Los centurión

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Un día antes de partir a una nueva misión nos reunimos en el comando principal para planificar cada movimiento que haríamos, ya que en esa ocasión intentaríamos apoderarnos de un pueblo muy importante.

Nos encontrábamos reunidos alrededor de la enorme meza, la cual tenía un holograma del lugar que invadiríamos. Como ya era normal me encontraba al lado del comandante Lewis, también estaba la comandante Emilia, Damián y todo el escuadrón. A mi parecer no faltaba nadie, sin embargo, la reunión aun no daba comienzo ya que esperábamos a alguien más.

Me llevé una gran sorpresa cuando la puerta del comando se abrió y vi entrar a la persona que estábamos esperando. Era la comandante Amelia Jacke.

-Disculpe el retraso señor – dijo la comandante Amelia.

- No se preocupe comandante, lo importante es que ahora estamos todos, por lo que podemos dar inicio a esta reunión – dijo el comandante Lewis.

La comandante Emilia comenzó a manipular el holograma y ahora era capaz de ver con mayor detalle el pueblo. No era muy grande, estaba rodeado por una montaña la cual y debido a la minería se encontraba cortada a la mitad por lo que daba la impresión de ser un acantilado. Frente al pueblo se apreciaba lo más impresionante, el bosque más grande que hay en nuestro planeta, es tan grande que abarca una parte de tres países, está ubicado entre tres fronteras; Gladius, al Oeste; Phalera, al este; y por último Cassis, un pequeño país al norte.

-Este pueblo es nuestro siguiente objetivo – dijo el comandante Lewis -. Planeamos establecer una base en esa zona.

- ¿Qué tiene de especial ese lugar? – pregunte intrigada, ya que para mí se veía como un pueblo común y corriente.

- Muy buena pregunta señorita Brown, dejare que la comandante Emilia se lo demuestre.

La comandante comenzó a compactar el pueblo hasta que solo pudimos ver el mapa de los países.

-Ese pueblo se encuentra en una perfecta ubicación geográfica – dijo la comandante Emilia señalando el lugar -. Solo hay dos formas de entrar, la primera es a través de un camino que cruza la montaña y la segunda es por el bosque, sin embargo, sería imposible debido a que es tan grande que te perderías sin dudarlo, por lo tanto, nadie podrá atacarnos por sorpresa.

-Además de que desde ese lugar podemos proteger a Gladius de Phalera – continuo el comandante Lewis -. Y no solo eso, también mantendremos a Cassis vigilado, en un futuro podría representar alguna clase de amenaza para nosotros, lo cual no nos podemos permitir.

El país de Cassis en comparación a Gladius o Phalera era mucho más pequeño además de misteriosos. Pocas cosas se saben sobre Cassis, sin embargo, no representaba amenaza alguna para ninguna de las dos potencias más grandes del mundo.

-Mañana al amanecer partirán hacia el pueblo – dijo la comandante Emilia.

- ¿Mañana? – pregunte.

- Así es, debemos aprovechar ahora que ÉL se encuentra tan lejos que no podrá llegar a tiempo para defender ese territorio – el mapa desapareció y en su lugar un vídeo comenzó a reproducirse, era ÉL, luchando contra nuestros soldados -. Ahora mismos se encuentra al sur, muy cerca de la costa por lo que tardaría días en llegar a esa zona.

- La misión no suena de alto riesgo, ¿Por qué nos mandaran a nosotros? – pregunto Damián.

- Muy cerca de ese lugar se encuentran unos escuadrones, los cuales según los rumores son unos de los más letales que tiene Phalera – dijo la comandante Emilia.

- Por esa razón tendrán que ir ustedes, además de que se quedaran por unos días en el pueblo ya que intentaran recuperarlo a toda costa y ÉL tarde o temprano llegara – dijo el comandante Lewis -. Pero no se preocupen, no estarán solos, la comandante Amelia y su equipo irán con ustedes.