XLVII. Los Pioneros del Mañana

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18 de febrero; 2003. Franja de Gaza, Palestina. 13:03 hrs.

La Franja de Gaza, un sitio de conflicto religioso entre los pueblos de Israel y Palestina, el primero siendo conformado en su mayoría por judíos, mientras que Palestina lleva la cabeza del conflicto por parte de alt kuli shay', aunque considerada como terrorista, ellos defienden el islam como religión, luchando por el control de la Franja de Gaza y la toma de Israel, en especial, una cierta mezquita.

En aquel conflicto, un hombre llega en barco, acompañado por sus guardaespaldas, una mujer de baja estatura y cabello largo, lacio y negro, con una máscara de cara feliz en su rostro y vestimentas militares en color negro; su acompañante porta una botarga de conejo color rosa, se nota descuidada y algo sucia, pues unas pequeñas manchas de sangre en las manos de tela del conejo delatan que no es precisamente una atracción para los niños.

—Tranquilo, Sharuh —calmó un hombre de traje morado y sombrero de ala ancha, observando como se veía las manos tratando de quitar la sangre—, pronto serás una estrella para los niños, un ejemplo a seguir, un pastor que guiará a los niños ante Alá, y ante mí, su futura reencarnación.

18 de febrero; 2003. Franja de Gaza, Palestina. 16:34 hrs.

Los tres sujetos se dirigieron hasta un edificio modesto, en la entrada, un hombre con ropas militares y un pasamontaña a cuadros rojos y blancos tapaba la entrada, apuntando un rifle semiautomático que tenía en sus manos hacia el americano que se acercaba.

—توقف هناك، من هم؟! —advirtió el hombre del pasamontaña.

—¿Qué dijo, Sharuh? —preguntó el hombre de traje morado, sin entender nada de lo que decían, pues no hablaba árabe.

Sharuh no respondió, tan solo se acercó al hombre del pasamontaña y le susurró algo al oído.

— أنا آسف، هل يمكنك الدخول من فضلك —musitó el guardia, abriéndoles paso a los tres.

—Señor..., ¿qué fue lo que pasó? —cuestionó la chica de la máscara.

—Sharuh es un elemento demasiado importante. es un hombre de pocas palabras, como has podido ver estos cinco años, pero aquí en Palestina, Sharuh es un símbolo de libertad, una señal de que Alá está presente y los apoya en su camino para lograr tener control total en la Franja de Gaza, y, sobre todo, la mezquita de Al-Aqsa, el lugar religioso más importante de todo Israel, y venimos aquí a hacer un acuerdo.

Entrando en el edificio, una cantidad de unas pocas personas que venían de aquí para allá, sumidos en sus necesidades, voltearon a ver al hombre de morado que entraba sin ningún problema al lugar, sin embargo, el ver al símbolo de la libertad hizo que todos siguieran en lo suyo.

Sharuh era el salvador de todos los ciervos de Alá.

Abrieron una de las puertas de cristal, dentro se hallaba un hombre, el cuál también hablaba árabe, haciendo que Sharuh fuera traductor:

—El productor —susurró Sharuh al oído del hombre de morado, traduciendo lo que decía—, dice que le dará luz verde al programa, pero solo si en los primeros días logras hacer que los niños se unan a la causa de alt kuli shay'.

—Dile que, por supuesto que lo lograremos, incluso que tú serás la estrella del show, con esa oferta dudo mucho que se nieguen, además, que les ayudaremos a recuperar Al-Aqsa.

Sharuh susurró al oído del productor, mientras que este respondió con una voz de alegría tal, que incluso saltó del asiento, estrechando la mano del hombre de púrpura con fuerza, cerrando el trato.

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