CAPÍTULO 93

16 2 1
                                    

— Venga, subid todos al autobús.

— ISFP, lo siento, pero ahora voy con ENTP.

— Vale...

— Tú puedes ir con ISFJ. Eh, ISFJ, hola.

— ¿ESFP? Hola. ¿Qué necesitas?

— Es que yo me voy a sentar con ENTP. Y la pobre ISFP estará solita. ¿Puedes ir con ella?

— V-vale, supongo.

— OK, gracias.

— ESFP, ¿tú qué sabes que yo voy a ir con INTJ?

— La otra vez fuiste con él. ¿Que no querías ir con él?

Pues claro que quiero ir con él.

— Bueno, ya me siento yo contigo y que él se siente con ENTP.

— No hace falta que cambies nada, gracias.

— ¿Segura?

Pues claro que estoy segura.

— Sí.

— INTJ, INFJ está aquí. Venga, siéntate ya — le dice ESFP.

— Hola, INFJ. Cuánto tiempo sin verte — dice sentándose junto a mí.

— Muchísimo — digo con sarcasmo.

— Oye, estamos muy lejos de los otros.

— Ya, bueno, es lo que hay. Pero así podemos estar más tranquilos.

Y podemos estar más a solas.

— ¿Cómo has dormido?

— Bien, supongo. Bueno, no demasiado. He tenido un sueño raro.

— ¿Cuál?

— No te lo voy a contar.

— Yo no he dormido demasiado bien. Tengo sueñito.

— Oye, no te duermas, que me aburro.

— No me voy a dormir. INTJ, ¿tienes ganas de ver a tu familia? ¿Quieres ver a tu hermano?

— No. Son todos unos pesados. ¿Quién los necesita?

— Ya. Yo también quiero ver a mi familia.

— Pero si te he dicho que...

— Sé que echas de menos a tus padres... y sobre todo a tu hermano. Y yo también echo de menos a mis hermanos. Sé que ENFP es una pesada, pero la echo de menos. Pero no quería que nos molestara en el campamento.

— Ya.

— Lo siento si está tan pendiente de ti. Ya se le pasará, supongo. A ti no te gusta para nada, ¿verdad?

— No, no me gusta tu hermana.

— Vale.

— ¿Qué? ¿Estás diciendo que no te gustaría que ENFP fuera feliz conmigo?

Claro que no quiero que ENFP sea feliz con INTJ ni que INTJ sea feliz con ENFP. Estoy celosísima.

— Sería raro.

— Ya. Tranquila, que eso no podrá pasar jamás.

— Ya. También echo de menos a ESTP. No me ha llamado en ningún momento. Supongo que ya sabía que estábamos ocupados. Al menos, me ha escrito cada noche.

— Qué majo. INTP no me ha escrito ni una sola vez. Pero me da igual. Sé que me echa de menos, el insensible ese.

— Igual que tú a él, aunque también seas un insensible.

Se hace un silencio. En realidad, no me importa que no estemos hablando sobre nada. Estoy muy a gusto con su compañía, sin tener que expresar nada con palabras. Sé que INTJ está pensando en algo y sé que él sabe que yo también estoy pensando en algo. Y nos entendemos mutuamente. Y eso es raro. Pero me gusta mucho. Es increíble lo mucho que he podido llegar a conectar con INTJ.

— INTJ, voy a escribirle un momento a ESTP. No tardaré mucho.

— Tranquila, haz lo que quieras.

Siento tener que estropear este momento, pero necesito preguntarle unas cosillas a ESTP. Me gusta mucho que INTJ me deje hacer lo que quiera, aunque estemos haciendo algo juntos. Con él no me siento presionada por tener que hacerlo todo con él solo porque seamos amigos. Y que una persona confíe en ti y no te controle para nada es muy bonito.

HISTORIAS DEL MBTI PARA LEER SI NO PUEDES DORMIRDonde viven las historias. Descúbrelo ahora