SIN EDITAR.
PRIMERO: Quiero recomendarles el libro de una niña muy especial, ella es mi lectora desde casi los comienzos y lleva un tiempo haciendo su propio libro, estaría en verdad feliz de que pudieran apoyarla la historia está muy buena y por supuesto, es de poliamor.
Sigue creando tu propio mundo niña, te felicito por lograr tus metas y te agradezco por sumar a los dos que te pedí 😆
SEGUNDO: Francia.
TERCERO: Disfruten este cap, el que sigue tiene una sorpresita.
Foto arriba.
Una semana después...
👅<<{August}>>👅
No sé si estoy tomando la decisión correcta al tomar esta opción, pero es la única que en verdad quería elegir, dejando de lado el dinero que no tengo y lo mal que me siento conmigo mismo por no poder proporcionarle a mi hijo lo mejor.
Acepté.
No iba a hacerlo, pero guiándome por lo poco que conozco a Alina se que ella no me iba a dejar librarme fácilmente de este viaje, sé que ella dijo que era mi elección y que no me iba a obligar.
Pero fue una total mentira, ella encontraría una salida para guiarme hacia el viaje sin que sepa que fue ella, "casualidad" diría "destino" no son más que excusas para no decir que ella hizo que mi jefe me diera vacaciones pagas.
Renuncié, no acepte las "vacaciones pagas", siempre fue un jefe de mierda que trata mal a todos, paga mal, que no permitía ni tomar agua, así que renuncié, cuando volvamos me preocuparé de pedir empleo en la empresa de los padres de Alina cómo ella ofreció, debo dejar de pensar en mi orgullo y pensar en lo mejor para mi hijo.
Mika: Dale hombre, siempre llegas tarde a todos lados -me mira mal- ella no iba a despegar el avión hasta que ustedes estuvieran a bordo.
Enzo: Corre August, media hora tarde otra vez.
August: Perdón.
Christopher: Deja de disculparte, un Becker no lo hace, llegaste tarde bien, lo seguirás haciendo al que no le gusta que no te espere y listo.
Ruedo los ojos y subo luego de que uno de los hombres de los chicos se lleve nuestras maletas.
August: No soy un Becker.
Miro a mi primo sentado a un lado de Alina, su mirada escudriña intensamente mi rostro, mi cuerpo y al niño, es como si pudiera ver muchas cosas a la vez.
Alina: Ángel -Aaron se lleva a mi hijo con ellos y me siento frente a mi primo, es la primera vez que viajo en avión y no se muy bien qué esperar- intenta dormir, los niños están bien cuidados.
No puedo hacerlo, así que me limito a jugar al tetris en mi celular, paso el tiempo escuchando hablar a los chicos, viendo a los niños ver una película en un enorme iPod, sintiendo siempre la mirada de Alina en mi hasta el punto de sentirme desnudo y no sé si sentirme mal o bien con eso.
El avión aterrizó sin problemas salvo por el constante latido errático de mi corazón, hay cuatro camionetas escoltando una... ¿Una limusina?
August: ¿No te parece que es mucho una limusina?
Chiang: No entramos todos en las camionetas y para evitar discusiones que terminaran con Alina yéndose sola preferí traer la limusina.
Piers: Lo encuentro bastante razonable la verdad.
Mischa: Ella nunca se hubiera ido sola.
Alina: Ahí tienes razón, me hubiera ido con los niños.
Se mete en la limusina con una sonrisa ladeada que muestra perfectamente la gracia que le dió ver el ceño fruncido del ruso, para muchos una sonrisa ladeada no es nada, pero viniendo de la mujer que apenas habla o demuestra emociones es mucho, jodidamente mucho.
Todos nos metemos con ella, es enorme, las botellas de agua empiezan a pasarse de mano en mano hasta que todos tenemos, el alcohol también, pero niego, no quiero tomar hoy.
Máxime: ¿Por qué te ves tan feliz hoy?
Alina: Es un día especial.
No veo nada especial, pero no lo diré, en verdad hoy se ve radiante.
Mika: Te ves hermosa nena, pero no es tu ropa de siempre.
Enzo: ¿Dónde están tus botas y tu traje?
Alina: No podía usar eso hoy, necesitaba algo blanco.
Frunzo el ceño, ¿Para qué necesita blanco? No sé, pero se ve hermosa, lleva un traje de pantalones rectos y largos hasta el suelo, el saco lo tiene apoyado en sus hombros y tiene un top que deja al descubierto su vientre, su piel se ve tan hermosa y brillante con el contraste de la ropa blanca, incluso a unos asientos de distancia puedo notar su suavidad, me dan ganas de pasar mis nudillos por allí, pero siento que ella me vería como si estuviera loco.
¿Estoy loco? Posiblemente.
Bajamos de la limusina, ella primero, detalla toda la casa antes de darse la vuelta para vernos, ubica silenciosamente a los niños entre todos nosotros, para que ambos tengan dos hombres a cada lado, mi hijo toma mi mano y Piers toma la otra, ambos ayudamos al niño a subir las escaleras igual que Varek y Yasu lo hacen con Cassio, la puerta es abierta por los hombres luego de que Chiang de la orden, ambas puertas son enormes por lo que entran primero Alina, sus hermanos, el pelirrojo, Chiang y Mika, luego entramos nosotros con los niños.
Alina siempre va un paso por delante de todos, como si ella fuera nuestro escucho y no puedo evitar sentirme inútil por ello.
Cuando estamos todos dentro de la casa ella gira su cabeza en mi dirección, sus ojos expresan muchas cosas y suplican a gritos otras tantas.
Alina: Ángel, me gustas -su confesión me toma por sorpresa, primero por el lugar que eligió para hacerlo, segundo porque no puedo negar que ella también me gusta- ¿Aceptarías unirte?
Aquí en mis dramas el chico a veces dice que no porque piensa que no la merece, ¿pero qué pasaría si me salto todo el drama y digo que sí?
Tendré que averiguarlo.
August: Sí.
Alina: ¿Tu corazón?
Mischa: Me encantaría intentarlo.
Alina: Eso me alcanza por ahora.
Chiang: ¿Y yo?
Ella sonríe antes de volver su rostro neutral hacia adelante cuando un hombre se acerca.
Hombre: Señor.
Bendigo a los Doramas japoneses que vi por enseñarme lo suficiente para entender lo que dicen, apenas termine el instituto, no iba a poder entenderlos si esos adictivos dramas no me hubieran enseñado.
Chiang: Suban las maletas.
Los hombres se apresuran a llegar hacia ellas, pero antes de que puedan tomarlas una voz los frena.
...: Alto ahí.
Una mujer de aproximadamente la edad de Chiang, o eso creo, baja de las escaleras con un traje más cubierto que el de Alina, su color también difiere, el de la señora es negro, su cabello castaño se mese sobre sus hombros con gracia ante cada escalón que baja, se ve como la anciana mala y despectiva de mis kdramas.
Yasu: Madre.
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Alina. 5°
RomanceQuinto libro de la Saga Entre Familia (Independientes) 🥵Christopher🥵 Alina: ¡NO! Fue por ese desgarrador grito saliendo de la persona más fría de este mundo por lo que mis ojos dejaron de ver el lado bueno de todas las personas, la gran mayoría no...