Capitulo 16: Contra el Rey de los Embusteros

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-¡Comete esto!

Con los aumentos ya ejecutados, Akeno lanzaría una enorme ráfaga de disparos que Loki intentaría detener con una sola mano, lo que al principio consigue, pero después es obligado a retroceder por los ataques continuos.

[¡Boost, Boost, Boost, Boost, Boost, Boost, Boost, Boost, Boost, Boost!]

Akeno aumentaría de nuevo el poder de sus ráfagas, al igual que el número de ataques, donde ahora hasta habían cuchillas de poder, hasta que Loki no pudo seguir y todos los ataques lo impactaron nuevamente, creando una capa de humo de la cual vuelve a salir solo con unos pocos rasguños en su cuerpo que se curan al instante gracias a su magia.

-Realmente eres increíble, Himejima Akeno...*Loki limpiaría una línea de sangre en la comisura de su labio, lo cual lo hizo entrecerrar los ojos*. Superaste mis expectativas, aunque aún no es suficiente para vencerme... Aun así, mis respetos, por ser diferente a tus antecesores... Y no por tu herencia, sino por tu forma de ser...*Aclaro lo último.

-¿Eh? ¿Por qué lo dice?*La pregunta de Saji era la de algunos. Saben que Akeno y Vali son los usuarios más poderosos de los Dos Dragones Celestiales que hayan existido jamás, pero que hasta un Dios haya puesto en duda sus capacidades hasta que las probo de primera mano es...

-Lo que pasa mocosos, es que a diferencia de los anteriores, ellos dos han sido guiados de tal manera que ninguno ha caído presa del poder...*Odín tomaría la palabra*. Si bien son orgullosos en lo que son y su poder, no se ahogan en este... No como los otros... Cada Dragón Celestial cayó presa de su propio poder y unos murieron por confiados...

-Usuarios con el poder y talento que tienen Akeno y Vali no eran raros de ver, solo que por ese defecto de ahogarse en el poder y no ser guiados como se debe, los condeno...*Azazel se cruzaría de brazos*. Por eso, no importa la herencia o su talento, si creen ciegamente en este y no se esfuerzan para ser más fuertes, su único destino es la muerte... No por nada Ddraig y Albion empezaron como dos Dragones mortales cualquiera que a base de entrenamiento llegaron a donde estuvieron y más cuando se conocieron.

-Exactamente...*Tras asentir, Loki vería como el resto del grupo se ponían detrás de la Himejima*. Oye viejo, se ve que ya no eres lo que eras... Mira que tener a un Dragón Celestial, todo un sequito de demonios, dos ángeles, una valkiria y dos líderes de los caídos contigo... Un poco exagerado ¿No crees?

-Son solo para evitar lo que haría alguien como tú...*Dijo Odin encogiéndose de hombros sin importancia.

-Bien, si tú tienes refuerzos, entonces yo llamare a los míos...*Loki alzaría su mano y...*¡Ven aquí, Fenrir!

Apareciendo de una brecha que se abrió en el espacio, verían a un enorme lobo de pelaje gris ceniza de unos 10 metros de alto frente a ellos al lado del Dios del Engaño.

-¿Q-Que es eso...?*Saji sintió una presión irreal al ver a esa cosa.

-Mi otra mitad, por nada del mundo dejes que te muerda...*Vritra le advertiría con seriedad*. Estamos ahora frente a uno de los seres del Top 10 Mundial...*Sus palabras dejarían casi en shock al joven.

-Ara ara. Con que el legendario Lobo Devorador de Dioses, eh...*Akeno, riendo, sudaría frió*. Sin duda, este no es mi día.

-[Hay que aguantar hasta que llegue Vali...]*Le tuvo que dar la razón a Ddraig en eso, hay que aprovechar que ese sujeto los está subestimando un poco.

Fenrir dio un aullido que sacudió la tierra y los presentes sudaron frío. Solo su presencia bastaba para hacerlos sentir un gran miedo.

-Diviértete jugando hijo mío...*Le dijo Loki cruzándose de brazos. Desea un buen espectáculo.

Daryuu-no-Miko DxDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora