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Decir que Peter Parker no estaba hecho un tremendo manojo de nervios, sería la mentira más grande que se ha dicho en todo el libro

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Decir que Peter Parker no estaba hecho un tremendo manojo de nervios, sería la mentira más grande que se ha dicho en todo el libro. Qué va, las piernas le temblaban con cada paso que daba en dirección a la casa y casi podía sentir el vómito en su boca. Sus entrañas se removían de forma desagradable debido a los nervios y su garganta se hallaba completamente seca al igual que sus labios.

Se relamió ajustándose la corbata que llevaba para relajarse un poco y lentamente se acercó al patio. Habían muchas personas afuera con vasos rojos y gritando, besándose o bailando. Unos carcajeaban, otros fumaban y unos estaban haciendo quién sabe qué. Pero eso no era lo que le preocupaba a Peter en realidad él había ido a esa fiesta y se sentía terriblemente ansioso. No quería tener una mala noche, no quería, así que suplicó que fuera una buena noche.

Antes de entrar por la parte de atrás, revisó su teléfono para ver si Laura ya había contestado los miles de mensajes que le había mandado. Su mejor amiga quizás se hallaba ocupada ya que no había dado señales de vida desde la mañana, pero Perer decidió no presionar más. Le mandó unos últimos mensajes y finalmente se introdujo en la bola de gente.

"Venga ya relájate"

Pasó detrás de muchos chicos y chicas que bailaban y tomaban quizás demasiado, pero Peter no se enfocó en aquello, realmente estaba desesperado por encontrar un rostro conocido con el cual colarse en lo que encajaba. Quizás tuvo más suerte de la que pensó.

—¿Peter? —llamaron casi en un grito.

El castaño se dio la vuelta para encontrarse cara a cara con Alex quien estaba bastante sonriente con Miranda a su lado. Peter sintió cierto alivio e hizo una pequeña sonrisa amistosa mientras se acercaba a ellos.

—¡Qué milagro verte por acá! —Irene esbozó una sonrisa. — No creíamos que fueras a venir.

—Pues aquí ando —Peter se acercó más a ellos.

—No debiste venir tan formal, dios Peter —Vanesa río al verlo con un traje.

—Te queda bien, pero es una fiesta, no una gala.

𝐈𝐍𝐍𝐎𝐂𝐄𝐍𝐓 || 𝐌𝐢𝐠𝐮𝐞𝐥 𝐎'𝐡𝐚𝐫𝐚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora