Mi destino

Capítulo 48 Celos parte I

Lea

A la mañana siguiente le escribí un mensaje a Blake para ver si quería quedar. Después de un rato me llegó un mensaje suyo.

Blakey: Claro, estoy en la playa, ven cuando quieras.

Lea: En unos diez minutos estaré allí.

Me pongo un vestido azul y me hago una pequeña trenza espiga con un par de mechones sueltos.

Cuando llego veo a Enzo y a Blake hablando en una mesa. Me acerco y ellos me saludan.

- Hola estrellita, ¿qué tal?

- Muy bien - cuando les iba a preguntar a ellos me fijo en un detalle - y ya veo, vosotros dos os lo pasasteis muy bien cuando me fui - señalo el pequeño mordisco que tienen ambos en el cuello haciendo que se sonrojen - me alegro mucho por vosotros.

- Gracias Lea - dijo Enzo - creo que nos dimos cuenta de que estábamos destinados a estar juntos desde el primer momento.

- Se notaba porque poco más y me echáis a patadas - reímos - por cierto, cuando puedas tienes que ir a hablar con Tom y Candy - vi su cara de preocupación e intenté que se relajara - no te preocupes, son muy majos - él seguía pareciendo intranquilo pero aun así asintió.

- Por cierto Lea, estoy muy indignado - hablo Blake - tienes más informado a Enzo que a mi sobre tu relación con Jake - dijo fingiendo indignación.

- Puede ser, hacía mucho que no hablábamos. Lo más reciente puede ser que me despertó a las tres de la mañana.

- ¿En serio? - asentí - ¿por qué?

- Por la tarde estuvimos hablando y no quiso aceptar lo que le dije pero después vino y hablamos con más tranquilidad.

- ¿Te pusiste en modo psicóloga con él? - preguntó Enzo y yo asentí.

- Era lo que necesitaba para poder avanzar.

- Creo que cuando nos conocimos te pusiste alguna vez así conmigo - empezó a hablar Blake - no teníamos mucha relación pero se notaba que se podía confiar en ti. Hablamos un par de veces hasta que me preguntaste "¿Qué es lo que escondes de ti?" me asustaba mostrar que me gustaban los chicos por como pudiera reaccionar la gente de mi entorno por lo que te estuve evitando hasta que un día fui a hablar contigo porque no dejaba de darle vueltas y tú me mostraste que no importaban los demás si eso hacía que yo no pudiera ser la versión más real de mí mismo.

- Me acuerdo y por cierto, creo que tú también me despertaste.

- Puede que sí - dijo recordando esa noche en la que empezamos a ser muy buenos amigos.

Seguimos conversando un rato hasta que apareció Marc.

- Hola - saludó - ¿cómo está mi amiga que en unas horas será un año más vieja? - lo miré confusa - ¿es en serio, Lea? - preguntó divertido - mañana es cinco de agosto.

- Eso es imposible, estamos a tres - miré mi móvil y me di cuenta de que lo que decía Marc era verdad, mañana era mi cumpleaños y a mi casi se me olvida.

- Eres un desastre con patas - dijo Blake - ya no sabes ni en el día en que vives - niega divertido con la cabeza.

- Por cierto Marc, él es Enzo, un amigo - los presento.

- ¿Eres nuevo por aquí, no?

- Así es, llegué ayer.

- Pues hay que salir mañana por tu cumpleaños y así lo celebramos - dijo Marc.

- A mí me gusta la idea - dijo Blake - hace mucho que no lo hacemos, Lea.

- No sé si es una buena idea.