Capitulo 27|

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“El pasado tiene la mala costumbre de irrumpir el presente ”

~Desconocido.

19 de noviembre,2015

Amelie.

Anastasia Ekaterina Smirnova nació el siete de noviembre a las cuatro y cuarenta y dos de la tarde.

Fue un proceso algo tardío que duró más de 24 horas, mi cuñada demoró en ser ingresada, apesar de su perdida de líquido y posteriormente la ruptura de fuente le tomo algo de tiempo llegar a la dilatación necesaria, apesar de todo el procedimiento médico y la labor de parto fue un momento sin dificultades.

Excepto la de pujar una niña de tres kilos y medio.

Eda estaba bien, había ido a visitarla junto a los niños quienes estaban encantados con la bebé.

Una preciosa castaña de ojos verdes, Los genes Strauss haciendo su acto de presencia, cabello rubio y piel blanquecina y con muchos cachetitos para pellizcar.

Mi hermano y su esposa se veian agotados, felices pero agotados, lo cual era algo absolutamente normal cuando tenías un bebé recién nacido.

Tal vez estén algo confundidos por el apellido, les explicaré.

Alana y Zeck son mis hermanastros, hijos de mi padre, ellos tenían cinco meses cuando el murió.

En ese momento, Lucas—nuestro padre —estaba discutiendo con Yelena—la madre de ellos—sobre el apellido.

Ella no quería que tuvieran el apellido Strauss por las cosas que acarreaba tenerlo.

Bueno, eso es los que ella nos contó.

Si, teníamos reconocimiento, dinero y poder. Pero también enemigos, vidas públicas, prensa y un círculo social con el que cumplir.

Círculo social que es una cacería en ocasiones, debes elegir si ser presa o cazador.

Yo no soy ninguna,por ahora.

Alana no pertenece a ese mundo y no quiere hacerlo, aún así en un par de ocasiones le ha tocado asistir a la fiestas o galas de la alta sociedad.

Mis hermanos incluidos Zeck son cazadores, permanecen arriba siendo los mejores, volviéndose intocables.

Manejan las leyes, hoteles, tecnología, construcciones, política, turismo, relaciones públicas, moda, educación, medicina, casinos, restaurantes, están metidos en todo.

Y ya me desvíe del tema principal.

Volvamos al apellido.

Al morir Lucas la discusión sobre el apellido se disolvió, crecieron con el apellido Smirnov y cuando nos conocimos—trece años después—su madre seguía negada a cambiárselo y el día que se hicieron mayores de edad ellos quisieron mantenerlo.

Tal vez legalmente no somos hermanos, pero lo somos de sangre.

Nunca hubo pelea entre nosotros, no legales por lo menos. Alejandro al ser quién lleva los fideicomisos no se negó en entregárselos todo fluyó con tranquilidad.

Tal vez no mantengamos una relación entre todos de 10/10 pero se hace lo que se puede.

Cuando el parentesco se hizo público causó revuelo, la noticia viajo por toda Europa, eso junto a mi reciente desaparición puso a la familia en una situación complicada.

La prensa estaba sobre ellos, haciendo preguntas que no estaban dispuestos a responder.

Zeck y Alana tuvieron que viajar a Londres a ayudar a callar los falsos rumores.

𝐁𝐚𝐣𝐨 𝐞𝐥 𝐜𝐢𝐞𝐥𝐨 𝐞𝐬𝐭𝐫𝐞𝐥𝐥𝐚𝐝𝐨 𝐝𝐞 𝐋𝐨𝐧𝐝𝐫𝐞𝐬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora