Capítulo 165: Rueda de la Calamidad

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¿Aurorae?

Nemo se levantó sobresaltado y abrió los ojos ante el pasillo vacío que tenía enfrente.

Vance Talbott era el legendario asesino de demonios superiores, y parecía que se le estaba acabando el tiempo. Esto iba completamente más allá de la imaginación de Nemo. Pensó que Vance era sólo un colaborador de Telarenea. En un principio, le sorprendió la vaga atmósfera de subordinación entre ambos. Si Vance fuera Aurorae, esta extraña situación sería fácil de explicar.

La conversación en la habitación continuó.

— No se trata de persistencia —, Vance -o mejor dicho, el demonio superior Aurorae- respondió a la pregunta con indiferencia. — Gracias por tu regalo, Telaranea.

— Seamos prácticos —. La Sabia del Abismo no fue ni la mitad de cortés de lo que podría haber sido. — Esos pequeños de Horizon no son nada útiles. Aún no han atrapado a nadie.

— No interferiré en los asuntos humanos.

— Pero este asunto no tiene nada que ver contigo —. Telaranea chasqueó los dedos con buen humor. Un hechizo de limpieza rozó la extraña maquinaria metálica, limpiando el líquido sin dejar ni una sola gota. — Sobre Tumbleweed, he encontrado algo muy interesante... Oliver Ramon, el capitán de Tumbleweed, es hijo de tu alumno rebelde.

Vance levantó la cabeza lentamente, y sus ojos se entrecerraron.

— ¡Las cosas se están poniendo cada vez más interesantes! —. Telarenea apenas podía contener su emoción. — Al principio, solo sospechaba... Ahora estoy muy segura de que mi pérdida de memoria estaba definitivamente relacionada con Tumbleweed. Si no me hubiera encontrado con algo extremadamente irracional, no habría abierto el proyecto de investigación sobre la Plaga de Trent.

— Sólo hubo dos víctimas a lo largo de los años. Sonia Ramon y su hijo nonato. El informe de Horizon todavía fue un poco útil. Al menos me ayudaron a confirmar la identidad de Oliver Ramon. Ahora sólo queda una pregunta: ¿quién me lo hizo?

Vance apretó los puños, con cara de disgusto por el tema.

— Tengo una suposición. No importa quién lo haya hecho, puede que el propósito no sea un simple castigo. Ese tipo está protegiendo conscientemente a alguien —. Viendo que la otra parte no tenía intención de responder, Telaranea continuó suavemente. — Si no fuera así, antes de borrarme la memoria, él... o ella no necesitaba cortar específicamente mi transmisión de información. Con ocultar su rostro habría bastado. La otra parte obviamente no quería que revelara la identidad de la persona que destruyó el Castillo Marchito.

— ¿Estás segura de que lo hicieron dos personas? —. preguntó finalmente Vance de forma retórica.

— El poder para destruir el castillo no tiene precedentes. El uso fue simple y burdo, pero el hechizo que me lanzaron fue extremadamente preciso, así que definitivamente fue hecho por dos personas.

Nemo apretó el puño. Su boca se volvió amarga. Efectivamente, esa era la mejor manera que se le ocurrió en ese momento. Había esperado que Telaranea sólo retrocediera un poco, pero como resultado, la otra parte se había retirado entre bastidores y había empujado a Godwin y Horizon al primer plano.

Subestimó la curiosidad de Telaranea.

— No importa quién sea, creo que es una advertencia seria —. Vance guardó silencio. — Tu cuerpo en el Castillo Marchito ni siquiera difundió información valiosa, y el oponente pudo suprimir por completo a un demonio superior. No creo que Horizon pueda con un oponente así.

— Sí, yo también lo creo —. Al oír las palabras "Castillo Marchito", la sonrisa en la cara de Telaranea inmediatamente se desvaneció un poco. — Así que sólo les pedí que recopilaran información en mi nombre. En cuanto a la decisión de Godwin López de tratar con Oliver Ramon, eso no tiene nada que ver conmigo.

Extraviados [Stray] - Parte 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora