos por haberte dejado embarazada. - solo una risa que hizo sonreír.

- Me tenéis que ayudar a decírselo a Carlos, le quiero hacer algo especial. - limpie mis lágrimas con el puño de mi mano.

- No te preocupes que para eso estamos, le vamos a dar una pedazo de sorpresa al papá del año. - dijo Louis levantandose para unirse a nuestro abrazo.

Por suerte en mi vida tenía a estos dos ángeles, para mí lo eran todo y no podía estar más agradecida a la vida por haberlos puesto en mi camino.

𝐒𝐌𝐎𝐎𝐓𝐇 𝐎𝐏𝐄𝐑𝐀𝐓𝐎𝐑 - 𝐂𝐀𝐑𝐋𝐎𝐒 𝐒𝐀𝐈𝐍𝐙 -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora