CAPÍTULO 19

80 5 3
                                    

Hoy es un día genial. Me he levantado temprano para tener más tiempo para planear todas las actividades que vamos a hacer. INTP debe de estar durmiendo. Seguramente lo pasó mal ayer. Mis padres no se han despertado aún, así que me quedo en mi habitación hasta que entren y vayamos a desayunar.

No sé qué hacer. Voy a coger esta libreta y... voy a escribir algo. En esta libreta tengo apuntadas cosas que no puedo expresar, cosas que debería decir, pero algo me lo impide. Ejemplos: que me gusta INFJ, que pienso que ENTP es un amigo genial, que quiero mucho a INTP (esta la puedo tachar porque ya se lo he dicho), que me siento incomprendido, que me siento superior y a la vez inferior, que... No sé qué más. A veces pienso que soy más emocional de lo que creo. Siento las cosas con mucha intensidad, pero actúo de manera fría y mis decisiones se basan en la razón, no en mis sentimientos. Muchas veces, me quedo analizando mis emociones, intentando encontrar una lógica que pocas veces se puede encontrar. Y todo esto me lo guardo solo para mí, no se lo voy a contar a nadie, no pueden saber que soy tan feeler. Ya sé que solo se lo he confesado a INTP, pero es diferente porque él también es como yo en cuanto a esto del feeling.

Escucho que golpean mi puerta. En seguida, guardo la libreta y abro. Es mi madre.

— INTJ, buenos días, pequeño.

— Ya estaba despierto. ¿Y papá? ¿Vamos a comer?

— Tu padre ha ido a preparar las bolsas. Ve a despertar al dormilón de tu hermano.

— Vale.

— Bien, me voy a ayudar a tu padre. Vístete y ven a comer. Y dile a INTP que se vista también.

— Vale.

Me voy a la habitación de INTP. Me encanta despertarlo. Cuando lo hago, siento que estoy cuidando de él y que él depende de mí. Al despertarse, el primero a quien ve soy yo, y me gusta mucho que lo primero que mencione en el día sea mi nombre.

— Buenos días, pequeñajo.

— INTJ... Cinco minutos más. No, espera... ¡Diez minutos más!

— INTP, hoy es el gran día. Iremos a un parque de atracciones tú y yo como buenos hermanos.

— Vale, ya voy.

— Vístete, vamos a desayunar.

— Ya voy, pesao.

INTP se levanta y se dirige hacia su armario. Yo también me voy a cambiar.

— ¡INTP, ya estoy listo! ¡Me voy a comer sin ti!

— ¡No! Espera, tío.

INTP sale de su habitación y va hacia las escaleras. Yo lo atrapo y lo aparto de mi camino.

— ¡Quién llegue último es un feeler podrido!

— Eso es trampa, me has empujado.

— ¡Espabila, empanao!

INTP viene corriendo y se choca conmigo. Parece que no quiere ser un feeler podrido. De repente me viene a la cabeza lo que me dijo INFP.

— Oye, INTP. INFP me dijo que te dijera que pinchaste muy bien en la fiesta.

— ¿Qué? — pregunta INTP y se queda parado.

— INTP, no te pares. ¿Qué te pasa? ¿Estás enamorado?

— ¿¡Qué!? ¡No!

— Vale. Pues que sepas que yo ya he llegado. Eres un feeler podrido.

HISTORIAS DEL MBTI PARA LEER SI NO PUEDES DORMIRDonde viven las historias. Descúbrelo ahora