ATRAPADAS EN LA PENUMBRA

Capitulo 18

Capítulo 18

Sin decir más, el príncipe se marchó. Jennie lo maldijo una y otra vez, no iba a permitir ser chantajeada y menos por aquel idiota que la engañó, debía encontrar algún modo para poder hablar con su hermana y largarse de una vez por todas de aquel horrible mundo.

Las horas transcurrieron y el rey supo que ya no debía perder más el tiempo, debía hablar con su hijo y contarle lo que estaba sucediendo con Sunny.

—Te noto más serio de lo normal ¿Estás arrepentido de haberme permitido volver? —Preguntó Jimin mirando a su padre. —Si es así, me iré en este momento.

—Se trata de Sunny.

—¡No me meteré con esa maldita mujer y en este momento me da igual ascender al trono, perfectamente puedes dejar embarazada a Tiffany, así tienes un hijo que lleve tu sangre!

—¡Déjame terminar! —Dijo Donghae molesto. —Esa mujer quiere tenerte y si no eres de ella en dos días, te matará.

—¿Me matará?

—Esa mujer tiene un collar que le da mucho poder.

—¿Es más poderosa que tú?

—Si —respondió el rey, ya era momento de decirle el resto de la historia. —Jimin, esa mujer asesinó a tu madre, la asesinó porque yo no estuve dispuesto a revolcarme con ella.

—¡Mató a mi madre y aun así quisiste uniera mi vida a ella! ¡Ni siquiera sé porque me sorprendo, sé que siempre me has odiado por no llevar tu sangre!

—Eso no es así, y ahora no estoy para sentimentalismo, tenemos que encontrar una manera para que esa mujer deje de fastidiar.

—¡Me da igual lo que suceda, si quiere matarme que lo haga!

—¡No digas estupideces, si quieres ódiame después de acabar con esa mujer, ahora compórtate como el príncipe que eres!

—¡Yo no soy príncipe de nada!

—¡Yo te crie y te reconocí como mi hijo, eres el príncipe y nada cambiará aquello!

—¡¿Y que se supone que hay que hacer?! ¡Dos días no son nada!

—Lo estuve pensando mucho, y lo mejor es que hagas tuya a Tiffany, ella debe ser tu mujer.

—¿Qué tiene que ver Tiffany en esto?

—Si tienes a una mujer, Sunny no te hará nada, así que te entregaré a Tiffany.

Su corazón en ese momento estaba repleto de angustia y tristeza, hace tan solo unas horas Tiffany se había entregado a él, y creía que siempre sería suya, pero la vida de su hijo estaba de por medio, y pese a que esa mujer lo tenía comiendo de su mano prácticamente, no podía dejar de pensar en Jimin. Renunciaría a esa mujer para que su hijo siguiera con vida.

—Ve a buscarla, está en mi habitación —dijo el rey sin expresión en su rostro.

—Me la ibas a entregar y sabes que ella no quiso, se aferró a ti.

—¡La opinión de ella no cuenta en este momento!

Jimin dejó solo a su padre y subió las escaleras hasta llegar a la habitación principal, al abrir la puerta, Tiffany lo miró sorprendida, no entendía que hacia Jimin ahí.

—Ven conmigo.

—Jimin, ahórrate los problemas, Donghae puede aparecer en cualquier momento y se puede molestar.

—Ya está molesto, lo único que quiere es matarte por haberle mentido.

—Yo nunca le he mentido.

—¿No? ¿Y qué hay de Jennie? —Preguntó. —El rey no quiere saber de ti en este instante, así que me encargaré de llevarte a tu mundo junto a tu hermana.