Slytherin Queen - Regulus Black © ✔

|34| Capítulo

⁓ REUNIÓN INESPERADA EN HOGWARTS ⁓

Aparecemos en el gran comedor, enfrente mía, se encontraba Regulus.

Cuando nuestros ojos se abren, nos abrazamos.

— Lo hicimos, amor. — Le digo.
— Lo hicimos, preciosa. — Me contesta.

Una tos falsa nos saca de nuestra celebración de victoria. Volteamos para ver a Dumbledore, mientras McGonagall nos miraba con la boca abierta.

1 de septiembre de 1991:

— ¡Dumbledore! — Decimos ambos.
— Señor Black, señorita Pevensie... Esto... si que es una sorpresa. — Dice como con asombro.
— ¿Qué es la sorpresa? — Pregunta Regulus.

— Ustedes dos... Señor Black... Señores Black. — Se corrige. — Murieron... Hace 12 años.

 Se escucha un sonido de asombro.

— Ella es... La hermana de los fundadores. — Volteo a ver a una chica de cabello café rojizo.

Un niño peliblanco se nos acerca.

— ¿Regulus Arcturus Black? — Le pregunta.
— Sí... — Contesta no muy seguro.
— Malfoy, Draco Malfoy... Tu sobrino. Bueno, su sobrino... Supongo. — Dice el niño.

Regulus y yo nos miramos.

— Draco Malfoy... ¿Eres hijo de Lucius y Cissy? — Le preguntó.
— Así es, Narcissa Malfoy. — Dice orgulloso.
— Yo era amiga de tu madre en su juventud. — Le comentó al niño.
— Usted es muy joven. — Dice.
— Utilice una gema mágica pequeño Malfoy.

Mientras yo hablaba con Draco, Regulus solo lo miraba aturdido.

— ¿Qué fue de los demás? — Pregunto viendo a McGonagall.
— Creo que deberíamos ir a mi oficina. — Dice Dumbledore.
— Pues vamos. — Dice Regulus.
— Solo... Quiero saludar primero a mis hermanos. — Intervengo.

Saco mi varita y los invoco... Los cuatro y Aslan aparecen.

— Diana... — Dice feliz Godric.
— Lo lograste. — Dice Rowena.
— Te ves... De 18 años... — Dice viéndome Salazar.
— Esto es asombroso... — Veo a la misma niña de pelo rojizo. 
— Gracias... ¿Creo? — La niña se acerca.

— Hermione Granger. — Se presenta.
— Diana Pevensie-Black. — Me presento.
— Lo sé, leí todo de ti cuando vine a Hogwarts... Eres la misma melliza de Salazar. — Dice con asombro.

Su nombre me suena familiar... Draco... Hermione... 

Draco miró a Hermione asombrado.

— Lo sé... Y ella es mi novia. — Dice Regulus.
— Esposa, Regulus. — Lo corrijo. 
— Eso es aún mejor. — Responde mientras me mira.

Me mira con esos ojitos grises que me encantan, hasta el día de hoy, años después me mira como me miró cuando nos conocimos.

— Harry, nos acompañaras. — Un chico de lentes se levanta.
— Sí, señor. — Dice.

Draco, Hermione y Harry... Eso es... Son los niños de mi sueño.

Él era exactamente como James, cuando lo veo de cerca... Tiene los mismos ojos de Lily.

— Eres... ¿El hijo de James y Lily? — Pregunto viéndolo.
— Soy Harry Potter. — Me contesta.
— Ella.. ¿Como están? Éramos grandes amigas. — Le digo.
— Ellos...

— Diana. — Volteo a ver a quien me llama.
— Por mi mellizo... ¿Severus? — Preguntó.

— Amigo. — Lo saluda feliz Regulus, mientras se acerca. — ¿Qué hay de nuevo? Aparte de 12 años más.

Ambos se abrazan.

McGonagall se acerca a mi.

— Lily y James están muertos. — Me susurra al oído. 
— ¿Qué? ¿Hace cuánto? ¿Como? — Le pregunto.
— Era un bebé. — Me dice McGonagall.
— ¿Con quién vive? 

— Diana... Creo que tenemos que ir con Dumbledore. — Me dice Reg.

 — ¿Porque siendo la Reina de Slytherin te llevas tan bien con todos? — Pregunta Hermione.
— ¿Todavía hay ideales de sangre? — Hermione asiente. — Agradece estar muerto Salazar.

Digo viendo a su fantasma.

Salimos, los dos maestros, Severus, Draco, Harry, Hermione, Regulus y yo.

— ¿Porque la sangre sucia está aquí? — Pregunta con disgusto Draco.

— Está es mi escuela, Draco... Y yo no tengo las creencias de Salazar, la sangre de todos los magos o brujas es del mismo color. — Le digo.

Llegamos a la oficina y Hermione me abraza.

— Gracias por defenderme de Malfoy, es un matón. — Agradece.
— No hay de que... Dejame adivinar ¿Hija de muggles? — Le preguntó.
— Sí. — Dice y yo le sonrío.

—  Niños salgan, por favor. — Dice McGonagall y los tres asienten.

Cuando los tres niños ya habían salido, Severus crea un hechizo para silenciar la oficina.

— ¿Qué fue lo que pasó? — Pregunta Regulus.
— Tras su muerte... Todos quedaron impactados, pero la vida continua... Pero no para tus padres Regulus. — Miro a Regulus. — Tu padre murió el mismo año por depresión y tu madre seis después, por lo mismo.

Abrazo a Regulus.

— Lo siento mucho, amor. — Le digo aún abrazandolo.
— ¿Qué hay de Sirius? — Pregunta, mientras me devuelve el abrazo.
—  En Azkaban por contribuir al asesinato de los Potter. — Informa McGonagall.

Me separo de Regulus.

— Sirius nunca haría eso... James era su mejor amigo. — Digo.
— ¿Cómo murieron? — Pregunta Regulus. 

— Thomas...  Sirius reveló su paradero y los mato, primero a James, en un intento de que Lily y Harry se salvarán, luego fue tras Lily, quién con su sacrificio, salvó a Harry. — Informa Dumbledore.

— Chicos... ¿Qué fue lo que les pasó? — Preguntó McGonagall.
— Solo... Viajamos en el tiempo por accidente, visitamos un lago y mi collar se activó mientras nos besabamos... — Explico.

Severus crea un hechizo para secarnos, pues por obvias razones estábamos empapados.

 — Gracias amigo. — Le agradece Regulus.

— ¿Con quién está Harry? — Les preguntó.
— Con su tía materna. — Dice Dumbledore. 
— Pero... Petunia odiaba a Lily por ser una bruja... Debe de estar haciendo de su vida un infierno. — Digo sabiendo que Harry está mal.

— Establezcámonos y luego vemos que hacer por el hijo de la pelirroja y el cuatro ojos. — Dice Regulus. 

Unos golpes a la puerta nos llaman la atención. La abren Lucius y Narcissa.

— ¡Di! — Se apresura a llegar hacia mi.
— ¡Cissy! — Me levanto y nos abrazamos.

Regulus y Lucius hacen lo mismo.

— Primo. — Cissy abraza a Regulus.
— Hola Cissy.— Le corresponde el abrazo.

Lucius se acerca a mí.

— Señora Black. — Me saluda.
— Señor Malfoy. — Lo saludo y le sonrió. 

— Ven aquí. — Me abraza.
— Hola Lu... — Le digo.
— Creímos que habían muerto. — Me dice. 

En ese momento me dí cuenta de que el hogar no es un lugar... Si no donde están las personas que te quieren y a las que quieres.