Capitulo 22

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Su vida de casada no era muy diferente a ser soltera, despertaba, desayunaba tranquilamente con Cynthia, al terminar daban un paseo por una nueva zona de Bristol cada día solo por una hora, al volver dictaba un par de clases, la niña la seguía llamando señorita Beckett.

Más tarde tomaban el almuerzo juntas, luego una lección de dos horas de francés para culminar el día tomando el té.

La ama de llaves/nana se encargaba de la niña después de las tres de la tarde por lo que era libre para leer, el general tenía en su mayoría libros sobre guerras, pero Sophie ya les había agarrado el gusto.

Todas las noches en su habitación de señora de la casa, que era la misma que tenía antes, solo que ahora la cama era más grande, recordaba al segundo Bridgerton, quería con desesperación que empezara la temporada en Londres, para saber que se encontraba haciendo gracias a la columnista lady Whistledown.

Dos meses habían pasado desde que era la señora Marshall, cuando una mañana de un frío 24 de diciembre el general Daniel Marshall falleció.

Para sorpresa de todos su hija se encontraba bastante tranquila con la situación, Sophie arreglo los pagos de los empleados, ahora se encontraba sola con Cynthia en la casa, hasta que llegó el abogado del fallecido general, una semana después.

Se encontraban los tres en el saloncito, después de que Cynthia había insistido, el abogado Wilkinson abrió su portafolio y saco unos papeles.

- señora Marshall, como sabe la señorita Cynthia Amelie Marshall debe ir a la escuela de señoritas en Londres, ya todo está listo, debe llegar a más tardar este viernes para no tener inconvenientes. Allí será alimentada y vestida de acuerdo a las costumbres del lugar, podrá visitarla todos los sábados desde las tres de la tarde hasta las cinco de la tarde del mismo día. Los domingos podrá salir de la institución solo bajo su ala, nadie más puede sacarla y como se imaginara nadie más puede ingresarla aparte de usted, de desacatar ese mandato, será acusada de traición por interrumpir servicios militares - mientras el abogado hablaba Cynthia estaba llorando pero en esta parte se quedó en silencio muy atenta de lo que el abogado decía- podría llevarla a la horca - continuo el abogado - con respecto a su estadía en Londres, este apartamento - saco unas escrituras - está a su nombre, el hermano del señor Marshall es el encargado de pagar sus gastos anuales, de desacatar ese mandato será despojado de la herencia y el siguiente heredero tendrá que cumplir la orden. Así que no se debe preocupar, aquí está el primer pago de los próximos seis meses - le dio un sobre - tiene alguna inquietud?

- creo que todo esta claro.

- de acuerdo - el abogado estaba recogiendo los papeles- lo olvidé por completo, el general también estipuló que usted es libre de desposar con quién desee y seguirá recibiendo el pago, hasta que fallezca. Su responsabilidad con Cynthia Amelie Marshall se verá culminada cuando ella encuentre empleo en su mayoría de edad o que se despose, mientras tanto deberá cumplir con sus visitas.

- eso está sobre dicho, nada me lo impedirá.

El abogado terminó de recoger los papeles.

- el hermano menor del general, requiere que desocupe esta casa lo más pronto posible.

- no quiere ver a su sobrina?

- nunca pregunto por ella.

- entiendo- Sophie abrazo a la niña - hoy mismo viajaremos a Londres.

Después de que el abogado se marchó, ella pidió un alquiler de carruaje para que las llevarán a Londres, luego volvió a la casa acompaño a Cynthia para recoger sus pertenencias, al terminar Sophie recogió sus vestidos, cuando salió de la habitación, la niña miraba fijamente la puerta de la habitación principal.

La Noche que Cambio Mi VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora