CAPÍTULO 34. ARIELLE ANASTASIE.

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Dos meses pasaron desde la boda de Álvaro y Atike, Julianne y Sergio decidieron volver, pues Sergio había sufrido de un repentino y agudo dolor de cabeza,
— Mi mujer bonita, perdóname, no quiero que te preocupes.
— Claro que me preocupa mi amor, ya pasó de ser normal estos dolores de cabeza, y tú no quieres ir al médico.
— Vamos a volver para que nuestra pequeña nazca con su abuelo.
— Ya está todo listo para que nazca aquí.
— Ya está todo listo para viajar.
Sergio abrazó a su esposa por la espalda y acarició su abultado vientre.
— Esta bien cariño, si tú lo dices así será, vamos a volver.
Salieron del departamento, subieron al auto que lo llevarían al aeropuerto Charles de Gaulle Francia, abordaron el jets privado y dos horas después estaban aterrizando en Roma y de ahí a Nápoles donde un los esperaban un helicóptero para llevarlos a Capri.
Cinco horas después
— Hija mía, que felicidad tenerte de vuelta aquí.— habló Mericci abrazando a Julianne, y luego a Sergio.
— Suegra, aquí su princesa, volvimos por qué casi está por nacer la bebé está por nacer.
— Gracias Sergio, eres un buen chico, y me alegra que seas tú el esposo de mi hija.
— Madre, Sergio y yo iremos al hospital, tiene que realizarse un chequeo completo, quiero saber el por qué ese dolor de cabeza que últimamente tiene. — Habló Julianne fingiendo no saber la causa de los colores, decaimiento y Mateos que  Sergio padecía las últimas semanas.
— No te preocupes mi amor, descansa yo iré al médico y te cuento todo.
— ¿Lo prometes? No quiero que te pase nada malo mi vida.
— No será nada malo.
Sérgio salió de la habitación, Mericci lo vio salir y luego miró a Julianne.
— ¿Que pasa hija? ¿Pasa algo malo con Sergio?
Julianne miró a su madre y sus ojos se llenaron de lágrimas, recordó aquella noche cuando salió al balcón y escuchó a los padres de Sergio hablaron.

Flash Back.

Vio a Alexander que abrazó por la espalda a Mariza mientras está lloraba a mares, Julianne no tenía idea de él por qué lo hacía, los balcones estaban cerca que se escuchaba lo que hablaban.
— Querida, ya, deja de llorar, mirá lo feliz que está nuestro hijo con su compromiso, no lo empañes con tristeza.
— ¡Ay Álex! Si supiera que mi hijo tiene el tiempo suficiente para disfrutar su felicidad, yo estaría feliz, pero no, su fuerza de voluntad está haciendo efectos positivos en su enfermedad, y eso es bueno, pero ¿Cuanto durará?
— Lo que tenga que durar mujer, mira, el médico nos dijo que le quedaban seis meses ¿Y cuanto a pasado? no perdamos la esperanza, puede que el tumor no crezca más. sus dolores ya no son frecuentes, ya no presenta nauseas  ni los mareos, eso significa que la medicina lo tiene controlado, está haciendo efectos.
— Pero existe ese temor
— Mujer, nuestro hijo está haciendo realidad su sueño que desde niño tiene, el ama a Julián desde que tiene uso de razón, ahora se casará con ella.
— Lo sé, pero ese tumor cada día crece silenciosamente, y disminuye las posibilidades de un día más para mi hijo.
— No pienses eso mujer, mejor pensemos que el poco tiempo que le queda será muy feliz
Mariza lloró desconsoladamente, sus sollozos eran fuertes y Alexander la abrazó dándole consuelo, pues el también tenía que en cualquier momento Sergio entrará en crisis y no la superara
— Si, apoyaré a mi hijo en lo que decida y quiera, estoy feliz por qué Julián y él se casarán, ojalá tenga el tiempo de ver a un hijo suyo.

Fin Flash Back.

Mericci estaba desconcertada por la noticia que Julianne le dio, entonces comprendió el por qué del apuro de la boda.
— Hija, lo siento mucho, no se qué decir, esto me supera no me lo esperaba, pobre Mariza sufrirendo en silencio cada día.
— Mamá, me enteré y decidí hacer mi vida con él, no es lástima, solo quiero rehacer mi vida y que sea lo que Dios quiera, creí que Jordan se había. casado, y ..
— No estoy diciendo que lo haces por lástima hija, solo es que esto es muy díficil de lidiar.
Julianne y Mericci estaban en la habitación, cuando de pronto un fuerte gemido puso en alerta a Mericci.
— ¡Aaaah!, mamá, es fuerte ¡Aaah! Mamá creo que ya viene. ¡Rompí fuente mamá!.
Mericci corrió a auxiliar la, mientras llamó a la ambulancia.
— Tranquila hija, inhala y exhala, ya la ambulancia está en camino.
— ¡Mamá! Duele mucho, no creo que pueda aguantar.
— Di lo harás, tu hija necesita que seas fuerte.
Julianne estaba con las contracciones, y pronto entró en labor de parto.
La ambulancia llegó, Mericci llamó a Sergio, sin tener respuesta, para dejarle la noticia de que estarían en el hospital.
— El bebé está por nacer, por favor ven pronto al hospital.
Fue el mensaje que recibió Jordan del número de Sergio.
ENTRETANTO.

— Doctor, estoy listo para  intentar robarle un poco más de vida al angel de la muerte. — Habló Sergio, con los ojos cerrados, el dolor era fuerte.
— Dejó de tomar la medicina por muchos meses, y eso fue muy contradictorio, lo poco que avanzamos, en estos meses retrocedimos un cincuenta por ciento.  Esto significa que el tumor creció mucho en estos meses.
Mariza no dejaba de llorar, y Alexander trataba de no quebrarse delante de Sergio.
— Doctor, nos explica el procedimiento de la terapia dirigida, tenemos que intentarlo todo, también tenemos que decirle a Julián para que esté pendiente de las medicinas.— Preguntó y sugirió Alexander
— El no quiere, Alex.
— Pero ella es su esposa, tiene derecho.
— Alex..
— Después del parto, le diremos la verdad asi nuestro hijo no esté de acuerdo. — sentenció Alexander, y continuó.
  — Doctor por favor explique el procedimiento de la nueva terapia.

" La terapia dirigida es un tratamiento que actúa sobre los genes o las proteínas específicos del tumor o las condiciones del tejido que contribuyen al crecimiento y la supervivencia del tumor. Este tipo de tratamiento bloquea el crecimiento y la diseminación de las células tumorales y limita el daño a las células sanas."
— ¿Medicamentos?
— Si, Medicamentos micromoleculares y anticuerpos monoclonales, los primeros, son
medicamentos con moléculas muy pequeñas que penetran las células con facilidad y se unen a dianas (moléculas adonde se dirigen las terapias) dentro de las células.
Y lo segundo, son proteínas elaboradas en el laboratorio. También se llaman anticuerpos terapéuticos.
Estas proteínas se diseñan para que se unan a dianas específicas dentro de las células cancerosas.
— Muy bien doctor, que se haga lo que se tenga que hacer.
Sérgio fue ingresado a UCI, mientras Julianne era ingresada a la sala de partos.
— Muy bien señora Bright, cuando le diga puje lo hará, ya falta poco. ¡Ahora ! Fuerte, puje, puje con fuerzas.
— ¡Aaaah! ¡Sergio! —  Dio un grito apretando la mano de un médico que se dedicó a secar el sudor de su frente, mientras su bebé llegaba al mundo, el llanto inundó  la habitación el pediatra la envolvió y la puso sobre el pecho de Julianne mientras sus lágrimas rodaban por sus mejillas.
— Es una hermosa niña, hermosa como su madre.— Habló un galeno.
— Mi amor chiquita, mi princesa, mamá está contigo vida mia. Te llamaras Arielle Anastasie.— le dio el nombre olvidando lo que alguna vez prometió.
El pediatra llevó a la pequeña para revisarla mientras Julianne era preparada para llevarla a la habitación.
Jórdan salió de la sala de partos con sentimientos encontrados, enjugó el sudor y sostuvo la mano de la madre de su hija mientras ella en gritos llamó a Sergio, sintió su corazón romperse en mil pedazos, cosa que en el momento en que su hija fue puesta en sus brazos olvidó por un momento ese dolor.
Mirando a través de los cristales del cunero una lágrima rodó por sus mejillas, Atike y Álvaro llegaron, Jordan saludo y de alejó de los pasillos.
— L'Blank.— Dijo Álvaro a modo de saludo.
— Sánchez, ¿podemos hablar un momento?
— Por supuesto. Amor ya regreso.
Atike asintió y Jordan se despidió de ella. Salieron a la sala de espera donde le dio a conocer la decisión que había tomado.
— No puedes irte Jórdan, tus hijas te necesitan, Gin, Gio y esa pequeña que recién nació.
— De cierta manera estoy viviendo tu historia, ahora fui yo quien cometió un grande error, y lo estoy pagando, mi mujer no pensó en mí mientras nuestra hija llegaba al mundo, Sergio siempre estuvo en sus pensamientos, y yo ausente a pesar de estar ahí, no me sintió.
— Jórdan, está herida, dale tiempo, tienen una hija y deben tratarse por ella.
— Estaré fuera por un tiempo, y cuando crea que no duele verla y saberla de otro volveré.
— Que te puedo decir hermano, se la impotencia que sientes. Ve mi hermano, sana tus heridas y no te preocupes por las niñas, Atike y yo las cuidaremos, además está Katiuska.
Álvaro y Jórdan se despidieron en ese pasillo de hospital, Álvaro fue en dirección de los cuneros mientras Jórdan en dirección a la mansión a ver lo que necesitaba y despedirse de Ginevra y Giorgia.
Álvaro llegó pensativo a lado de Atike, ella lo miro y sintió curiosidad.
— ¿Que quería Jordan, mi amor?
— Despedirse, de va, está devastado por la pérdida de Julián, no lo supera.
— El es el único culpable de que ella esté casada con Sergio.
— Si, lo sé amor, pero aún así el jamás se imaginó....
— Que ella superara esa humillación que le hizo delante de su supuesta esposa.
— Fue su error, y lo está pagando.
— Amor te imaginas cuando nuestro pequeño este ahí en una de esas cunas.— Expresó Atike sonriendo y cambiando de tema radicalmente.
— Si mi amor, seré el hombre más feliz del mundo.— Respondió Álvaro acariciando su vientre de seis meses.
— Y yo, yo seré la mamá más feliz del mundo, jamás lo esperé, y ahora crece aquí dentro de mí.
Álvaro y Atike luego de pasar un tiempo ahí en los cuneros salieron para ir a la habitación de Julianne.

Apuesta Por Una Noche  (6to Libro De La Saga Cielo Eterno)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora