UN MUNDO DORADO | KAISOO |

41

Fantasma

——Kyunggie, despierta

Kyungsoo arruga su rostro y hace una pequeña protesta quejosa. Sus extremidades son pesadas y la manta está caliente. Él trata de darse la vuelta, la fuerte atracción del sueño lo atrae de nuevo.

—Kyungsoo tienes que levantarte ahora—

Es solo cuando escucha la voz de pánico de su madre lo que hace que se abran los ojos de kyungsoo. Él toma una respiración fuerte. Se sienta y aprieta los ojos contra la luz cegadora cuando su madre enciende la lámpara. Se pregunta porque llegó la mañana tan rápido.

La cálida mano de su madre le da dos palmaditas urgentes en el hombro y ella coloca su mochila en su regazo—¿Recuerdas cuando fuimos a Disney?

Kyungsoo se ilumina y sus ojos se abren correctamente—¡Sí!

——¿Recuerdas lo que te ayude a poner en tu mochila? —Le pregunta su madre, aportándole el flequillo de la frente.

Kyungsoo asiente y sonríe ampliamente, la excitación aumenta en su ser—Cinco pares de calcetines, cinco de ropa interior, dos pantalones, dos camisas. Solo un juguete así que tengo que estar muy seguro cual es el que quiero— él la mira seriamente—Porque no vamos a regresar
pronto—

Su madre suspira aliviada y se inclina hacia adelante para darle un rápido beso en la mejilla—Eres tan inteligente—Él sonríe por su elogio.
——Lo vas a hacer de nuevo, ¿está bien? Eres un niño grande ahora, puedes empacar tu propia mochila—

Kyungsoo sale corriendo de su cama, agarrando su mochila con fuerza en sus manos—¿Vamos a ir a Disney, mamá?

Su madre se muerde el labio y niega—No cariño. No será ahí. Sé rápido, ¿de acuerdo? Necesito ir por tu hermano—

Kyungsoo señala con los dedos de sus pies, descendiendo por un lado de su cama hasta que su pie hace contacto con la suave alfombra—¿A dónde vamos mamá? —pregunta, colocando su mochila en el suelo.

Su madre no responde, saliendo de su habitación apresuradamente. Kyungsoo parpadea, finalmente se dirige a hacer la tarea que tiene entre manos.

Oye el gemido de minseok, fuerte y angustiado al ser despertado. Kyungsoo frunce el ceño y arruga la nariz ante el desagradable y penetrante ruido. Él puede escuchar a su madre emitir sonidos suaves y sofocantes para trata de calmar a minseok, pero no funciona.

Kyungsoo corre hacia sus cajas de juguetes y busca a Kiki. Él sonríe cuando se encuentra con el conejito, orejas grandes caídas sobre rostro y un cuerpo que hace tiempo que perdió su forma. Es su juguete de hace mucho tiempo, incluso antes de que pueda recordarlo, pero minseok ama a esa pelusa incluso más que él.

——Shh, está bien minnie, shh—— dice en voz baja.

Minseok sigue llorando, sus pequeñas manos se aferran a su camisa y su cabello, las lágrimas mojaron sus mejillas, sus labios se curvan en señal de angustia.

Kyungsoo corre hacia él, agitando el conejito en su mano, tratando de llamar la atención de minseok.

——¡Mira es Kiki! — dice, levantando una mano para acariciar suavemente el pie colgante de minseok.

Minseok tiene hipo y se detiene momentáneamente, su rostro todavía se contorsiona como si volviera a gritar en cualquier momento. Pero sus grandes ojos llenos de lágrimas se posan en el conejito. Él deja escapar un gemido más tranquilo y tiende una mano hacia el conejito—Kiki— dice minseok.