Daryuu-no-Miko DxD

Capitulo 37: Caos en Rumanía

-Valerie, vamos. Deja de hablar al aire.

Ya era un nuevo día en Rumanía y Elmenhilde como emisaria de los Carmilla había ido a hablar con la amiga de Gasper sobre unas ideas para mejorar la relación de sus facciones y ponerle fin a este conflicto, pero...

La vampiresa ya miraba con preocupación cómo la líder de la Facción Tepes parecía sonreír y hablar con algo que no estaba ahí. Es más, puede jurar que es peor que antes.

No es que le tenga un gran aprecio a ella... Pero si le preocupa que su estado complique la situación delicada entre las facciones. Las cuales cada vez son cada vez más... agresivas contra el otro.

Tocó su hombro para tratar de sacarle de su estado, sólo para oír la puerta abrirse.

-¿Qué haces tú aquí?

-Lord Marius... sólo vine a hablar con Valerie de algunas cosas...

-Lo que sea que tengas que hablar, será en otro momento. Largo.

Elmenhilde no soportaba que este tipo ni nadie le diga que hacer. Merece respeto, es una miembro de la casa Carmilla, no una cualquiera. Y justo cuando le iba a decir algo... notó algo en la mano del sujeto. Un cáliz dorado...

Algo en ella reaccionó por instinto. Como ligando ese objeto a Valerie, quien los miraba en trance. Como si fueran...

-E-Eso en su mano... ¿Eso es...?

-¿De qué hablas...?

-¡No se haga el idiota conmigo! Ese cáliz... tiene el aura de Valerie... Ademas de esa aura sagrada... Lo que significa que es el Sephiroth Grial ¿Verdad?

La vampiresa sabía que ese objeto era importante. Pero al ver la cara del vampiro ahí presente, hizo que todo sea más complejo... más cuándo... este sonrió de un modo que no le gustaba nada.

-Niña tonta... hubiera sido más fácil si te hubieras largado.

¿De qué estaba...? Lo único que ella sintió luego de ello, fue como su cuerpo impactaba contra la pared de la habitación y caía al suelo. Tosió con fuerza, escupiendo sangre debido al daño recibido. Para sólo ver a Marius acercarse a ella a paso lento.

-Creo que deberé adelantar mis planes. Matarte lo hará todo más fácil. Sólo es... apresurar el avance...

-*Cough*¿Qué...?

-Ya es momento que las cosas estén bajo una sola mano. El hecho de que hayan elegido a esta mocosa sobre mí, para liderar la Facción... que idiotez. Esto es algo que se debe de hacer...

Con eso, Elmenhilde entendió que Marius planea destruir la facción Carmilla y volverse el nuevo regente de los nuevos vampiros gracias al Santo Grial, y... debe irse de aquí cuanto antes... su mente estaba centrada en querer mover su cuerpo. Pero el pie del tipo ese sobre su espalda le impide moverse.

-Pensándolo bien... me divertiré contigo antes de matarte.

... Ahora sí tenía miedo. No... No quería que él... quiso gritar, pero una patada en su estómago la calló. Maldita sea... Ella... alzó la vista para ver su inevitable destino. Pero se sorprendió al ver como Valerie tomaba el brazo de Marius, que estaba más que sorprendido al ver a la chica moverse.

-¡Suéltame estúpida muñeca!

El golpe que le dio a la chica, hizo que algo en ella se estremeciera... ¿Qué era esto...? ¿Deseos de vivir? ¿Auto preservación? No lo sabe... sólo sabe que no puede... estar aquí más tiempo.

-Je ¿Quieres que te diga un secreto mocosa?*La sonrisa maliciosa de Marius le dio escalofríos*. Muchos de tu lado no aguantaron la tentación de lo que les ofrecí... ser seres sin debilidades...*Esa revelación la dejaría casi en shock*. Hoy en día, lo que en verdad importa no es el orgullo, sino el poder... el poder para hacer lo que quieras... así de simple es la realidad...