La Canción De Medianoche

Capítulo 46

Los días pasan y siento que con Amely vivimos en una burbuja rosa con flores y muchisimo amor. Con ella todo es tan simple y a la vez mágico, comer, ir juntas a la universidad, salir, hacer compras, dormir, es decir básicamente todo lo cotidiano, no tiene nada de monótono ni mucho menos cotidiano. Todos los días hay algo nuevo, siempre descubro, descubre o nos descubrimos algo diferente.
Como la semana pasada, en el súper que descubrimos que nos gustan los mismos caramelos.

Estos no vienen hace mucho.

Es cierto.

Me encantaban. Dijimos al tiempo que agarrabamos unos cuantos paquetes y los poniamos en el carrito.

Hay un torneo de ajedrez. Le comento llegando a casa después de la universidad

¿Sabes jugar?

Si, ¿tu no?.

No. Me sorprende que sepas.

¿No me crees inteligente? La molesto

No es eso, pero no pareces de las personas a las que les gusta ese tipo de juegos. - aclara entrando a la cocina seguida por mi.

Ya veo. A mi me sorprende que tu no sepas. Con todo lo que sabes.

Vos me tenes muy arriba y soy una simple mortal.

Nop, sos una diosa. Una diosa sabelotodo por eso me sorprende.-afirmo sentandome en la encimera.

Tampoco tan así, hay cosas que se me escapan, cosas que no se. Pero... hay cosas que si se. Me guiña el ojo.

¿Cosas como que?.

Por ejemplo, esto. Dice y estampa su boca contra la mía con esa forma violenta y suave a partes iguales que tiene a veces de robarme besos.

Me gusta que esas cosas si las sepas. Le susurro cuando nos separamos por falta de aire.

Tuve ganas de besarte todo el día.

¿En clases también?

Sobre todo en clases cuando pintas, te paras frente al lienzo en blanco, lo observas y luego haces gestos muchos gestos y cuando eso pasa yo sonrío y pienso que no hay nadie tan especial, tan espectacular, tan linda como vos y quiero besarte y abrazarte, aunque siempre quiero.

La miro y le sonrio con los ojos llenos de lágrimas. A veces me emociona que me quiera tanto.

Ay mi amor dice abrazandome.

Perdón es que.. te amo.

Yo a vos, mucho, muchisimo, demasiado.
Me abraza más fuerte y yo le correspondo

Entonces me decias que hay cosas que si sabes, pero me olvide cuales.

¿Te olvidaste?

Aja. ¿Me las recordarias?

Claro- responde para luego besarme ansiosamente. Se detiene y besa mi mejilla hasta llegar a mi oído. -También se otras cosas. ¿Queres que te muestre?- susurra.

Por favor- le pido y comieza a besarme el cuello mientras me acaricia la espalda por debajo de la camisa.
Vuelve a mi boca mientras se deshace de mi camisa y mi sosten, juega con mis pechos sin dejar de besarme. Me levanta de la encimera y me lleva hasta la habitación, cuando ya estamos al pie de la cama, termina de sacarme la ropa y yo me deshago de su ropa para caer sobre las sábanas.

Que diosaaa. Por favor- hablo en voz alta.

¿Tu? Efectivamente. Dice para luego besarme.