Hace unas semanas abrimos la galería y ya llevamos varias obras vendidas. Ahora estamos en casa en la habitación que usamos para trabajar.
-Recuerda que tienes que hacer un cuadro del mismo que vendiste ayer.
-¿Para cuando
-Les dijiste que estaría para mañana.
-¿Qué yo hice que?
-Eso mismo que escuchaste.
-Mierda. ¿Y lo querían del mismo tamaño que el otro?
-Si.
-¿Y ahora qué haré? Estuve tres días para terminar el otro-Murmuro cosas inentendibles mientras camino en círculos.
-¿Vos no eras la calmada de la relación?- bromea
-Lo era hasta hace cinco minutos.
-Ya sabes que hacer así que no te tomará mucho tiempo.
-Es cierto, pero no lo tendré para mañana.
-Tranquila, le diremos que pasó algo y no podes entregarlo mañana.
Bufo a modo de respuesta.
-¿Querés que te deje sola?
-No. ¿Vos estas por hacer algo?
-Tengo que hacer algunas esculturas. Pero puedo hacerlas más tarde.
-No. Quédate.
-¿Música?
-Por favor.
-¿Qué querés escuchar?
-Mmm, Vanesa Martín.
-Me parece bien.
Pone música en su celular y comienza su trabajo. Yo me quedo observandola y empiezo a pintar absorta en sus movimientos.
-¿Me pasas el rojo? Por favor.
-¿El rojo?- pregunta arqueando una ceja.
-Aja.
Se levanta, busca la pintura y se acerca a darmela. -¿Por qué me estas pintando a mi?
-¿Que?
-Que me estas pintando.
La miro, miro el lienzo y si, efectivamente estaba pintandola a ella.
-No me di cuenta , sólo estaba mirándote y empecé a pintar.-Esta bonito.
-Porque vos sos bonita.
-Además de eso, sos una muy buena artista.
-Aprendí y aprendo de la mejor. Ahora volve a tu lugar que debo pintar mi suéter.
-¿tu suéter?
-Es mío, vos me lo sacaste- río
-Es que me queda bien-
-Si, el rojo te sienta bien.
Le doy un corto beso y vuelve a hacer lo que estaba haciendo mientras yo me dedico a terminar la pintura.
-¿Ya puedo levantarme?
-Cinco minutos más y termino.
-Ahora podes levantarte- anuncio unos minutos más tarde.
Camina hasta donde estoy y me abraza apoyando su barbilla sobre mi hombro
-¿Y? ¿Te gusta?-
- Es precioso, me encanta.
-Lo pondré en la sala.
-Queda mucho espacio- observa
-¿Y eso que?- cuestiono.
-Nada, ponete a pintar lo que tenes que hacer.
-Eso haré, si me das permiso.
- Usa el otro atril, yo arreglare esta pintura.
-¿No era que te encantaba?
-Si, me encanta.
-¿Entonces?
-Nada, sólo ponete a pintar.
-Ya voy- Preparo las cosas y ahora si me pongo a hacer la pintura que me pidieron.
-¿No me estas pintando de nuevo a mi, verdad?
-No, ahora voy por el camino correcto- río
-Eso me gusta.
- ...Puedo adentrarte de lleno en mi vida, acariciarte y quedarme dormida sentirme dueña del mundo en tus brazos....- canta.
¿Todo tiene que hacer bien? Pregunto para mis adentros mientras la miro.
-Terminee- grito transcurrida alrededor de una hora y media.
-Yo también.
-¿Recién? ¿Acaso la hiciste de nuevo?
-Veni a ver.
Me acerco a ver..
-¿Y? ¿Qué opinas?- quiere saber.
-Me encanta, en serio.
-Quedaba mucho espacio y me dio ganas de hacerlo.
- Es perfecto, me gusta muchísimo.
-Ahora si vamos a ponerlo en la sala.
No arreglo mi pintura, sino que me pinto a mi a su lado haciendo lo que amamos.
-
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La Canción De Medianoche
RomanceAmely una profesora de Historia del Arte y Elena una estudiante de periodismo se conocen de casualidad en el estacionamiento de la universidad luego el destino las cruza por los pasillos de está y de a poco los sentimientos aparecen, una noche de lu...