-Hemos terminado por hoy, Noor, aprendes muy rápido- me dio unos golpes suaves en la espalda- Por cierto, ayer compré un tinte que creo que le quedará perfecto a Zoel...- comentó, con una sonrisa perversa, mientras bebía agua.
(...)
-Hace unos días, llegaron los refuerzos del consejo. Ganamos gracias a eso. además, también le impusieron sanciones a Yolu, pero aún así, afirmó abiertamente que volvería otra vez- escuché- Además, el consejo nos presto materiales para arreglar los desperfectos, aunque esta vez son pocos.
»No podemos depender tanto del consejo, necesitamos una estrategia, por eso os he reunido aquí, necesitamos ideas eficazes- afirmó.
»¿Podemos entrar a más soldados? Hay gente en la lista de espera, no obligamos a nadie y ganamos fuerza.- propuso alguien-O incluso podemos añadir más tropas con los soldados de último período- continuó.
-No. Nos sirven más, 50 soldados bien instruidos que 100 mal instruidos- comentó- ¿Y Noor? Ese poder tan extraño nos puede ayudar- comentó otra persona- Deja que la entrene, deja de ser tan sobreprotector, Zoel- le regañó.
»Admitelo, te perdiste 5 años de su vida, Noor ya no necesita de nadie, desde que te escapaste de ese lugar, la he visto desenvolverse en situaciones muy complicadas, no sabemos que le pasó, ni que mierda le hicieron, pero no ha parado de demostrar que es más que válida para luchar en el campo de batalla.
»Aunque, no sólo ese poder es valioso, creo que si le das una oportunidad podría llegar a ser una capitana increíble, o incluso, si a mí me llegará a pasar algo, podría ocupar mi lugar como oficial.
-¡No digas eso! A nadie le pasará nada, me lo pensaré, aunque ya te voy adelantando que no, aún me arrepiento de ponerte en ese puesto- finalizó- por el momento, haremos jornadas intensivas y reforzaremos edificios, lo dicho; necesitamos demostrarles que podemos defendernos solos.
Bufé. Menos mal que H cumplió su promesa y me está entrenando, aún no se lo he comentado a Zoel, pero si lo hago será cuando H haya terminado, conocioendolo no me permitirá pelear, como dijo H, Zoel es muy sobreprotector.
No se cuanto tiempo se la pasaron hablando, no me molestaba que hablaran de mi sin estar yo presente, lo que si que me molesta es que H tarde tanto, me dijo que solamente estaría unos minutos, menos mal que no me necesitan.
Finalmente, H salió, no comentó nada sobre la charla así que yo tampoco comenté nada. Juntos, caminamos hasta llegar al aseo, H entró con el tinte y yo me quedé vigilando fuera, para que nadie entrara ni nos viera, sé que puede quedar extraño, pero se disimular muy bien.
-¿Noor?- Zoel apareció en mi vista- ¿Que te trae por aquí?- pregunto.
-Te estaba buscando- mentí- Os escuché a H y a ti hablar, y...-me quedé pensando, no se me ocurría nada.
-¿Y...?- me animo a continuar.
-y... Creo que tengo derecho a dar mi opinión, ¿No crees? Al fin y al cabo, tengo 18, soy una persona adulta- presumí.
-¿Persona adulta? Tendrás 18 pero tienes el espíritu de un adolescente de 13- sentenció y en cierto modo, tenía razón- Noor, puedes dar tu opinión, pero ahora que estás aquí, si puedo evitar que pelees no dudes que lo haré.
»No es que no confíe en ti, es más confío, pero no quiero perderte, no otra vez, así que no insistas- sentenció, bufé enfada, no es justo. Me lanzó una última mirada que me transmitia: 'No hagas estupideces, Noor' luego, se fue.
Tal como salió de mi visión, pegué unos golpes en la puerta y H salió del aseo, traía una sonrisa de oreja a oreja.
-¿Y bien? Lo has logrado- asintió.
-Sí, y sin derramar una gota de tinte- presumió, si yo tengo espíritu de una adolescente de 13 años, él tiene su espíritu de un niño de 5 años-no se dará cuenta del cambio- afirmó.
-Eres el oficial del ejército y tienes ese carácter, a partir de ahora, te diré "Sí, oficialito"- me burlé.
-Calla, solo soy así porque eres mi hermana, pero recuerda, cuando te enseño a pelear, me convierto en tu superior; te lo dije- se defendió.- créeme, ninguno de los soldados saben de esta faceta mía ¡Perdería todo el respeto!- afirmó.
-El mío, oficialmente, lo has perdido- afirmé, para mi misma, pero H me oyó.
-¡Te he oído! ¡Ya verás el próximo día de entrenamiento!- rodé los ojos y no hice caso de su amenaza, no me da miedo.
-Lo que tú digas, pero ahora hay que esperar hasta que caiga ¿Estás seguro de que va a caer?- pregunté seriamente.
-No dudes de las habilidades, de tus superiores, Enana mal educada- contesto, por favor.
-Sere mal educada pero al menos...- de repente un recuerdo fugaz cruzó por mi mente- no me peleé por una manzana podrida- solté mientras empezaba a caminar hacia el salón, H cambio su cara, de diversión a sería.
-¿Cómo...? ¿Cómo te has acordado de eso?- preguntó- Noor, para- le ignoré- ¡Noor, que pares!- paré cuando puso una mano en mi hombro haciendo presión-¿Cómo te has acordado?- volvió a preguntar.
-¿De que hablas?- pregunté.
-Noor, acabas de recordar algo que vivimos hace tiempo, en aquél sitio- intente hacer memoria, pero no quedaba nada.
La perdida de memoria, cada avez está siendo peor, ya no recuerdo gran cosa, realmente, estoy pensando en pedir ayuda, porque si esto sige así... No quiero ni imaginar lo que podía llegar a olvidar.
-No se de que me hablas, H- dije sinceramente- Y no te estoy vacilando- H me miraba raro, pero termino accediendo.
-Sí te ocurre alguna cosa ¿Nos lo contarías verdad?- asentí poco a poco -Vamos- dijo no muy seguro. Aún así empezamos a caminar hacia el salón.
Mientras esperamos a que Zoel caiga en la trampa, nos pusimos a ver un programa absurdo.
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La Maldición Del Hipogrifo.
FantasyA los que muchos creen, los Hipogrifos son animales mitad grifo, (mitad cuerpo de León y mitad cierto de águila) y mitad cuerpo caballo. Os lo describo mejor, pico afilado, patas traseras y cola de caballo. Así es cómo se puede describir a una raza...