CAPÍTULO 10

96 6 2
                                    

— ¿Qué van a tomar, pareja?

— Una cosa, no somos pareja.

— Perdón, señor. ¿Y qué van a tomar?

— Yo... un bikini de jamón y queso y un helado de vainilla, por favor.

— ENFP, no puedes pedir eso.

— Yo tomo helado cuando me da la gana.

— No hay problema, señora. ¿Qué le traemos primero? El bikini, ¿no?

— Tráemelo todo junto, gracias.

— Bueno, vale. ¿Y usted, señor?

— Un café solo.

— Muy bien, señores.

El camarero se va. Ahora tengo que hablar sobre cualquier cosa para distraer a ENFP.

— ¿Cómo te has pedido eso?

— No sé. Me apetecía. Me encanta el helado.

— ¿Y cuánto cuesta lo tuyo?

— Pues no lo sé, no lo he mirado.

— Ay señor... Si cuesta más de cinco euros, te lo pagas tú.

— INTJ, nunca había salido a comer contigo — me dice ENFP con una amplia sonrisa en su rostro.

— Ya... Hoy hemos ido a comer porque los otros están ocupados. Yo podía estar solo, pero sabía que tú te hubieras aburrido y hubieses querido ir con ellos. Pero como ellos dos tenían una cita o no sé qué... — me estoy inventando un rollo patatero porque no quiero decirle que la he invitado a una cita. Tengo que hacerle saber que solo somos amigos.

— ¿O sea que lo has hecho por mí?

— Lo he hecho porque no quería arruinar su cita, bueno, que no quería que arruinases su cita.

— ¿Dices que yo habría arruinado su cita?

— No es porque seas tú, es porque en una cita, los novios quieren estar a solas.

— ¿Y lo que estamos haciendo ahora es una cita?

— ¡Nooo! — ENFP no entiende nada.

— Pero estamos tú y yo... a solas... en un bar... comiendo juntos.

— ¡Pero no significa que sea una cita!

— Ya lo pillo, no querías venir conmigo. Lo has hecho solo por ellos... porque yo lo estropeo todo.

— Es que... ENFP, hay una sorpresa. Te he hecho salir conmigo porque... ¡le estamos preparando una fiesta sorpresa a ESTP!

— ¿Qué? ¿Por eso se van de cita?

— Sí. INFJ está decorando, INTP está preparando unas canciones para la fiesta, ENTP también está con ESFP y ESTP haciendo algo y yo me encargo de ti. Como todos sabemos que no sabes guardar un secreto, hemos decidido que tú vendrías conmigo y cuando volviéramos a casa, tú tuvieras una sorpresa también.

— ¡Qué guay! ¿Y por qué me lo has dicho?

— Porque cuando lleguemos a casa, tú tienes que saber que es una fiesta sorpresa.

— ¡Qué guay! ¿Todo esto lo has planeado tú?

— Bueno, INFJ me dijo lo de la fiesta. Lo planeamos los dos.

— Pues es una muy buena idea. Pero eso significa... que no querías salir conmigo, solo era...

— Bueno, sí que quería. Si no hubiera querido, no estaría aquí. Otra persona se hubiera encargado de ti.

— En eso tienes razón. Pues me alegro de que la persona que me acompañe seas tú.

— Señores, su comida.

— Gracias. ¡Qué buena pinta!

— ENFP, ¿cómo que qué buena pinta?

— Está rico. Pruébalo. Toma un trozo de esto y una cucharada de esto.

— No, gracias.

— Puej tú te lo piejdej.

Al final no ha sido tan malo como pensaba. ENFP empezaba a caerme mejor. Antes ya me caía bien, pero no hablábamos tanto.

HISTORIAS DEL MBTI PARA LEER SI NO PUEDES DORMIRDonde viven las historias. Descúbrelo ahora