Extraviados [Stray] - Parte 1

Capítulo 151: Prejuicio

El resultado llegó más rápido de lo que pensaban.

Al mediodía del día siguiente, una vez finalizada la prueba, los dos Insignias Negras que planeaban infiltrarse en la escuela volvieron a pararse ante la puerta de la Real Academia Militar de Clementine. Sólo que esta vez no era para participar en una prueba, sino para matricularse oficialmente.

La Academia Clementine proporcionaba todas las necesidades básicas diarias, pero no excluía que los estudiantes trajeran sus pertenencias personales. Varios jóvenes que parecían nobles incluso utilizaban carruajes para transportar carros llenos de artículos personales hasta las altas murallas de forma ordenada. Incluso los estudiantes civiles llevaban a menudo más de tres maletas. Al fin y al cabo, una vez matriculados en la escuela, los estudiantes tenían estrictamente prohibido salir. Para los estudiantes ordinarios, lo que podían traer en ese momento era todo a lo que tenían acceso para este año. Si faltaba algún artículo, el resto sólo podía comprarse dentro de la academia.

Nemo miró el césped extremadamente liso y cuidado que tenía delante. En el centro había una enorme y exquisita estatua de Zenni que brillaba bajo el sol, mareándole la vista. Ahora entendía por qué los plebeyos llevaban sus bolsas al interior: los artículos de la academia no eran ridículamente caros, pero su calidad tampoco era baja. Para los hijos de la aristocracia, podía considerarse de buena calidad pero de bajo precio, pero para una persona corriente, era un gasto innecesario.

Los dos Insignias Negras, que sólo planeaban merodear durante unas docenas de días, en realidad no llevaban ninguna pertenencia necesaria. Oliver llevaba una bolsa de lona impermeable y la rellenó con su armadura transformada, mientras que el ukelele que le regaló Nemo lo llevaba a la espalda. Nemo llevaba una simple mochila y un loro gris que parecía una gallina desmayada.

Ann sólo les preparó dos conjuntos de ropa y un par de zapatos.

— Clementine les enviará uniformes profesionales —, la guerrera se frotaba una poción desconocida en la cabeza mientras murmuraba. — Esto es para que lo usen cuando se escabullan. No lo usen indiscriminadamente.

La mayor parte de la recompensa que obtuvieron de Randy y Mora se utilizó para pagar su matrícula de un año. Naturalmente, no recuperarían ni una centésima parte después de fugarse. Cuando se enteró de la noticia, la mente de Nemo se paralizó.

— Nuevos estudiantes, por favor por aquí —. Una señora de mediana edad vestida con una túnica azul grisácea y una cálida sonrisa en su redonda cara los saludó. — ¿Trajeron la medalla de bronce que se les entregó a su nombre durante el examen? Muy bien. En el reverso debería aparecer el número de su habitación. La entrada está por allí. Será mejor que se muevan rápido, chicos. Habrá una ceremonia a la hora del almuerzo, cerca del mediodía. Tendrán una hora para desempacar y ponerse sus uniformes.

Los alojamientos de la carrera de logística y enfermería eran contiguos. Las dos encontraron rápidamente sus respectivas habitaciones. No estaban seguras de si las habitaciones estaban divididas en parroquias o por especialidades, pero sus habitaciones estaban en lados opuestos de los mismos pasillos con las puertas enfrentadas.

Esto no era debido a la estrecha relación entre las dos carreras, ya que Nemo rápidamente se dio cuenta de la razón...

En la zona de los dormitorios masculinos sólo había un dormitorio para los estudiantes de enfermería. Los estudiantes de enfermería y logística eran los grupos más débiles en términos de poder de combate, por lo que la universidad probablemente hizo esto para evitar conflictos innecesarios entre los estudiantes.

Después de insertar la medalla de bronce en sus puertas, los dos abrieron sus habitaciones casi al mismo tiempo.

Nemo abrió la puerta y miró dentro, la cerró con incredulidad, luego dio un paso atrás y chocó directamente con Oliver que también retrocedía. El ukelele de Oliver chocó contra él, haciendo que zumbara un sonido grave de cuerdas.