Nuestro Destino Es Estar Juntos (Sesshomaru x Kagome)

Capitulo 103: Comportamiento Extraño

SESSHOMARU

Esto es extraño, creí que Kagome ya habia regreso a casa, no fue asi, desde está mañana he tratado de comunicarme con mi esposa por medio del espejo, sin embargo no he recibido ninguna respuesta, no le di importancia, tal vez estaba descansando, la zona del bosque que le pedi que revisara está alejada de la mansión, son muchas horas de caminada, me preocupe más cuando está tarde aun seguia sin responderme.
Volvi lo más pronto posible a la mansión dejando todo atrás, al llegar encontre la mansión completamente vacia, no habia nadie, ni mis cachorros, ni mi esposa, hace unas horas me comunique con Aiko, se que mis hijos están bien, quien realmente me preocupa es Kagome, no se nada de ella desde ayer, Kagome no suele ignorar mi llamado.

Takeshi: Hola Papá.

Aiko: Hey, hola Papá.

Apenas estaba saliendo de la mansión cuando me encuentro con mis hijos aterrizando en el patio de la mansión, enfrente de la puerta principal, Shiro y Aoi se ven muy emocionados al verme, me habia ido unos días antes de que sus hermanos vinieran por ellos para llevarlos a acampar, puedo ver la alegria en sus miradas, mientras se acercaban a mi esas emociones alegres se iban esfumando, se detuvieron a unos metros de mi, me estaban mirando fijamente, obviamente notaron algo mal en mi, incluso Takeshi y Aiko lo notaron de inmediato.

Sesshomaru: No puedo localizar a su Madre, ¿han sabido algo de ella?.

Takeshi: (Impactado) ¿Qué?, no... No hemos hablado con Mamá desde ayer cuando venimos por nuestros hermanos.

Aiko: (Confundida) No lo entiendo, ¿Mamá se fue?.

Sin perder tiempo doy un gran salto para elevarme en el aire, detrás de mi me vienen siguiendo mis hijos, estoy volando con rumbo a la zona norte del bosque, quizás Kagome aun este ahi, mientras nos dirigimos a esa dirección les cuento a los cachorros sobre la misión que le di a su madre para mantenerla entretenida ante nuestra ausencia, todos nosotros sabemos a la perfección que a Kagome no le gusta estár sola y si lo llega a estar le gusta ocupar su mente el alguna cosa, para olvidarse por un rato que está sola temporalmente.

Shiro: Puedo olerlo, es el aroma de Mamá.

Aoi: Yo también puedo olerlo, ella está por aquí.

Es cierto desde hace rato fue distinguible el aroma de Kagome, no está muy lejos de nosotros, está muy cerca, todos seguimos el aroma de Kagome, nos termina llegando a una zona del bosque en donde ahi una pequeña parte de un campo abierto de flores, desde el cielo podemos ver a Kagome sentada sobre una enorme roca, inmediatamente los cinco comenzamos a descender del cielo, hasta aterrizar a pocos metros detrás de ella.

En cuanto nuestras piernas tocaron el suelo firme, Kagome levanta la mirada para vernos, siento cómo el peso sobre mis hombros seguido de mi preocupación se va desvaneciendo de mi mente, al momento de ver su bello rostro dedicandonos una mirada, no soy el único que siente un gran alivio al verla, puedo ver a nuestros hijos relajarse al verla sana y salva, no se ve herida y su traje rojo no muestra ningún daño.

Aoi: ¡¡¡Mami!!!.

El primero en reaccionar en nuestro pequeño Aoi, no pierde tiempo en correr hacia su madre, cuando Kagome se pone de pie, casi es derribada cuando Aoi impacta contra ella, abrazandola con todas sus fuerzas, puedo ver en la mirada de nuestro cachorro un especie de brillo, no consigo entender bien el sentimiento en su mirada, quizás se trata de culpa, Aoi levanta la mirada para ver a su madre a los ojos.

Aoi: Lo lamento Mamá, yo no debi haberte tratado asi estás últimas semanas, se que tanto para ti, cómo para mi fue difícil esos meses que estuvimos separamos, debi haber pensado mejor las cosas, creo que con mi comportamiento te hice sentir mal, ¿puedes perdonarme?... ¿Mami?...