Nuestro Destino Es Estar Juntos (Sesshomaru x Kagome)

Capitulo 39: Encuentro Entre Las Nubes

Estamos en silencio los cuatro no decimos nada, tengo una alternativa, puedo esfumarme frente a sus ojos, tengo la pulsera guardada entre mis ropas, puedo desaparecer mi olor y elevar una barrera espejo frente a ellos he irme sin hacer ningún ruido.
Soy sacada de mis pensamientos cuando escucho el crujido de una rama, proviene de Sango, ella se está acercando a mi, por instinto doy un paso hacia atrás, Sango deja de acercarse al ver qué estoy nerviosa debido a su presencia, ni siquiera se porque retrocedí si ella y yo soliamos ser mejores amigas en el pasado, fue repentino de mi parte pero tenia qué hacerlo, rompo la distancia entre nosotras, rodeo a Sango con mis brazos dandole un fuerte abrazo, sin poder evitarlo se me escapan algunas lágrimas y no soy la única, Sango me correponde el abrazo y puedo escuchar su voz solloza.

Kagome: Te eche de menos querida Sango.

Sango: No sabes lo difícil qué a sido para mi estar todos estos largos años sin mi mejor amiga a mi lado.

Kagome: No fue mi intención irme sin despedirme, quise volver con ustedes, cuando sonsegui volver no supe... Cómo darles la cara.

Sango: (Se separan para verse a los ojos sin dejar de abrazarle) Está bien, está bien, lo importante es qué haz vuelto y espero qué no te vayas a volver a ir sin despedirte de mi.

Kagome: (Se seca las lágrimas) Prometo no volver a ser absorbida por la luna infernal frente a tus ojos.

Miroku: Señorita Kagome.

Kagome: (Lo abraza) Miroku, espero qué sea verdad lo qué Shippo me conto, ¿ya no eres un pervertido?.

Miroku: Solo con mi dulce Sango.

Sango: ¡¡¡Ahhh!!!.

Pongo los ojos en blanco al ver a Miroku pasar su mano por debajo de la espalda baja de su esposa para luego darle un pequeño pellizco en su glúteo, Sango da un fuerte grito mientras su rostro se va tornando rojo por completo, Sango le termina dando una fuerte cachetada en su mejilla por hacerlo en publico, me rio a carcajadas al darme cuenta de qué ninguno de los dos a cambiado en casi nada, dejo de reirme cuando siento una mano apoyandose sobre mi hombro, al girarme me encuentro con la mirada dorada de Inuyasha, es incomodo para mi tenerlo tan cerca y no se porque, tal vez porque estaba en medio de un momento romantico a lado de Sesshomru, me limito a sonreirle a Inuyasha.

Kagome: No haz dicho nada lo cuál es extraño en ti, eres un hombre qué no conoce el significado del silencio.

Inuyasha: Siendo honesto contigo no se que decirte.

Kagome: Vaya, eso si es nuevo, Inuyasha se qué las cosas entre nosotros son diferentes pero lo nuestro no comenzo con una relación amorosa si no con una relación de amistad, al principio de toda historia de amor está siempre la amitad, recordemos esos tiempos.

Inuyasha: (Sonriendo) Tienes razón.

Sango: Por cierto Kagome no sabes lo muy bien qué te queda ese nuevo cambio de ropa, me haz dejado sin palabras.

Kagome: (Da una vuelta sobre sus talones) Está linda, ¿verdad?, no se ve muy bien porque está humedo pero en realidad es hermoso, mande hacer el traje hace unos años, es la ropa qué normalmente uso para exterminar, aunque ya no tengo la pinta de ser una sacerdotisa.

Miroku: Es cierto tienes el aire de ser una exterminadora. (Pensando) Ahora qué lo pienso esas ropas las he visto antes.

Ahi demonios, son las mismas ropas qué tenia puesta las últimas dos veces qué me encontre con ellos siendo la sacerdotisa misteriosa qué trabaja y ama a Sesshomaru, se me olvido por completo ese pequeño detalle, aunque no lo se... Tal vez tenga qué decirselos o ¿no?, es una decisión difícil de tomar o mejor dicho la decisión qué han tomado por mi.
Mis ojos se abren en par en par al ver a Sesshomaru aparecer detrás de Sango y Miroku, inmediatamente Inuyasha toma la empuñadura de colmillo de acero, es en estos momentos en donde estoy arrepentida de haberle quitado el collar de castigo a Inuyasha, me vendria muy bien un "Abajo" en este preciso instante, Sango y Miroku dejan de darle la espalda a Sesshomaru y lo observan, en eso me doy cuenta de algo el kimono de Sesshomaru está goteando al igual qué la mia, por instinto mis ojos pasan por Sango y Miroku, se miran entre ellos por unos segundos antes de pasar la mirada hacia mi.