19

1.9K 145 126
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Peter Parker había dormido toda la tarde, intentando sentirse mejor para finalmente llegar a casa

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Peter Parker había dormido toda la tarde, intentando sentirse mejor para finalmente llegar a casa. Por suerte, logró recuperarse más rápido de lo que esperaba y durante el camino de regreso escuchó atentamente todo lo que Miguel O'Hara le decía acerca de la fiesta.

—Ya lograron contarme todo lo que pasó ayer, quizás así aclares tus dudas. —Comenzó Miguel con voz fría, haciendo que Peter solo asintiera con su cabeza débilmente.

—Te escucho. — Habló en voz baja.

—En efecto estuviste tomando mucho, hicieron juegos y mucha conversación —comenzó Miguel. —Claudia te pidió acompañarla por unas cosas después de un tiempo, en el piso de arriba fue donde te besó.

Peter sintió su corazón acelerarse nuevamente y sus mejillas enrojecer. No quería emocionarse, pero saber que se besó con la chica que más amaba y odiaba en este mundo le hacía sentirse extraño. Una mezcla de emociones que lo confundía y a la vez le agradaba, era extraño y enfermo, pero le gustaba.

—No tengo muchos detalles, pero fue un buen beso por lo visto —Miguel mantuvo la vista al frente. —Pero estabas muy ebrio, resbalaste por la escalera y vaya golpiza que te diste.

—Mierda, ¿en serio? —Peter abrió mucho sus ojos.

—Estabas mareado, cayéndote y azotándote contra todo. Una chica trató de aprovecharse de ti pero no la dejaron, no supimos exactamente quién fue —Miguel relamió sus labios. —Claudia te encontró en el patio y te llevó a la habitación a que durmieras un poco ya que Laura no contestaba su teléfono. Era muy de madrugada.

—Eso explica muchas cosas... —susurró Peter. —P-pero la chica no logró hacerme nada ¿verdad?

—Solo fueron jalones y tirones, no llegó más lejos. Quizás aquello explique el dolor de tu cuerpo, pero no te preocupes, no fuiste violado.

—Gracias...realmente comenzaba a preocuparme.

Miguel se mantuvo en silencio aún más frío que el anterior. Se mordió la lengua para no decir nada más y dejar las cosas como estaban. No iba a arriesgarse a decir algo de lo que se arrepentiría, aunque eso no pasaría, pero era mejor dejar las cosas como estaban en lugar de seguir dándole vueltas. No más preguntas, que Peter se quedara con esa versión y punto.

𝐈𝐍𝐍𝐎𝐂𝐄𝐍𝐓 || 𝐌𝐢𝐠𝐮𝐞𝐥 𝐎'𝐡𝐚𝐫𝐚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora